El conocimiento del suelo, de sus características y aptitudes, así como de su distribución geográfica dentro de un área, es fundamental para planificar racionalmente su uso. La finalidad de las cartas o mapas de suelos es, precisamente, divulgar conocimientos sobre las propiedades de los suelos y mostrar su distribución, clasificar cada tipo de suelo presente de acuerdo a su aptitud de uso y dar a conocer las normas generales para su manejo y conservación.
El presente estudio está destinado principalmente al productor agropecuario, con el propósito de ayudarle a conocer mejor sus tierras y contribuir a que las maneje en forma adecuada, aumentando su nivel de aprovechamiento. También está dirigida a los extensionistas y agrónomos para que las utilicen en sus tareas de divulgación, asesoramiento y manejo de campos, a los ingenieros civiles e hidráulicos para sus proyectos de construcción de caminos, edificios y otras estructuras para las cuales deben poseer datos sobre propiedades de los suelos.
La información suministrada por las Cartas de Suelos permite, además, su interpretación con otros importantes fines, entre ellos:
1) Determinar la capacidad de uso de los suelos y estimar su productividad bajo determinados niveles de manejo.
2) Planificar el uso racional del suelo a distintos niveles (regional, subregional y predial), permitiendo adecuar las prácticas de manejo y conservación que exigen las distintas clases de tierras, para una mayor y sostenida productividad agrícola.
3) Dar las bases para la investigación y experimentación agropecuaria, permitiendo la extrapolación de resultados experimentales dentro y fuera del país.
4) Establecer criterios técnicos para la administración del crédito y para la definición de políticas agropecuarias, crediticias, impositivas y de colonización.
5) Determinar las áreas de recuperación económica afectadas por erosión, salinidad, alcalinidad, drenaje deficiente, etc.
La Carta de Suelos de la República Argentina está destinada a conocer los resultados de los estudios de campo, gabinete y laboratorio efectuados en un área, presentándolos en forma de textos explicativos y de mapas a escalas diversas.
Este Informe confine la Carta de Suelos, separadas en cuatro fotocartas (cartas con fondo fotográfico) y un texto explicativo correspondiente a la Hoja 3563-3 LABOULAYE, del Instituto Geográfico Militar. Dicha Hoja cubre una superficie de aproximadamente 1.702 km2. comprendida entre los paralelos 34°00’ y 34°20’ de latitud Sur y los meridianos 63°0Ó’ y 63°30’ de longitud Oeste, abarcando parte del departamento Pte. Roque Saénz Peña en la Prov. de Córdoba. (Figura 1)
Las fotocartas tienen una escala aproximada de 1:50.000 que comprenden a las hojas, a esa misma escala, del Instituto Geográfico Militar denominadas 3563-3-1 “Laboulaye”: X3563-3-2 “Estancia La Oriental”; 3563-3-3 “Villa Rossi” y 3563-3-4 “Rosales”. La situación relativa de estas cartas con respecto a la división política, se puede observar en la Fig. 2.
Del área que abarca la Hoja LABOULAYE no existían antecedentes sobre cartografía de suelos. Sólo se habían hecho estudios de caracterización de perfiles de algunos suelos dominantes como complemento de experiencias sobre fertilización y ensayo de mejoramiento de variedades. En la Bibliografía que contiene esté Informe, se mencionan numerosos trabajos referidos especialmente a aspectos agronómicos del área.
Los materiales básicos usados para la cartografía de los suelos, fueron las fotografías aéreas a escala 1:20.000 del año 1972; los mo-saicos aerofotográficos semi-apoyados a escala 1:50.000 y las hojas topográficas a escala 1:50.000 y 1:100.000 del IGM. La metodología utilizada incluye la fotointerpretación y los pro-cedimientos de reconocimientos y caracterización de suelos en el campo, tal como se describen en NORMAS DE RECONOCIMIENTO DE SUELOS (Etchevehere, 1976) basados en el SOIL SURVEY MANUAL (USDA, 1962- 1974).
La clasificación taxonómica de los suelos se basa en el sistema americano SOIL TAXONOMY (USDA, 1975). Dado que los análisis mecánicos disponibles no segregan las fracciones 50-74 y 74-100 micrones, sino que se determina sólo la fracción arena muy fina (50-100 micrones), en la determinación de la clase por tamaño de partícula a nivel de familia, se ha empleado
el criterio de considerar esta arena muy fina en dos mitades, asignando una a los limos y la otra a las arenas.
Las tierras definidas en el mapa fueron ubicadas por su capacidad de uso en algunas de las ocho clases definidas en el sistema del USD A (Klingebiel y Montgomery, 1961).
COORDINADOR PLAN MAPA DE SUELOS:
Dr. Bahill JARSUN A. (1)
CORRELACION, REVISION GENERAL Y AJUSTES:
Geól. Hésmer BOSNERO (1)
CAPACIDAD DE USO DE LAS TIERRAS Y SUPERVISION TAREAS DE CAMPO:
Dr. Bahill JARSUN A.
Geól. Hesnier BOSNERO Ing. Agr. Carlos PURICELLI (1)
RECONOCIMIENTO DE SUELOS:
Geól. Edgar LOVERA (1)
Geól. Jorge SANABRIA (1)
Los datos analíticos fueron realizados en el Laboratorio de Suelos y Aguas de la SMAG y RR bajo la dirección de los Dres.:
Miguel A. SEREDA y Jorge KAMERMAN (2)
Las condiciones Agroclimáticas fueron tratadas por el:
Ing. Agr.: Raúl DIAZ (1)
Colaboraron en el reconocimiento de suelos:
Agr. Eddy ROSSETTI (1)
Agr. Ramón ASTRADA (1)
Agr. Roberto SANCHEZ (1)
Bach. Guillermo PETROPULO (1)
Colaboraron además en otros aspectos:
Inventario y medición de áreas:
Bach. Guillermo PETROPULO
En tareas analíticas:
Biol. Lucía ARTICO
Geól. Juan C. FERRERO
Geól. Normando VALSANO
Técn. Quím. Aurora GARRIDO
Técn. Quím. Horacio PALAVECINO.
Dactilografía:
Sra. Marta L. de Domínguez
Sra. Olga Belardinelli
Srta. Gloria Domínguez
Dibujo cartográfico:
Sr. Claudio Condado.
La región está caracterizada fundamentalmente, por constituir una amplia zona de lomas muy aplanadas, con escurrimiento superficial lento y amplios sectores ligeramente deprimidos con escurrimiento superficial muy lento. Estas dos unidades presentan inclusiones de sectores francamente deprimidos, bajos propiamente dichos y lagunas y charcas temporarias y semitemporarias, en las que el escurrimiento superficial es deficiente y que constituyen cubetas y depresiones cerradas de acumulación de las aguas de escorrentía, produciéndose el anegamiento e inundación de las mismas en épocas muy lluviosas. Por otro lado, presentan en algunos sectores intercalaciones de relictos medanosos, con escurrimiento rápido.
En cuanto a los materiales que dieron origen a los suelos, gradan desde francos para algunas lomas planas y depresiones, franco arenosos en otros sectores y arenosos francos en sectores ondulados y relictos medanosos. En todos los casos la permeabilidad es moderada a rápida. Pero en la mayor parte de los sectores la infiltración del agua en profundidad se vé impedida por la presencia de la capa freática alta, y en partes en superficie o muy cerca de ella.
Estos sedimentos de deposición eólica constituyen una franja de transición entre los materiales eólicos finos (loéssicos) y los materiales arenosos del sudeste que conforman la pampa arenosa cordobesa-pampeana. Es de suponer que gran parte de los materiales finos y arenas finas fueron transportadas por el viento desde el sudeste, como lo demuestran los amplios sectores erosionados que presenta ese sector y fueron depositados en el área, cubriendo esta amplia depresión que sirvió de contención natural y conformando el actual paisaje de depresiones con intercalaciones de lomadas muy planas y algunos relictos medanosos.
El drenaje que precisamente lo define el escurrimiento superficial (que es función del relieve) y la permeabilidad (que es función del tipo de material, presencia de capas subsuperficiales impermeables, napa de agua alta, etc.) es para los suelos del área muy variable, y van desde bien drenados para las lomas arenosas, moderadas en las lomas planas, imperfecto en los sectores ligeramente deprimidos e impedido en los bajos. En los dos últimos la presencia de sales solubles y alcalinidad sódica, es una consecuencia del mal drenaje y actúan negativamente en el mismo.
Un hecho observable, es que algunas rutas y la vía del ferrocarril, cruzan los sectores bajos y actúan como diques de contención, favoreciendo el anegamiento de los mismos, y que cuando las lluvias son intensas y abundantes excede la capacidad colectora de las mismas, produciéndose un avance de las aguas hacia los sectores más positivos del relieve.
Laboulaye, ubicado en la latitud Sur de 34° 08’ y en la longitud Oeste de 63° 24’, con una elevación de 138 metros sobre el nivel del mar, es asiento de una estación sinóptica - climática del Servicio Meteorológico Nacional. La misma funciona desde 1913, con interrupciones durante el lapso 1927 a 1938.
La condición continental de Laboulaye se expresa en la amplia variación de temperaturas a lo largo del año. Las amplitudes térmicas media de 14,6° C y absoluta de 51,5° C son indicadores de la mencionada característica.
La caracterización mensual y anual media del régimen de temperaturas se presenta en el cuadro 1.
Esta adversidad ocurre prácticamente todos los años. Entre 1950 y 1982, no se registraron granizadas sólo en 1956 y 1977. La mayor frecuencia de ocurrencia se registra en enero, abril y diciembre.
La serie pluviométrica bajo análisis corresponde al lapso 1921-1956 y fue recopilada del archivo del Servicio Meteorológico Nacional.
La precipitación media anual es de 737 mm, con oscilaciones extremas entre 384 mm y 1139 mm.
La tendencia de lluvias anuales es de 0,9 mm/año; si bien decreciente, su significancia estadística es nula. Es decir, que no hay evidencias objetivas de un decrecimiento sistemático de los totales anuales de precipitación (Gráfico 1).
MES |
LLUVIA (mm) |
Coeficiente de Variación (°/o) |
||
Promedio |
Valor máximo |
Valor mínimo * |
||
Enero |
88 |
223 |
11 |
66 |
Febrero |
87 |
240 |
18 |
69 |
Marzo |
102 |
334 |
2 |
67 |
Abril |
59 |
160 |
2 |
71 |
Mayo |
30 |
98 |
1 |
84 |
Junio |
19 |
96 |
1 |
129 |
Julio |
19 |
96 |
0 |
123 |
Agosto |
18 |
72 |
0 |
111 |
Setiem bre |
47 |
166 |
3 |
90 |
Octubre |
89 |
269 |
2 |
65 |
Noviembre |
85 |
219 |
2 |
56 |
Diciembre |
94 |
281 |
13 |
71 |
AÑO |
737 |
1139 |
384 |
22 |
La distribución estacional resalta el carácter monzónico del régimen pluviométrico; en efecto, durante el semestre de primavera y verano, serie 1922-1955, precipita el 74% de la lluvia media anual (Gráfico 2).
La magnitud de la variabilidad de las lluvias mensuales se advierte a través de sus correspondientes coeficientes de variación (Cuadro 3). Semejante dispersión de los totales de lluvia, aún para aquellos meses presuntamente húmedos (Marzo y Octubre), indica que los promedios deben utilizarse con precaución como indicadores del aporte hídrico al sistema agropecuario zonal.
MES |
PROBABILIDAD DE LLUVIAS (%) MAYORES O IGUALES A X mm |
||||||
20 |
50 |
75 |
100 |
150 |
200 |
250 |
|
Enero |
91 |
66 |
46 |
31 |
13 |
5 |
2 |
Febrero |
95 |
72 |
51 |
34 |
14 |
5 |
2 |
Marzo |
91 |
71 |
54 |
40 |
21 |
11 |
5 |
Abril |
80 |
46 |
28 |
16 |
5 |
2 |
* |
Mayo |
53 |
19 |
8 |
3 |
1 |
* |
* |
Junio |
33 |
10 |
4 |
2 |
* |
* |
♦ |
Julio |
34 |
11 |
4 |
2 |
* |
* |
* |
Agosto |
32 |
8 |
3 |
1 |
* |
* |
* |
Setiembre |
68 |
36 |
20 |
11 |
3 |
1 |
* |
Octubre |
92 |
67 |
48 |
33 |
14 |
6 |
2 |
Noviembre |
94 |
69 |
48 |
31 |
12 |
4 |
1 |
Diciembre |
93 |
71 |
53 |
37 |
17 |
8 |
3 |
Una adecuada aproximación al conocimiento del régimen de lluvia se obtiene mediante la probabilidad de ocurrencia de precipitaciones (Cuadro 4).
Esta propuesta se considera más apropiada a la marcha de las modalidades productivas, fuertemente condicionadas a la disponibilidad hídrica.
Con la información de temperatura y lluvia medias mensuales se confeccionó el balance de agua promedio, según la metodología de Thornthwaite, modificada por Zeljkovich y otros.
La temperatura media mensual correspon-de a la serie 1961/1970.
La capacidad máxima de retención del suelo modal serie Laboulaye es de 164 mm de agua total en el primer metro de espesor. En consecuencia, la tabla de retención utilizada fue la de 150 mm de agua.
En la confección de este balance hidrológico medio se asumió que el contenido de agua del suelo en febrero es equivalente al punto de marchitez permanente (Cuadro 5).
El análisis del cuadro revela que la importancia del agua almacenada en el suelo es prácticamente insignificante. En definitiva, el hipotético balance hídrico promedio se reduce al cotejo entre aportes hídricos, las lluvias, y las pérdidas de agua, la evapotranspiración, del sistema (Gráfico 3).
MES |
ETP mm) |
LLUVIA (mm) |
ETR (mm) |
DEEICIENC- (mm) |
ETR/ETP ( % ) |
|
Julio |
17 |
19 |
17 |
0 |
100 |
|
Agosto |
30 |
18 |
18 |
12 |
60 |
|
Setiembre |
50 |
47 |
47 |
3 |
94 |
|
Octubre |
87 |
89 |
87 |
0 |
100 |
|
Noviembre |
136 |
85 |
85 |
51 |
62 |
|
Diciembre |
174 |
94 |
94 |
80 |
54 |
|
Enero |
183 |
88 |
88 |
95 |
48 |
|
Lebrero |
137 |
87 |
87 |
50 |
64 |
|
Marzo |
104 |
102 |
102 |
2 |
98 |
|
Abril |
61 |
59 |
59 |
2 |
97 |
|
Mayo |
35 |
30 |
30 |
5 |
86 |
|
Junio |
20 |
19 |
19 |
i |
95 |
|
AÑO |
1034 |
737 |
733 |
95 |
71 |
La modalidad productiva predominante del área es el tambo asociado con la agricultura, de acuerdo al más reciente diagnóstico efectuado. Los cultivos más difundidos son el trigo y el sorgo granífero.
Exhibe una tendencia creciente, el área destinada a la siembra de girasol. Por el contrario, resulta irrelevante la superficie dedicada a los cultivos de soja y de maíz.
Los conceptos precedentes dan una idea clara del límite impuesto por la disponibilidad hídrica a las modalidades locales de producción. La asociación entre tambo y agricultura responde a la necesidad de asegurar la estabilidad productiva del sistema a través del tiempo. Ese hecho acontece debido a las fluctuaciones en las lluvias, y, en consecuencia en la ocurrencia de sequías.
El cultivo de trigo experimenta las referidas limitaciones hídricas, particularmente en las etapas de implantación, macollaje y en-cañado. Asimismo, la fecha de siembra, en última instancia, es consecuencia de la ocurrencia de lluvias.
En este sentido, las probabilidades de lluvias son comparativamente más elevadas en mayo que durante junio o julio. Si bien el balance hídrico promedio indicaría una deficiencia hídrica insignificante durante el invierno, en la práctica tanto el macollaje como la encañazón ocurren con un sistema radicular superficial y poco denso, al estar el suelo normalmente seco.
Asimismo, con la erraticidad de las lluvias de otoño, que en promedio equilibran las pérdidas de agua del suelo, no puede aguardarse que la captación de agua por la práctica de barbecho tradicional sea decisiva.
La intensa y recurrente sequía del verano impide la obtención de niveles rentables de productividad en los cultivos de soja y de maíz. La introducción de variedades precoces en ambas especies con rindes razonables constituiría una alternativa de diversificación a intentar en el futuro. En el caso del maíz resulta un requisito excluyente que la fecundación y el comienzo de llenado de granos suceda antes del período más caluroso del año.
Los datos agroclimáticos presentados revelan el difícil marco ambiental en el que se desenvuelve la explotación agropecuaria en Laboulaye. En consecuencia, la programación racional de las actividades de la empresa tiene como tontinua referencia el clima local. De allí que las estrategias empresariales tales como conservar la humedad del suelo, disponer de reservas forrajeras, proveer de reparos forestales a los animales durante el verano y asegurar contra granizo responden a las características climáticas que prevalecen en la zona.
Dado el efecto condicionante que tienen la temperatura y humedad del suelo, tanto en la evolución de su génesis como en el desarrollo de las plantas, los factores de clima edafico son permanentemente considerados en la clasificación taxonómica en sus distintos niveles cate-góricos.
De acuerdo con Van Wambeke y Scoppa (1976) para estimar un conjunto de valores a partir de registros climáticos, el área de la Hoja LABOULAYE se encuentra en la zona de transición entre los regímenes de humedad de suelo údico y ústico, mientras que el régimen de temperatura corresponde al definido como térmico (Soil Taxonomy, 1975).
Hacia el Este de la Hoja, las condiciones prevalentes para los suelos de drenaje libre son las que definen los Subgrupos údicos. El régimen údico implica que en la mayoría de los años (por lo menos 6 de cada 10) una porción del suelo conocida como sección de control de humedad no está seca durante más de 90 días acumulativos en el año, ni 45 días consecutivos en verano.
En el Oeste, la humedad disponible disminuye hasta las condiciones que definen al régimen ústico el cual implica humedad limitada pero suficiente en el momento en que es requerida por el crecimiento de las plantas.
En cuanto al régimen de temperatura del suelo, es uniforme para toda la Hoja y co-rresponde al caracterizado en la taxonomía como régimen térmico, en el cual la temperatura media anual del suelo es igual o mayor a 15° C pero inferior a 22° C, y las diferencias entre las temperaturas medias de verano e invierno es mayor a 5o C a 50 cm de profundidad.
Desde antiguo, caracterizados botánicos y naturalistas se han ocupado de la vegetación na-tiva de la región a la cual pertenece la hoja LABOULAYE.
Así PAROD1 (1964) en la estepa pampeana, distrito subehaqueño, aclara que “posee la vegetación herbácea del Chaco y salvo la falta de árboles, es notablemente semejante a la zona oriental de aquel territorio fitogeográfico”.
Recientemente CABRERA (1971) puntualizó el hecho que la “provincia del espinal” rodea en forma de arco a lá “provincia pampeana” en el sector de los 31° de latitud sur; es por ello que se observan ejemplares de especies arbóreas de tipo xerófilo, del “distrito del alga-rrobo” introducidos dentro del área más húmeda de la “provincia pampeana”.
RAGONESE (1967) repite esta delimitación geográfica. Debe aquí remarcarse que se trata de una región profundamente alterada por el hombre, particularmente desde que la colonización agrícola tomó impulso en la última década del siglo pasado. En la actualidad es casi imposible hallar comunidades vegetales intactas: el desmonte, el fuego y el arado han alterado irreversiblemente la vegetación nativa aún en campos de inferior calidad, que son los menos modificados, como así también el área vecina a vías férreas.
En su lugar, existen cultivos agrícolas (maíz, soja, trigo, sorgo, girasol, mijo) y pasturas particularmente basadas en la alfalfa, acompañadas por gramíneas exóticas (Festuca alta, Pasto ovillo, Falaris bulbosa, etc.) o tolerantes a las condiciones edáficas existentes (Agropiro alargado, Tréboles de olor amarillo y blanco) y diversidad de malezas.
Originalmente, en las porciones de paisaje con relieve positivo, dominaban el “pasto miel” (Paspalum s.p.), Panicum s.p., Setaria s.p., etc.); en cambio las “flechillas” (Stipa s.p.) y Pipto- chaetium s.p., Poa s.p., eran mucho menos frecuentes, aumentando su difusión hacia el este y sudeste (PARODI, 1964).
El valor forrajero de estas pasturas se vio acrecentado por la naturalización y difusión de especies tales como el “raigrass” (lolium multiflorum), trébol blanco (Trifolium rapens), tréboles de carretilla (Medicago s.p.); también se difundieron especies como las “gramillas” (Cynodon s.p.) y “pasto puna” (Stipa brachichaeta) que son malezas en cultivos anuales y plantas tóxicas para el ganado las primeras y enemiga de la ^alfalfa la segunda.
En áreas de paisaje ligeramente deprimido y “de cañada” con diferente grado de salinización y alcalinidad, aparecen especies del género Distichlis, llamadas comúnmente “cola de muía” o “pelo de chancho”; Poligonum s.p.; Atriplex s.p. y aún una leguminosa como Malilotus indi- cus.
En este tipo de campos y extendiéndose a las áreas con suelos normales, se observan male-zas muy agresivas como “morenita” (Kochia scoparia”; “sunchillo” (Wedelia glauca): “cebo- 11 ín” (Cyperus rotundus), etc.
Por su importancia económica, deben mencionarse también otras especies que se com-portan como malezas, tales como: “sorgo de alepo” (Sorghum halepense); “nabos” (Brassica campestris); “quinoa” (Chenopodium s.p.); “Chamico” (Datura ferox); “cien nudos” (poly- gonum aviculare); “cardos” diversos (Cynara s.p., Silybum marianum, Cardus s.p.); “abrojo” o “abrojo grande” (Xanthium cavanillesii); “capiquí” (Stellaria media); “enredadera euro-pea” (Convolvulus arvensis); “hinojo” (Foenicu- lum vulgare var. capillaceum); “yuyo colorado” (Amaranthus hibridus var. quitensis); “yerba del sapo” (Marrudium vulgare), etc. (MARZOCCA, 1957).
Con respecto a especies arbóreas y arbustivas, es conocido que en la región pampeana no hay naturalmente árboles que, sin embargo, pueden adaptarse sin mayores problemas si son plantados por el hombre.
Dada la vecindad con el “distrito del algarrobo” ya mencionado, aparecen ocasional-mente relictos de “algarrobos” blancos y negros (Prosopis s.p.); “tala” (Celtis spinosa); “chañar” (Geoffroea decorticans); “espinillo” (Acacia caven), etc.
Entre las especies arbóreas introducidas por el hombre y de buen comportamiento en la región, citamos el “paraíso” (Melia Azedarach), importante en el pasado por no ser atacado por la langosta; “eucaliptus” (Eucaliptus viminalis, generalmente); “acacia blanca” (Rolinia pseudo- acacia); “olmo” (Ulmus pumiíia, frecuentemen-te); “casuarina Cunninghamiana); “álamos” Populus s.p.).
La ganadería, fundamentalmente invernada y tambo, es de significativa importancia en el área de influencia de LABOULAYE, por tal razón se incluye una evaluación de la calidad de aguas tanto para uso humano como animal y los factores limitantes (Cuadro N° 6).
Haciendo un análisis y que puede generalizarse para el área se deduce:
USO HUMANO:
El 67,7 % no son aptas, el 13 % son tolerables y sólo el 19,3 % son aptas. Las limitantes se deben a elevados tenores de Sulfatos, presencia de Arsénico o ambos.
USO ANIMAL:
Se consideró en la evaluación la calificación siguiente:
Aptas, comprende el 48,4% de las muestras consideradas y no presentan limitantes.
Moderadamente aptas, el 9,7 % y comprende aguas aptas para cría, moderadamente aptas para invernada y tolerables para tambo y porcinos.
Tolerables a no aptas, comprende el 35,5% y se consideró a las aguas tolerables para invernada, moderadamente aptas para cría y no aptas para porcinos y tambo.
No aptas, comprende sólo el 6,4 % y no debe recomendarse su uso.
En todos los casos las limitaciones se deben a elevados tenores de Sulfatos y presencia de arsénico.
En este capítulo se dan a conocer las características de los suelos que se han reconocido en la Hoja LABOULAYE, y se describen todas las unidades cartográficas señaladas en las fotocartas, las cuales llevan sobreimpreso los límites y símbolos que corresponden a las llamadas unidades cartográficas o de mapeo de suelos.
Cada unidad cartográfica representa un suelo o una agrupación de suelos vinculados geográficamente. Algunas veces la unidad cartográfica corresponde a un paisaje homogéneo y los suelos suelen tener entonces, características muy similares entre sí, como sucede en la mayor parte de las lomas o campos altos del área estudiada.
Un grupo homogéneo de suelos desarrollados sobre un mismo material originario y donde la mayor parte de sus características son similares entre sí, constituyen una serie de suelos. Dentrp de cada serie se admite una gama de variaciones en sus características, pero en general los suelos de una misma serie son muy semejantes entre sí. Cada serie de suelos se identifica con un nombre tomado de alguna localidad, paraje o estancia de los alrededores del lugar donde dicho suelo se halla mejor representado o fue primeramente estudiado. La serie es la más pequeña de las unidades taxonómicas del sistema de clasificación empleado.
Si bien los suelos de una misma serie son prácticamente similares en todas sus propiedades y caracteres, dentro de un área cartografiada como perteneciente a una misma serie se pueden observar sectores cuyos suelos posean alguna propiedad externa o interna que difiera de lo que se tiene por “normal” para la serie. Por ejemplo, una misma serie puede ofrecer diferencias cuando sus perfiles están ubicados en una pendiente en lugar de una planicie casi horizontal, o tienen un grado de drenaje distinto al normal. Cuando se estima que las diferencias observadas pueden afectar el uso potencial y requerir distinto manejo, a esos sectores se los distingue y separa en el mapa como fases de la serie respectiva.
Algunos sectores de las fotocartas. que se presentan en este informe, las unidades cartográficas corresponden a series puras. Los caracteres de los suelos comprendidos en ellas son suficien-temente similares como para que se comporten de igual manera ante un mismo uso. Sin embargo, debe tenerse en cuenta que aún en las unidades consideradas como series puras puede existir algún suelo menor o poco representativo, que cubra una superficie difícil de representar a la escala utilizada. Por ello se advierte al lector so-bre la posibilidad de que una serie cartografiada como unidad pura, pueda encontrarse un 10 ó un 15 °/o de inclusiones de suelos menores. En los mapas, el área mínima señalada como unidad de suelo individual es de una hectárea y un cuarto aproximadamente.
Cuando un paisaje no es homogéneo en cuanto a sus suelos, o cuando por razones de escala no ha sido posible separar series puras, en los mapas se señalan las asociaciones o complejos de suelos; en estas “unidades cartográficas compuestas” se agrupan dos o más suelos (series) distintas. Las asociaciones de suelos podrían en muchos casos ser objeto de estudios más detallados, es decir a escalas mayor, para delimitar por separado los suelos que incluyen.
Muchos de los complejos corresponden a campos bajos, bañados o depresiones y áreas de derrame. En algunos complejos fue posible identificar las series que los integran; en estos casos sus nombres se expresan de la misma manera que en las asociaciones. Cuando no se ha determinado o identificado a los suelos que forman el complejo, la unidad recibe un nombre general.
En el punto 3.2 se procede a señalar los rasgos distintivos y las características que identifican a cada una de las series. En la descripción de cada serie de suelos se indican en primer término la secuencia de horizontes que la caracteriza, las propiedades internas y algunas características externas del suelo, la posición que suele ocupar en el paisaje y, entre otras condiciones, su drenaje natural. A continuación se hace la descripción técnica de un perfil típico de la serie con los datos analíticos respectivos, destinados especialmente a los técnicos que se interesen por una información más exhaustiva de la serie. La clasificación taxonómica de los suelos que se describen el punto 3.2 se consignan en el cuadro 7. En el se ubica cada suelo en las diversas categorías del sistema empleado.
Seguidamente en el punto 3.3 se describen las unidades cartográficas constituidas por una serie pura o fases de una sola serie. Estas son unidades simples y ocupan áreas relativamente más homogéneas.
La descripción de las áreas no homogéneas y de unidades que agrupan más de un suelo diferente, es decir las asociaciones y los complejos de suelos, se consignan en el punto 3.4 bajo el título de UNIDADES CARTOGRAFICAS COMPUESTAS. De cada asociación o complejo se establecen las características del paisaje, los suelos que la integran, los porcentajes en que in-terviene cada serie —cuando ha sido posible es-timarlos— y breves consideraciones sobre la aptitud para el uso, tales como las referidas a los problemas derivados de características desfavorables del suelo, del grado de erosión, del mal drenaje, etc.
La estimación del porcentaje de superficie que cubre cada suelo dentro de una asociación o un complejo es de suma utilidad para establecer la capacidad de uso válida para toda la unidad compuesta, de acuerdo a las capacidades de uso individuales de cada suelo integrante. Esto adquiere mayor importancia en los casos de unidades combinadas que están integradas por suelos de aptitudes agropecuarias muy dispares, como sucede cuando un complejo está formado por suelos arables aptos para agricultura y suelos alcalinos, muchas veces ineptos para cultivos de cosecha.
Las referencias de orden utilitario o interpretativo de todas las unidades mapeadas (series, fases, asociaciones o complejos) se indican en el capítulo 4, donde se consígnala clasificación por aptitud de cada unidad.
En cuanto a la distribución geográfica de las unidades reconocidas, éstas aparecen en las fotocartas identficadas por medio de sus respectivos símbolos. En la Guía de Unidades Cartográficas, se consignan dichos símbolos y los nombres de las unidades.
La figura 3 ofrece una visión esquemática de la distribución de los suelos principales del área; se trata de un croquis generalizado, construido a partir de los mapas básicos respectivos.
ORDEN |
SUBORDEN |
GRAN GRUPO |
SUBGRUPO |
FAMILIA |
SERIE |
HAPLUSTOL |
UDORTENTICO |
franca gruesa |
Est. Los Andes |
||
USTOLES |
franca gruesa |
Laboulaye |
|||
UDICO |
franca gruesa |
Leguizamón |
|||
MOLISOLES |
ARGIUSTOL |
UDICO |
franca gruesa |
La Payanca |
|
ALBOLES |
NATRALBOL |
TIPICO |
franca gruesa |
Rosales |
|
ARGIALBOL |
TIPICO |
franca fina |
Las Marinas |
||
ACUOLES |
DURACUOL |
NATRICO |
franca fina |
Est La Alicia |
|
NATRACUOL |
TIPICO |
franca gruesa |
Estación Salguero |
||
ALFISOLES |
ACUALFES |
FRAGIACUALF |
TIPICO |
franca fina |
Las Acacias |
NATRACUALF |
TIPICO |
franca fina |
Villa Rossi |
||
ENTISOLES |
PSAMENTES |
USTIPSAMENT |
TIPICO |
franca gruesa |
Ea. Las Mercedes |
REFERENCIAS
1 — Complejo de series ROSALES y suelos salinos y alcalinos.
2 — Complejo de series ROSALES y LEGUIZAMON.
3 - Complejo de series ROSALES y LAS MARINAS.
4 — Complejo de series ROSALES en fase salina y suelos salinos imperfectamente drenados.
5 — Complejo de series ROSALES, LABOULAYE y suelos alcalinos.
6 - Complejo de series ROSALES en fase salina, ESTANCIA ALICIA y LAS ACACIAS.
7 — Complejo de series ROSALES en fase salina y suelos hidromórficos.
8 - Complejo de series ROSALES, LEGUIZAMON y ESTANCIA LA ALICIA.
9 - Complejo de series ROSALES, VILLA ROSSI y ESTANCIA LA ALICIA.
10 — Consociación LABOULAYE.
11 - Complejo de series LABOULAYE, LEGUIZAMON y LA PAYANCA.
12 - Complejo de series LABOULAYE y LAS MERCEDES.
13 - Complejo de series LABOULAYE, LOS ANDES y LEGUIZAMON.
14 - Complej o de series LABOULAYE y LEGUIZAMON.
A continuación se describen en orden alfabético de sus nombres las series clasificadas en el cuadro 7, para informar al usuario acerca de las características morfológicas y analíticas de cada una. De este modo pueden ser identificadas en el campo por el interesado.
En los puntos 3.3 y3.4 se describen las unidades cartografiadas en los mapas básicos de suelo, con los símbolos que las identifican y que acompañan a esta memoria.
La serie Estancia La Alicia, es un suelo imperfectamente drenado y con alcalinidad só-dica a partir de los 25 cm de profundidad. Se encuentra vinculado a planos muy deprimidos y áreas bajas.
La parte superficial del suelo se divide enr dos horizontes: uno superior (horizonte Al) que constituye la capa arable, tiene 18 cm de espesor, es de color pardo grisáceo oscuro, con moderado contenido de materia orgánica y es-tructura en bloques subangulares medios mode-rados y otro inferior (horizonte A2) algo más claro y lixiviado de aproximadamente 7 cm de espesor. Luego pasa en forma abrupta a un horizonte más arcilloso, de estructura columnar y semicolumnar, con elevado contenido de sodio intercambiable y con cementación ligera a partir de los 37 cm y fuerte a partir de los 50 cm, que limitan considerablemente su drenaje interno.
La alcalinidad sódica y el drenaje interno impedido restringen el uso agrícola dé estos suelos.
Descripción del perfil típico:
El perfil típico que representa los suelos de la serie Estancia La Alicia fue estudiado a 3,05 km al NW de Ea. La Oriental.
Al 0-18 cm; pardo grisáceo oscuro a pardo oscuro (10YR3/2,5) en húmedo; franco a franco arenoso; estructura en bloques subangulares medios, débiles; friable en húmedo; no plástico; no adhesivo; límite inferior claro, suave.
A2 18-25 cm; pardo oscuro (10YR3/3) en húmedo; franco arenoso; estructura en bloques subangulares débiles a masivo; friable en húmedo; no plástico; no adhesivo; moteados escasos, finos y débiles; límite inferior abrupto, suave.
B21t 25-37; pardo oscuro (7,5YR3/2) en húmedo; franco; estructura semicolumnar y prismas irregulares, medios moderados; firme en húmedo; barnices húmico-arcillosos comunes, finos y medios; moteados comunes, finos y precisos; límite infe-rior abrupto,suave.
B22tm 37-50 cm; pardo a pardo oscuro (7,5YR3,5/2) en húmedo; franco; ligeramente comentado; duro en seco; barnices húmico-arcillosos comunes y medios; moteados abundantes, medios y sobresalientes; concreciones calcáreas comunes y finas; límite inferior claro, suave.
B3m 50 cm. a más; pardo a pardo oscuro (7,5YR4/2) en húmedo; franco; fuertemente comentado; duro en seco; barnices arcillosos escasos y finos; moteados abundantes, medios y sobresalientes; bochas y núcleos con abundante clacáreo.
En el cuadro 8, se indican los datos analíticos pertenecientes a este perfil.
En la fotocarta, esta serie no aparece mapeada como unidad pura, sino que se la encuentra en unidades compuestas asociadas a suelos de la serie Rosales, Las Marinas, Las Acacias, Leguizamón y Estación Salguero.
La serie Estancia La Alicia pertenece a los Duracuoles nátricos. Las consideraciones sobre la aptitud, el aprovechamiento y manejo de estos suelos se consignan en el capítulo 4.
Horizonte |
Al |
A2 |
B21t |
B22tm |
B3m |
Profundidad de la muestra, cm |
0-18 |
18-25 |
25-37 |
37-50 |
50 a + |
Materia orgánica, % |
1,96 |
0,89 |
0,81 |
0,38 |
0,19 |
Carbono orgánico, % |
1,14 |
0,52 |
0,47 |
0,22 |
0,11 |
Nitrógeno total, % |
0,14 |
0,09 |
0,08 |
0,06 |
|
Relación C/N |
8,1 |
5,8 |
5,9 |
0,3 |
|
Arcilla, < 2 µ, % |
10,8 |
7,7 |
18,3 |
17,0 |
16,5 |
Limo, 2-50 µ % |
37,8 |
38,1 |
32,7 |
32,9 |
33,4 |
Arena mf, 50-100 µ; % |
42,1 |
41 |
40,4 |
41,2 |
39,9 |
Arena f;. 100-250 µ % |
9,1 |
11,8 |
8,1 |
9,4 |
9,9 |
Arena m., 250-500 µ; % |
|||||
Arena g., 500-1000 µ % |
|||||
Arena m.g., 1-2 mm, % |
|||||
Calcáreo, CaC03, % |
0 |
0 |
0 |
1,2 |
0,7 |
Lquiv. de humedad, % |
27,5 |
8,7 |
26,9 |
25,6 |
24,8 |
pH en pasta |
5,4 |
6,4 |
7,6 |
8,5 |
8,8 |
pH en agua 1:2,5 |
5,5 |
6,5 |
7,8 |
9,0 |
9,2 |
Cationes de intercambio, m.e./100gr: |
|||||
Ca ++ |
5,4 |
3,7 |
6,3 |
||
Mg ++ |
1,0 |
1,2 |
1,2 |
||
Na+ |
0,3 |
0,8 |
4,4 |
3,1 |
9,4 |
K + |
1,5 |
1,0 |
2,0 |
1,5 |
2,7 |
H+ |
1,5 |
1,0 |
|||
Na + . % del valor T |
31 |
23 |
70 |
||
Conduct. (mmhos/cm) |
3,11 |
||||
Suma de bases, m.e./100 gr (S) |
8,1 |
7,0 |
13,9 |
||
Capacidad de intercambio catiónico, m.e./100 gr (T). |
9,9 |
8,1 |
13,9 |
13,0 |
13,3 |
Saturación con bases, % (S/T) |
82 |
86 |
100 |
La serie Estancia Las Mercedes es un suelo algo excesivamente drenado, desarrollados sobre materiales de textura franca y vinculados a lomas arenosas (medanosas).
El horizonte Al, que constituye la capa arable, es de 17 cm de espesor, de textura arenosa franca, de color pardusco, estructura en bloques subangulares débiles a masivo y pobre en materia orgánica. Hacia abajo, pasa gradualmente (horizonte transicional AC) al material originario u horizonte C, de textura arenosa franca a arenosa y masiva.
La baja retención de humedad y el drenaje interno algo excesivo, acentúan la limitación climática que presenta estos suelos.
Descripción del perfil típico:
El perfil típico que representa los suelos de la serie Estancia Las Mercedes fue descripto a 19,4 km al Oeste-Noroeste de Villa Rossi.
Ap 0-17 cm; pardo oscuro (10YR3/3) en húmedo; arenoso franco; estructura en bloques subangulares finos, débiles a masivo; muy friable en húmedo; no plástico; no adhesivo; límite inferior abmpto, suave.
AC 1742 cm; pardo amarillento oscuro (10YR3/4) en húmedo; franco arenoso a arenoso franco; estructura masiva; muy friable en húmedo; límite inferior gradual, suave.
C 42 cm; pardo (7,5YR5/4) en húmedo, arenoso franco a franco arenoso; estructura masiva; muy fraible en húmedo.
Los datos analíticos pertenecientes a este perfil se consignan en el cuadro 9.
En la Hoja LABOULAYE esta serie ha sido identificada como unidad pura (Símbolo ELM). También se ha cartografiado asociada a suelos de la serie Laboulaye. La serie Estancia Las Mercedes, se clasifica como un Ustipsamente típico.
En el Capítulo 4, se encontrarán las sugerencias para el uso y manejo de estos suelos.
Horizonte |
Ap |
AC |
C |
Profundidad de la muestra, cm |
0-17 |
1742 |
42 a + |
Materia orgánica, % |
1,37 |
0,68 |
|
Carbono orgánico, % |
0,81 |
0,44 |
|
Nitrógeno total, % |
0,10 |
0,07 |
|
Relación C/N |
8,1 |
6,3 |
|
Arcilla, < 2 µ, % |
7,5 |
7,7 |
7,3 |
Limo, 2-50 µ % |
16,5 |
15,9 |
11,9 |
Arena mf., 50-100 µ, % |
56,9 |
46,9 |
76,4 |
Arena f;. 100-250 µ % |
19,6 |
29,1 |
4,8 |
Arena m., 250-500 µ % |
0,1 |
0,1 |
0,1 |
Arena g., 500-1000 µ % Arena m.g., 1-2 mm, % |
0,2 |
0,1 |
0,2 |
Calcáreo, CaC03, % |
0 |
0 |
0 |
Equiv. de humedad, % |
9,2 |
9,0 |
7,1 |
pH en pasta |
5,6 |
6,2 |
6,7 |
pH en agua 1:2,5 |
5,7 |
6,3 |
6,8 |
Cationes de intercambio, m.e./100 gr: |
|||
Ca++ |
4,8 |
5,7 |
5,6 |
Mg++ |
0,7 |
1,0 |
0,7 |
Na + |
0,2 |
0,1 |
0,3 |
K + |
1,8 |
1,3 |
0,6 |
H+ Na + , % del valor T Conduct. (mmhos/cm) |
1,9 |
1,1 |
0,5 |
Suma de bases, m.c./100 gr (S) |
7,5 |
8,1 |
7,2 |
Capacidad de intercambio catiónico, m.e./100 gr (T) |
9,4 |
9,0 |
7,5 |
Saturación con bases, % (S/T) |
80 |
90 |
96 |
La serie Estancia Los Andes es un suelo algo excesivamente drenado, con poco desarrollo de sus horizontes genéticos y vinculados a lomas planas y ligeramente onduladas. Se han desarrollado a partir de sedimentos eólicos de textura franco arenosa.
La capa arable (horizonte A1) de 22 cm de espesor, de color pardo grisáceo oscuro en húmedo, de textura franco arenosa y estructura en bloques. Luego pasa gradualmente (horizonte de transición AC) al material originario que se encuentra a una profundidad de 46 cm, de textura franco arenosa a arenosa franca y estructura masiva. El calcáreo se encuentra muy profundo y por lo general por debajo del metro.
Estos suelos presentan baja retención de humedad y drenaje excesivo, que aumentan la sequedad del suelo y por lo tanto presentan limitación climática.
Descripción del perfil típico:
El perfil típico que representa los suelos de esta serie fue estudiado a 4,2 km al Nornoreste de Villa Rossi.
A1 0-22; pardo grisáceo oscuro (10RY3/2) en húmedo; franco arenoso; estructura en bloques subangulares medios, débiles, friable en húmedo; no plástico; no adhesivo; límite inferior claro, suave.
AC 2246 cm; pardo amarillento oscuro (10YR3/4) en húmedo; franco arenoso; estructura masiva; muy friable en húmedo; no plástico; no adhesivo; límite inferior gradual, suave.
C 46 cm. a más; pardo a pardo oscuro.(7,5YR4/4) en húmedo; franco arenoso a arenoso fanco; estructura masiva; muy friable en húmedo; no plástico; no adhesivo.
En el cuadro 10, se indican las características físicas y químicas de estos suelos.
La serie Estancia Los Andes se clasifica como un Haplustol udorténtico.
En la fotocarta de la hoja LABOULAYE, esta serie no aparece como unidad pura, sino asociada geográficamente con suelos de la serie Laboulaye y Leguizamón.
Las consideraciones sobre la aptitud, el aprovechamiento y manejo de estos suelos se consignan en el Capítulo 4.
Los datos analíticos pertenecientes a este perfil se consignan en el Cuadro Nº 10
Horizonte |
A1 |
AC |
C |
Profundidad de la muestra, cm |
0-22 |
22-46 |
46 a + |
Materia orgánica, % |
1,57 |
0,77 |
|
Carbono orgánico, % |
0,91 |
0,45 |
|
Nitrógeno total, % |
0,10 |
0,07 |
|
Relación C/N |
9,1 |
6,4 |
|
Arcilla, < 2 µ, % |
10,0 |
11,2 |
8,7 |
Limo, 2-50 µ % |
18,7 |
18,0 |
16,9 |
Arena m.f, 50-100 µ, % |
38,9 |
31,7 |
37,9 |
Arena f;. 100-250 µ, % |
31,8 |
39,8 |
37,4 |
Arena m., 250-500 µ, % |
0,6 |
0,2 |
0,2 |
Arena g., 500-1000 µ % Arena m.g., 1-2 mm, % |
0,2 |
0,3 |
0,2 |
Calcáreo, CaC03, % |
0 |
0 |
|
Equiv. de humedad, % |
10,9 |
9,3 |
8,6 |
pH en pasta |
6,5 |
9 6,7 |
|
pH en agua 1:2,5 |
6,1 |
6,8 |
7,1 |
La serie Estación Salguero, es un suelo imperfectamente drenado, fuertemente salino y alcalino sódico y vinculados a sectores de bajos, con escurrimiento muy lento y fácilmente anegables.
El horizonte superficial (A1) se extiende hasta 24 cm. de profundidad, es de color pardo grisáceo oscuro, bien provisto. de materia orgánica, libre de alcalinidad sódica y débilmente salino. Luego pasa abruptamente a un horizonte más arcilloso (B2 textural) de color pardusco, estructura prismática y con fuerte alcalinidad y salinidad. El material originario se lo encuentra a los 91 cm. de profundidad aproximadamente, es un material franco arenoso y con abundante calcáreo pulverulento en la masa del suelo.
El drenaje impedido y la fuerte alcalinidad y salinidad subsuperficial, limitan el uso de estos suelos, fundamentalmente a cultivos y pas-turas adaptadas a las limitaciones indicadas.
Descripción del perfil típico:
El perfil típico que representa los suelos de la serie Estación Salguero, fue descripta a 17 Km. al Noroeste de Villa Rossi.
Al 0-24 cm.; pardo grisáceo oscuro (10YR3/2) en húmedo; franco; estmctura en bloques subangulares, débiles; friable en húmedo*; límite inferior claro, suave.
B2t 24-55 cm.; pardo oscuro (7,5YR3/2) en húmedo; franco; estructura en prismas irregulares, medios débiles y bloques, friable en húmedo; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; barnices húmico- arcillosos comunes y finos; moteados abundantes, finos y precisos; concreciones calcáreas comunes y finas; límite inferior gradual, suave.
B3 55-91 cm.; pardo a pardo oscuro (7,5YR4/4) en húmedo; estructura en bloques subangulares, medios; moderados; friable en húmedo; barnices arcillosos escasos y finos; moteados abundantes, finos y precisos; concreciones calcáreas comunes y finas; límite inferior abrupto suave.
C 91 cm. +; pardo (7,5YR5 /4) en húmedo; franco arenoso; estructura masiva; friable en húmedo; no plástico; no adhesivo; moteados abundantes, finos y precisos; concreciones calcáreas comunes y finas y abundante calcáreo pulverulento en la masa del suelo.
Los datos analíticos se indican en el cuadro 11.
La serie Estación Salguero ha sido clasificada como un Natracuol típico. En la fotocarta de la hoja LABOULAYE esta serie no aparece como unidad
Los datos analíticos se indican en el cuadro Nº11.
Horizontes |
A1 |
B2t |
B3 |
C |
Profundidad de la muestra, cm |
0-24 |
24-55 |
55-91 |
-91 a + |
Materia orgánica, % Carbono orgánico, % Nitrógeno total, % Relación C/N |
2,51 1,46 0,15 9,7 |
0,04 |
||
Arcilla, < 2 µ, % |
10,2 |
20,6 |
Fuert. |
12,9 |
Limo, 2-50 µ, % |
39,6 |
31,0 |
25,8 |
|
Arena m f, 50-100 µ, % |
39,2 |
36,4 |
43,9 |
|
Arena f, 100-250 µ, % |
11,7 |
12,4 |
16,9 |
|
Arena m., 250-500 µ, % |
0,3 |
0,1 |
0,5 |
|
Arena g., 500-1000 µ, % |
0,3 |
Salina |
0,5 |
|
Arena m.g., 1-2 mm, % |
||||
Calcáreo, CaC03, % |
0 |
2,3 |
0,6 |
3,7 |
Equiv. de humedad, % |
17,7 |
26,6 |
18,1 |
15,9 |
pH en pasta |
5,1 |
7,4 |
8,0 |
8,5 |
pH en agua 1:2,5 |
5,3 |
7,9 |
8,8 |
9,3 |
Cationes de intercambio, m.e./100 gr |
||||
Ca++ |
7,1 |
|||
Mg++ |
1,2 |
|||
Na+ |
0,3 |
|||
K+ |
1,9 |
|||
H+ |
2,7 |
|||
Na+, % del valor T |
||||
Conduct. (mmhos/cm) |
5,4 |
15,34 |
18,02 |
12,01 |
Suma de bases, m.e./100 gr (S) |
LO,5 |
|||
Capacidad de intercambio catiónico, m.e./100 gr(T) |
13 J |
20,1 |
13,0 |
|
Saturación con bases, % (S/T) |
||||
Composición extr. sat. m.e./l: Ca++ Mg++ Na+ K+ hco3 S04 Cl- |
14 12,0 6,0 1,6 10,9 43,2 |
30,4 27,2 112,8 1,4 9,6 70,7. 89 |
15,9 8,0 188,0 1,6 4,8 105,2 100,0 |
8,8 5,4 122,0 1,0 8,0 68,2 59,2 |
La serie Laboulaye se encuentra vinculada a lomas planas y ligeramente onduladas. Es un suelo que presenta un buen drenaje interno a algo excesivo y se han desarrollado a partir de sedimentos eólicos de textura franco arenosa.
Los primeros 25 cm (horizonte A1) que constittuye la capa arable, es de color pardo gri-sáceo oscuro, estructura en bloques y moderado contenido de materia, orgánica. El material origi-nario (horizonte C) se encuentra a 5 5 cm de profundidad, es de textura franco arenosa y muy friable.
Descripción del perfil típico:
El perfil representativo de la serie Laboulaye, fué descripto a 18,2 km al Noroeste de Villa Rossi.
Ap 0-15 cm; pardo grisáceo oscuro (10YR3/2) en húmedo; franco arenoso; estructura en bloques subangulares medios y finos, débiles; friable en húmedo; límite inferior abrupto, suave.
A 12 15-25 cm; pardo grisáceo oscuro (10YR3/2) en húmedo; franco arenoso; estructura en bloques subangulares, medios y débiles; friable en húmedo; límite inferior claro, suaye.
AC 25-55 cm; pardo amarillento oscuro (10YR3/4) en húmedo; franco arenoso; estructura masiva; muy friable en húmedo; límite inferior gradual.
C 55 cm a +; pardo a pardo oscuro (7,5YR4/4) en húmedo; franco arenoso; estructura masiva; muy friable en húmedo.
En el cuadro 12, se indican los datos analíticos de ia serie Laboulaye.
En la hoja LABOULAYE esta serie ha sido identificada como unidad pura (Símbolo LBy). También se ha cartografiado asociada a sulos de la serie Leguizamón, La Payanca, Ea. Las Mercedes, Ea. Los Andes, Rosales y Las Marinas. La serie Laboulaye se clasifica como un Haplustol udorténtico.
Las consideraciones sobre la aptitud, el aprovechamiento y manejo de estos suelos se consignan en el Capítulo 4.
Horizontes |
Ap |
A12 |
AC |
C |
Profundidad de la muestra, cm |
0-15 |
15-25 |
25-55 |
55 a + |
Materia orgánica, % Carbono orgánico, % Nitrógeno total, % Relación C/N |
1,81 1,05 0,09 11,6 |
2,01 1,17 0,13 9 |
0,83 0,48 0,08 6 |
|
Arcilla, <2 µ,% |
13,9 |
13,1 |
13,1 |
11,2 |
Limo, 2-50 µ % |
28,8 |
28,2 |
25,2 |
23,0 |
Arena m.f., 50-100 µ % |
42,4 |
40,5 |
46,0 |
49,3 |
Arena f., 100-250 µ % |
14,8 |
16,3 |
15,3 |
15,3 |
Arena m., 250-500 µ % |
0,4 |
0,4 |
0,4 |
0,4 |
Arena g., 500-1000 µ % |
0,7 |
0,8 |
0,3 |
0,8 |
Arena m.g., 1-2 mm, % f |
||||
CalcáreaCaCOS, % |
0 |
0 |
0 |
0 |
Equiv. de humedad, % |
14,8 |
13,6 |
13,6 |
11,0 |
pH en pasta |
5,8 |
5,9 |
6,2 |
6,8 |
pH en agua 1:2,5 |
6,0 |
6,0 |
6,4 |
6,9 |
Cationes de intercambio, m:e./100 gr |
||||
Ca++ |
7,5 |
7,1 |
7,7 |
6,1 |
Mg++ |
0,8 |
1,2. |
0,7 |
2,1 |
Na+ |
0,3 |
0,1 |
0,2 |
0,1 |
k+ |
1,6 |
1,6 |
1,2 |
1,0 |
H+ |
2,3 |
2,2 |
1,2 |
0,7 |
Na+, % del valor T |
||||
Conduct. (mmhos/cm) |
||||
Suma.de bases, m.e./100 gr (S) Capacidad de intercambio catiónico, m.e./100 gr(T) Saturación con bases, % (S/T) |
10,2 ' 12,6 81 |
10,0 12,2 82 |
9,8 11,2 87 |
9,3 10,1 92 |
La serie Las Acacias, es un suelo imperfectamente drenado, fuertemente cementado a partir de los 54 cm de profundidad y con alcalinidad sódica superficial.
La parte superficial del suelo (horizontes A21 y A22), llega hasta los 28 cm de profundidad, de textura franca y de color pardusco con claros síntomas de eluviación. Luego pasa en forma abrupta a un horizonte más arcilloso, de estructura prismática con ligera cementación, hasta encontrarse fuertemente cementado en el ho-rizonte B3.
El drenaje interno impedido y la fuerte alcalinidad sódica y salinidad superficiales restringen considerablemente el uso del suelo, limitándose los mismos a campos naturales de pastoreo.
Descripción del perfil típico:
A21 0-18 cm; pardo a pardo grisáceo oscuro (10YR3/2,5) en húmedo; franco; estructura en bloques subangulares débiles a masivo; friable en húmedo; moteados comunes, finos y precisos; límite inferior abrupto, suave.
A22 18-28 cm; pardo oscuro (10YR3/3) en húmedo; franco; estructura masiva; muy friable en húmedo; moteados abundantes finos y precisos; límite inferior abrupto, suave.
B2t 28-54 cm; pardo amarillento oscuro (10YR3/4) en húmedo; franco; estructura en prismas irregulares y bloques subangulares medios, moderados; barnices húmico-arcillosos comunes y medios; moteados comunes, finos y precisos; escasas concreciones calcáreas, finas; límite inferior abrupto suave.
B3m -54 cm a +; pardo a pardo oscuro (7,5YR4/4) en húmedo; franco; fuertemente cementado; duro; concreciones calcáreas comunes y finas.
Las características físicas y químicas de este suelo se indican en el cuadro 13.
La serie Las Acacias ha sido clasificada como un Fragiacualf típico. En la fotocarta de la hoja LABOULAYE, esta serie no aparece cartografiada como unidad pura, sino asociada geográficamente a suelos de la serie Rosales y Ea. La Alicia.
Las consideraciones sobre la aptitud, el aprovechamiento y manejo de estos suelos, se consignan en el Capitulo 4.
Horizontes |
Ap |
A2 |
B2 |
B3m |
Profundidad de la muestra, cm |
0-18 |
18-28 |
28-54 |
54 a + |
Materia orgánica, % Carbono orgánico, % Nitrógéno total, % Relación C/N |
1,41 0,82 0,12 6,8 |
0,10 |
0,07 |
|
Arcilla, µ % |
8,9 |
11,5 |
18,3 |
21,5 |
Limo, 2-50 µ % |
42,1 |
42,á# |
42,0 |
39,9 |
Arena m.f., 50-100 µ % |
36,1 |
36,9 |
29,9 |
30,4 |
Arena f., 100-250 µ % |
12,9 |
9,9 |
10,6 |
7,4 |
Arena m., 250-500 µ % |
0,1 |
fe |
||
Arena g., 500-1000 µ % |
0,1 |
|||
Arena m.g., 1-2 mm, % |
||||
Calcáreo, CaC03, % |
0 |
0 |
0,7 |
0,3 |
Equiv. de humedad, % |
16,8 |
18,2 |
27,4 |
31,6 |
pH en pasta |
6,0 |
7,3 |
8,2 |
8,5 |
pH en agua 1:2,5 |
6,3 |
7,8 |
8,9 |
9,1 |
Cationes de intercambio, m.e./l00 gr |
||||
Ca++ |
3,2 |
|||
Mg++ |
0,5 |
|||
Na+ |
2,3 |
7,1 |
||
K+ |
2,3 |
2,8 |
||
H+ |
1,2 |
|||
Na+, % del valor T |
24,4 |
71,7 |
||
Conduct. (mmhos/cm) |
7,89 |
12,28 |
7,37 |
12,28 |
Suma de bases, m.e./100 gr (S) |
8,3 |
|||
Capacidad de intercambio catiónico, m.e./100 gr(T) |
9,4 |
9,9 |
18,6 |
25,5 |
Saturación con bases, % (S/T) |
88 |
|||
Composición extr. sat. m.e./l: Ca++ Mg++ Na+ K+ HCO3- S04 ci- |
24.0 8,6 49.0 1,0 1,6 50.8 31.9 |
14,4 12,8 120,0 2,8 3,2 78,8 65,2 |
6,6 69,0 1,2 10.4 26.5 41.6 |
6,6 8,0 128,0 1,8 11,2 72.5 57.6 |
La serie Las Marinas, es un suelo con drenaje interno moderado y vinculados a planos chatos extendidos o muy ligeramente deprimidos Se han desarrollado a partir de sedimentos eólicos de textura franca.
La parte superficial o capa arable llega hasta los 26 cm, de color pardo grisáceo oscurp, estructura en bloques moderados, textura franca y moderado contenido de materia orgánica.
A partir de los 26 cm hasta los 34 cm, con límite abrupto se encuentra un horizonte A2, de colores más claros, con menor contenido de materia orgánica y arcilla que el superficial. Luego en forma abrupta pasa a un horizonte con mayor contenido de arcilla (horizonte B2 textural) que se extiende hasta los 71 cm de profundidad, es de color pardo oscuro, textura franca y estructura semicolumnar gruesa. El material originario se encuentra a 100 cm de profundidad.
Esta serie no se encuentra en unidades puras sino en unidades compuestas, generalmente asociados a suelos alcalinos sódicos y/o salino-alcalinos con tenores variables y a suelos totalmente libres de sales o álcalis.
Descripción del perfil típico:
El perfil típico que representa estos suelos fue descripto a 8,5 Km al OSO de Estación Rosales, departamento Presidente Roque Sáenz Peña, provincia de Córdoba.
El perfil típico que responde a los suelos de la serie Las Marinas, fue estudiado a 21,5 km al ESE de Melo, Provincia de Córdoba.
Ap Q-14 cm; pardo grisáceo oscuro (10YR3/2) en húmedo; franco; estructura en bloques subangulares medios, moderados; friable en húmedo; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; límite inferior abrupto, suave.
A12 14-26 cm; pardo grisáceo oscurp (10YR3/2) en húmedo; franco; estructura en bloques subangu- ares medios, moderados; friable en húmedo; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; límite inferior claro, suave.
A2 26-34 cm; pardo amarillento oscuro (10YR3/4) en númedo; franco arenoso; estructura en bloques subangulares débiles a masivo; friable en húmedo; no plástico;.no adhesivo; moteados co-munes, finos y débiles; límite inferior abrupto, suave.
B21t 34-52 cm; pardo oscuro (7,5YR3/2) en húmedo; franco; estructura semicolumnar medios y gruesos, moderados; friable en húmedo; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; barnices húmico-arcillosos comunes y medios; moteados abundantes, finos y precisos; límite inferior gradual, suave.
B22t 52-71 cm; pardo oscuro (7,5YR3,5/2 ) en húmedo; franco; estructura en bloques subangulares, medios, moderados; friable en húmedo; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; barnices arcillosos escasos y finos; moteados abundantes, medios y precisos; concreciones calcáreas comunes y finas; límite inferior gradual, suave.
B3 71-100 cm; pardo a pardo oscuro (7,5YR4/2) en húmedo; franco; estructura masiva; muy friable; no plástico; no adhesivo; moteados abundantes, finos y precisos; concreciones calcáreas comunes, medias y finas.
Los datos analíticos pertenecientes a este perfil se indican en el cuadro 14.
En la fotoparta de la serie LABOULAYE esta serie no ha sido cartografiada corno unidad pura, sino asociada geográficamente con suelos de la serie Rosales, Ea. La Alicia y Laboulaye. La serie Las Marinas se clasifica como un Argialbol típico.
Las consideraciones sobre la patitud, el aprovechamiento y manejo de estos suelos se consignan en el Capítulo 4.
Horizontes |
Ap |
A12 |
A2 |
B21t |
B22t |
É3 |
Profundidad de la muestra, cm |
0-14 |
14-26 |
26-34 |
34-52 |
52-71 |
71-100 |
Materia orgánica, % |
2,10 " |
1,70 |
0,69 |
0,46 |
0,24 |
0,20 |
Carbono orgánico, % |
1,22 |
0,99 |
0,40 |
0,27 |
0,14 |
0,12 |
Nitrógeno total, % |
0,14 |
0,12 |
0,05 |
0,05 |
0,04 |
|
Relación C/N |
8,7 |
8,2 |
8,0 |
5,4 |
3,5 |
|
Arcilla,µ % |
14,4 |
13,8 |
10,0 |
19,2 |
18,7 |
14,8 |
Limo, 2-50 µ % |
36,9 |
38,1 |
37 |
32,2 |
29,6 |
31,4 |
Arena m.f., 50-100 µ % |
26,7 |
26,7 |
31,6 |
37,9 |
32,0 |
39,8 |
Arena f., 100-250 µ % |
18,3 |
18,7 |
19,9 |
9,3 |
18,3 |
12,4 |
arena m., 250-500 µ % |
0,7 |
0,7 |
0,7 |
0,6 |
0,8 |
0,7 |
Arena g., 500-1000 µ % |
1,5 |
1,3 |
1,4 |
1,1- |
0,5 |
. 0,8 |
Arena m.g., 1-2 mm, % |
1 |
|||||
Calcáreo, CaCO3, % |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
Equiv. de humedad, % |
17,6 |
17,1 |
13,9 |
19,8 |
18,3 |
17,1 |
pH en pasta |
5 5,4 |
5,8 |
6,0 |
6,4 |
7,0 |
7,2 |
pH en agua 1:2,5 |
5,7 |
6,0 |
6,4 |
6,8 |
7,2 |
7,4 |
Cationes de intercambio, m.e./100 gr |
||||||
Ca++ |
5,7 |
6,3 |
4,5 |
8,8 |
8,7 |
8,5 |
Mg++ |
2,4 |
1,4 |
0,9 |
2,3 |
2,2 |
1,9 |
Na+ |
0,3 |
0,3 |
0,3 |
0,4 |
0,4 |
0,6 |
Kt |
2,0 |
1,5 |
1,1 |
1,8 |
1,8 |
1,9 |
H+ |
2,8 |
2,0 |
1,1 |
0,7 |
0,5 |
0,2 |
Na+, % del valor T |
||||||
Conduct. (mmhos/cm) |
||||||
Suma de bases, m.e./100 gr (S) |
10,4 |
8,5 |
6,8 |
13,3 |
13,1 |
12,9 |
Capacidad de intercambio catiónico, m.e./l00 gr(T) |
13,2 |
10,7 |
8,0 |
14,2 |
13,8 |
13,1 |
Saturación con bases, % (S/T) |
79 |
79 |
85 |
94 |
95 |
98 |
Los suelos de la serie La Payanca, presentan buen drenaje interno y se encuentran vinculados a amplias lomadas planas a suavemente onduladas con pendientes inferiores al 1%. Se han desarrollado a partir de materiales eólicos de textura franca.
La capa arable (horizonte Al) es de 27 cm de espesor, textura franca, estructura en bloques, color pardo grisáceo oscuro y buen contenido de materia orgánica. Luego pasa en forma muy clara, a un horizonte algo más arcilloso (B2 textural), de estructura prismática y color pardusco que se extiende hasta los 52 cm de profundidad, para pasar gradualmente al material originario que se encuentra a 70 cm de profundidad.
Estos suelos, representan los suelos más productivos del área, presentando únicamente una ligera limitación climática. No ha sido identificada en unidades puras, sino en unidades compuestas asociadas a otros suelos libres de sales o álcalis.
Descripción del perfil típico:
El perfil que representa a los suelos de la serie La Payanca fue descripto a 19,15 km al oeste de Ea, La Oriental.
A1 0-27 cm; pardo grisáceo oscuro (10YR3/2) en húmedo; franco; estructura en bloques subangulares medios, moderados a débiles; friable; no plástico; no adhesivo; límite inferior claro, suave.
B2t 27-52 cm; pardo oscuro (7,5YR3/2) en húmedo; franco; estructura en prismas irregulares, moderados a débiles que rompen bloques subangulares, friable en húmedo; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; barnices húmico-arcillosos esca-sos y finos; límite inferior claro, suave.
B3 52-70 cm; pardo a pardo oscuro (7,5YR4/2) en húmedo; franco; estructura en bloques subangulares débiles; friable; no plástico; no adhesivo; barnices arcillosos muy escasos y finos; límite inferior gradual, suave.
C 70 cm a +; pardo a pardo oscuro (7,5YR4/4) en húmedo; franco; estructura masiva; muy friable en húmedo; no plástico; no adhesivo.
En el cuadro 15, se consignan los datos analíticos que corresponden a este suelo.
La serie LA PAYANCA ha sido clasificada como un Argiustol údico. En la fotocarta de la hoja LABOULAYE, esta serie no aparece cartografiada como unidad pura, sino asociada a suelos de la series Laboulaye y Leguizamón.
Las sugerencias sobre el aprovechamiento y manejo de estos suelos se encuentran en el Capítulo 4.
Horizontes |
A1 |
B2t |
B3 |
C |
Profundidad de la muestra |
0-27 |
27-52 |
52-70 |
70 a + |
Materia orgánica, % |
2,48 |
1,08 |
0,53 |
|
Carbono orgánico, % |
1,44 |
0,63 |
0,31 |
|
Nitrógeno total, % |
0,11 |
0,10 |
||
Relación C/N |
13,0 |
6,3 |
||
Arcilla, < 2 µ % |
14,4 |
17,5 |
13,3 |
10,0 |
Limo, 2-50 µ, % |
38,9 |
33,5 |
35,1 |
33,2 |
Arena m.f., 50-100 µ, % |
37,7 |
43,8 |
45,7 |
46,0 |
Arena f., 100-250 µ % |
9,4 |
4,5 |
6,6 |
10,3 |
Arena m., 250-500µ % |
0,05 |
0,05 |
||
Arena g., 500-1000 µ % |
0,05 |
0,05 |
||
Arena fn.g., 1-2 mm, % |
||||
Calcáreo, CaC03, % |
0 |
0 |
0 |
0 |
Equiv. de humedad, % |
19,0 |
18,6 |
16,1 |
12,9 |
pH en pasta |
6,0 |
6,6 |
7,1 |
7,3 |
pH en agua 1:2,5 |
6,3 |
7,0 |
7,3 |
7,5 |
Cationes de intercambio, m.e./l00 gr |
||||
Ca++ |
8,6 |
10,1 |
8,3 |
7,8 |
Mg++ |
14S |
0,8 |
1,8 |
1,6 |
Na+ |
0,2 |
0,2 |
0,2 |
0,2 |
K+ |
2,3 |
1,1 |
1,2 |
1,4 |
H+ |
1,0 |
0,7 |
0,2 |
|
Na+, % del valor T |
||||
Conduct. (mmhos/cm) |
||||
Suma de bases, m.e./100 gr (S) |
12,6 |
12,2 |
11,5 |
11,0 |
Capacidad de intercambio catiónico, m.e./100 gr(T) |
14,4 |
13,5 |
12,3 |
11,2 |
Saturación con bases, % (S/T) |
87 |
90 |
93 |
98 |
La Serie Leguizamón es un suelo oscuro, desarrollado sobre materiales franco arenosos en áreas planas o en ligeras concavidades dentro de un paisaje de lomas suavmente onduladas del SE de la Provincia de Córdoba. Presenta un horizonte superficial (A1), de 20 cm de espesor, bien estructurado y de textura franca. Le sigue luego un horizonte subsuperficial con ligero incremento de arcilla (B2), de textura franca a franca arenosa. El material originario se encuentra aproximadamente a 66 cm de profundidad y es de textura franca arenosa. Este suelo no tiene limitaciones importantes a excepción de la climática que se presenta en forma moderada.
Descripción del perfil típico:
El perfil representativo fue estudiado a 9 km al Oeste-Sudoeste de la Ea. Las Tunas, en el Departamento Marcos Juárez.
Al 0-21 cm; Pardo grisáceo muy oscuro (10YR3/2) en húmedo; franco, estructura en bloques subangulares medios moderados y granular; friable en húmedo; no plástico, no adhesivo; límite claro y suave.
B2 2140 cm; Pardo oscuro (7,5YR3/2) en húmedo; franco arenoso a franco; estructura en bloques subangulares medios moderados, friable en húmedo; no plástico; no adhesivo; barnices húmicos arcillosos escasos y finos; límite gradual y suave.
B3 40-66 cm; Pardo oscuro (7,5YR3,5/2) en húmedo; franco arenoso a franco; estructura en bloques subangulares medios débiles; friable en húmedo; no plástico, no adhesivo, barnices arcillosos muy escasos y finos; límite inferior gradual y suave.
C 66 cm a +; Pardo amarillento oscuro (7,5YR4/4) en húmedo; franco arenoso, estructura masiva, muy friable en húmedo, no plástico, no adhesivo.
Los datos analíticos pertenecientes al perfil descripto se encuentran en el Cuadro 16.
En la fotocarta esta serie no aparece maceada como unidad pura, sino que se la encuentra en unidades compuestas, asociadas a suelos de la serie Laboulaye, Los Andes, Rosales y Ea. La Alicia.
La Serie Leguizamón pertenece a los Haplustoles énticos. Las consideraciones sobre la aptitud, el aprovechamiento y manejo de estos suelos se consignan en el Capítulo 4
Horizontes |
Ap |
B2 |
B3 |
C |
Profundidad de la muestra, cm |
0-21 |
21-40 |
40-66 |
66 a + |
Materia orgánica, % |
2,88 |
0,98 |
0,61 |
0,29 |
Carbono orgánico, % |
1,68 |
0,57 |
0,36 |
0,17 |
Nitrógeno total, % |
0,168 |
0,078 |
0,059 |
0,039 |
Relación C/N |
10,0 |
7,3 |
6,1 |
4,3 |
Arcilla, <2 µ, % |
14,8 |
15,6 |
12,4 |
9,6 |
Limo, 2-50 µ, % |
34,0 |
29,8 |
29,9 |
28,8 |
Arena m.f., 50-100 µ, % |
49,8 |
54,0 |
56,4 |
57,8 |
Arena f., 100-250 µ, % |
0,5 0,2 |
0,5 |
0,3 |
2,1 |
Arenam., 250-500 µ, % |
||||
Arena g., 5 00-1000 µ, % |
||||
Arena m.g., 1-2 mm. % |
- |
- |
- |
- |
Calcáreo, CaCO3, % |
||||
Equiv. de humedad, % |
19,0 |
17,1 |
14,9 |
13,2 |
pH en pasta |
5,0 |
6,3 |
6,5 |
6,8 |
pH en agua 1:2,5 |
5,6 |
6,8 |
7,1 |
7,8 |
Cationes de intercambio, m.e./l00 gr |
||||
Ca++ |
12,2 |
7,2 |
7,0 |
7,1 |
Mg++ |
1,9 |
1.6 |
2,6 |
2,7 |
Na+ |
0,3 |
0,3 |
0,3 |
0,3 |
K+ |
2,8 |
2,1 |
1,7 |
1,9 |
H+ |
2,7 |
1.9 |
0,6 |
_ |
Na+, % del valor T |
||||
Conduct. (mmhos/cm) |
- |
- |
- |
- |
Suma de bases, m.e./100 gr (S) |
12,2 |
11,2 |
11,6 |
12 |
Capacidad de intercambio catiónico, m.e./l00 gr(T) |
14,8 |
13,0 |
12,1 |
11,8 |
Saturación con bases, % (S/T) |
82 |
86 |
96 |
100 |
Los suelos de la serie Rosales se vinculan a paisajes muy planos a ligeramente deprimidos, cuyo escurrimiento superficial es lento. El drenaje interno es imperfecto y presentan alcalinidad sódica (más del 20 % de sodio intercambiable) a partir de los 34 cm de profundidad.
La capa arable de 23 cm de espesor es de color pardo grisáceo oscuro, estructura en bloques con buen contenido de materia orgánica. Luego pasa en forma abrupta a un horizonte A2, más claro, débilmente estructurado y pobre contenido de materia orgánica, extendiéndose hasta los 34 cm de profundidad. El horizonte B2t (nátrico) va de 34 a 52 cm, es de color pardusco y estructura semicolumnar, pasando gradualmente (horizonte de transición B3) al material originario, encontrándose este a 75 cm de profundidad.
Estos suelos se encuentran en el límite agrícola, ya que la presencia de alcalinidad sódica a partir de los 34 cm, impide el desarrollo normal de las raíces, particularmente en los cultivos de raíces profundas.
Descripción del perfil típico:
El perfil que representa los suelos de la serie Rosales, fué descripto a 7,75 km al Oeste- sudoeste de Estancia La Oriental.
Al 0-23 cm; pardo grisáceo oscuro (10YR3/2) en húmedo; franco arenoso; estructura en bloques subangulares medios, débiles; friable en húmedo; no plástico; no adhesivo; límite inferior abrupto, ondulado.
A2 23-34 cm; pardo amarillento oscuro (10YR3/3,5) en húmedo; franco arenoso; estructura en bloques subangulares muy débiles a masivo; muy friable en húmedo; no plástico; no adhesivo;moteados comunes, medios y precisos; límite inferior abrupto, ondulado.
B2t 34-52 cm; pardo oscuro (7,5YR3/2) en húmedo; franco arenoso a franco arcillo arenoso; estructura semicolumnar y prismas moderados; muy friable en húmedo; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; barnices húmico-arcillosos comunes y finos; moteados abundantes, medios y sobresalientes; límite inferior claro, suave.
B3 52-75 cm; pardo oscuro (7,5 YR4/2) en húmedo franco arenoso; estructura en bloques subangulares muy débiles; muy friable en húmedo; barnices muy escasos y finos; moteados comunes, medios y sobresalientes; límite inferior gradual, suave.
C 75 cm a + ; pardo a pardo oscuro (7,5YR4,5/4) en húmedo; franco arenoso; estructura masiva; muy friable en húmedo; moteados comunes, medios; sobresalientes.
Los datos analíticos se indican en el cuadro 17.
Horizonte | A | E | Btn | BC | C | |
Profundidad de la muestra (cm) | 0-23 | 23-34 | 34-52 | 52-75 | 75 a + | |
Materia Orgánica (%) | 2,41 | 0,69 | 0,52 | 0,19 | --- | |
Carbono Orgánico (%) | 1,4 | 0,4 | 0,3 | 0,11 | --- | |
Nitrógeno total (%) | 0,17 | 0,06 | 0,05 | --- | --- | |
Relación C/N | 8,2 | 6,6 | 6 | --- | --- | |
Arcilla, <2 µ (%) | 11,7 | 6,2 | 18,9 | 11,5 | 9,2 | |
Limo, 2-50 µ (%) | 30,7 | 28,5 | 23,6 | 22,6 | 22,7 | |
Arena muy fina, 50-100 µ (%) | 39,3 | 50,7 | 38,6 | 51,5 | 51,6 | |
Arena fina, 100-250 µ (%) | 16,3 | 13,6 | 17,4 | 12,9 | 14,9 | |
Arena media, 250-500 µ (%) | 0,05 | 0 | 0 | 0,05 | 0,05 | |
Arena gruesa, 500-1000 µ (%) | 0,05 | 0 | 0 | 0,05 | 0,05 | |
Arena muy gruesa, 1-2 mm (%) | 0 | 0 | 0 | 0 | 0 | |
Carbonatos (% CaCO3) | 0 | 0 | 0 | 0 | 0 | |
Equivalente de humedad (%) | 18,5 | 13,3 | 22,6 | 19,6 | 14,7 | |
pH en pasta | 5,7 | 7,1 | 7,2 | 7,4 | 7,4 | |
pH en agua (1:2,5) | 5,8 | 7,2 | 7,5 | 7,7 | 7,9 | |
Cationes de intercambio (meq/100g) | Ca++ | 5,7 | 3,3 | 7,4 | 5,9 | 3,2 |
Mg++ | 1,2 | 2,2 | 1,3 | 1,7 | 0,7 | |
Na+ | 0,2 | 0,7 | 2,4 | 2,3 | 3,8 | |
K+ | 0,9 | 1,5 | 0,7 | 1,5 | 1,5 | |
H+ | 3,1 | 0,8 | --- | --- | --- | |
Suma de bases, S (meq/100g) | 8 | 7,7 | 11,8 | 11,4 | 9,2 | |
Capacidad de intercambio catiónico, T (meq/100g) | 11,3 | 8,6 | 11,8 | 11,4 | 9,2 | |
Porcentaje de sodio de intercambio (P.S.I.) | 1,8 | 8,1 | 20,3 | 20,2 | 41,3 | |
Saturación con bases, S/T (%) | 70,8 | 89,5 | 100 | 100 | 100 |
La serie Villa Rossi es un suelo imperfectamente drenado, (escurrimiento superficial y permeabilidad lenta), vinculados a los planos deprimidos y con elevada alcalinidad sódica a partir de los 18 cm de profundidad. Se han desarrollado a partir de materiales franco arenosos.
La capa superficial (horizonte A2) de 18 cm de espesor, es de color pardo grisáceo, estructura en bloques débiles y pobre contenido de materia orgánica. Luego pasa en forma abrupta a un horizonte más arcilloso, de estructura prismática, color pardusco y elevado pH debido al alto contenido de sodio intercambiable (más del 50 % de ]a capacidad de intercambio catiónico), que impiden el desarrollo normal de las raíces. Presentan moteados prácticamente desde la superficie, consecuencia del drenaje impedido de estos suelos.
Descripción del perfil típico:
El perfil modal que representa los suelos de la serie Villa Rossi, ha sido descripto a 41,2 Km. al ESE de Melo, Provincia de Córdoba.
A2 0-18 cm.; pardo grisáceo (10YR4/3) en húmedo; franco arenoso; estructura en bloques subangulares medios y finos, débiles; muy friable en húmedo; no plástico; no adhesivo; moteados comunes, medios y precisos; límite inferior abrupto, suave.
B211 18-35 cm.; pardo oscuro (7,5 YR3/2) en húmedo; franco a franco arcillo arenoso; estructura en prismas irregulares medios, moderados; friable en húmedo; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; barnices húmico-arcillosos comunes y medios; moteados comunes, medios y precisos; abundantes concreciones calcáreas finas; límite inferior claro, suave.
B22t 35-66 cm.; pardo oscuro (7,5YR3,5/2) en húmedo; franco; estructura en prismas y bloques subangulares medios, moderados; friable en húmedo; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; barnices húmico-arcillosos escasos y finos; moteados comunes, medios y precisos; abundantes concreciones calcáreas finas; límite inferior gradual, suave.
B3 66-103 cm.; pardo a pardo oscuro (7,5YR4/4) en húmedo; franco arenoso; estructura en bloques subangulares medios, moderados a débiles; friable en húmedo; barnices arcillosos muy escasos; moteados abundantes, medios y precisos; escasas concreciones calcáreas muy finas; límite inferior gradual, suave.
C 103 cm. a +; pardo (7,5YR5/4) en húmedo; franco arenoso; estructura masiva; muy friable en húmedo; no plástico; no adhesivo; moteados abundantes, medios y precisos; concreciones calcáreas escasas y finas.
Los datos analíticos de la serie Villa Rossi, se encuentran en el cuadro 18.
En la hoja LABOULAYE, está serie no ha sido cartografiada como unidad pura, sino asociada geográficamente a suelos de la serie ROSALES y Ea. LA ALICIA. La serie VILLA ROSSI se clasifica como un Natracualf típico.
En el Capítulo 4 se encontrarán sugerencias para el uso y manejo de estos suelos.
Horizontes |
A2p |
B21t |
B22t |
B3 |
C |
Profundidad de la muestra, cm |
0-18 |
18-35 |
35-66 |
66-103 |
103 a + |
Materia orgánica, % |
1,38 |
0,41 |
0,29 |
0,10 |
|
Carbono orgánico, % |
0,80 |
0,24 |
0,17 |
0,12 |
|
Nitrógeno total, % |
0,09 |
0,06 |
0,04 |
||
Relación C/N |
8,9 |
4,0 |
4,2 |
||
Arcilla, <2 µ, % |
9,6 |
24,2 |
19,3 |
12,5 |
11,9 |
Limo, 2-50 µ, % |
36,0 |
27,9 |
27,4 |
27,9 |
25,0 |
Arena m.f., 50-100 µ % |
32,2 |
35,0 |
30,9 |
41,7 |
41,4 |
Arena f., 100-250 µ % |
21,4 |
14,2 |
22,1 |
17,4 |
19,1 |
Arena m., 250-500 µ % |
0,4 |
0,3 |
0,3 |
0,3 |
0,4 |
Arena g., 500-1000 µ % Arena m.g., 1-2 mm, % |
0,4 |
0,2 |
0,2 |
0,3 |
0,5 |
Calcáreo, CaC03, % |
0 |
1,0 |
0,6 |
0 |
0,3 |
bquiv. de humedad, % |
14,7 |
25,8 |
20,7 |
16,6 |
16,3 |
pH en pasta |
6,1 |
8,5 |
8,9 |
9,0 |
9,0 |
pH en agua 1:2,5 |
6,3 |
9,1 |
9,4 |
9,4 |
9,4 |
Cationes de intercambio, m.e./100 gr |
|||||
Ca++ |
3,9 |
3,7 |
|||
Mg++ |
2,4 |
0,8 |
|||
Na+ |
0,7 |
8,5 |
10,1 |
8,5 |
9,4 |
K+ |
1,0 |
2,3 |
2,3 |
1,7 |
2,0 |
H+ |
1,8 |
||||
Na+, % del valor T Conduct. (mmhos/cm) |
55 |
66 |
58 |
72 |
|
Suma de bases, m.e./100 gr (S) |
8,0 |
14,7 |
|||
Capacidad de intercambio catiónico, m.e./100 gr(T) |
10,0 |
16,5 |
15,3 |
14,7 |
13,0 |
Saturación con bases, % (S/T) |
80 |
100 |
En este punto se describen las unidades cartográficas simples identificadas en el área; son aquellas que están constituidas por una serie pura y/o sus fases. En el punto 3.2 se indican las características morfológicas, físicas y químicas de cada suelo y en el Capítulo 4, las recomendaciones de manejo.
Con este símbolo se indican las unidades cartográficas constituidas únicamente por suelos de la serie Estancia Las Mercedes, que presentan un drenaje excesivo y ocupan las lomas arenosas (medanosas).
Este drenaje excesivo y la baja retención de humedad acentúan la limitación climática natural de estos suelos, presentando además una manifiesta susceptibilidad a la erosión eólica por la baja estabilidad estructural de los agregados, propios de suelos de textura arenosa y estructura casi masiva (sin estructura). Por estas razones, esta serie se encuentra en el límite agrícola, indicándose en el Capítulo 4, las recomendaciones de uso y manejo.
La serie Laboulaye que constituye esta unidad cartográfica, se encuentra vinculada a amplias lomadas planas y/o ligeramente onduladas. Son suelos profundos y bien a algo excesivamente drenados, presentando únicamente la limitación climática natural del área y constituyen en general los suelos agrícolas de la misma. Las recomendaciones para el manejo y la conservación, se dan en el Capítulo 4.
En este punto se describen las unidades constituidas por el agrupamiento de más de un suelo, es decir por dos o más series. Todas las series que se citan en dichas unidades han sido descriptas por separado y por orden alfabético en el punto 3.2. Las consideraciones sobre la capacidad de estas asociaciones y complejos, se encuentran en el Capítulo 4.
Estos complejos comprenden los sectores de buena aptitud agrícola dentro del área. Se vinculan a amplias lomadas planas donde los suelos de la serie Laboulaye, se asocian a los suelos de la serie Leguizamón y La Payanca, que presentan buen drenaje natural y están libres de sales y álcalis. Estas tierras tienen una neta vocación agrícola, aunque el rango de cultivos posibles se ve limitado por factores climáticos externos al suelo.
Esta unidad ocupa las lomas onduladas en donde la serie Laboulaye ocupa las partes planas del relieve y la serie Est. Las Mercedes las lomas arenosas (médanos). En estos sectores la limitación climática se hace más acentuada, por tener los suelos de la serie Est. Las Mercedes, muy baja retención de humedad y drenaje interno algo excesivo.
Este complejo está vinculado a un relieve de lomas onduladas en donde la serie Laboulaye que ocupa los sectores suavemente ondulados, se asocia a la serie Leguizamón en las partes planas y a la serie Ea. Los, Andes en las convexidades arenosas. Son suelos bien a algo excesivamente drenados, libres de salinidad y/o alcalinidad. La capacidad de uso de estas tierras se ve sólo res-tringida por factores climáticos, por lo que resul-tan aptas para cultivos climáticamente adaptados.
Estos complejos, en los que la serie Rosales que presenta alcalinidad sódica subsuperficial, se encuentra asociada en distintos porcentajes a otros suelos que poseen diferentes grados de alcalinidad y/o salinidad. Estas unidades se encuentran vinculadas a un relieve de planos muy extendidos y ligeramente deprimidos, con escurrimientos superficial lento. Las condiciones de drenaje natural de estos suelos va desde moderado a imperfectamente drenados.
La baja fertilidad de los suelos, el drenaje deficiente y las sales y álcalis presente se conjugan para que la aptitud de uso de estas tierras se encuentren en el límite agrícola.
Este complejo ocupa un paisaje de lomas planas con sectores ligeramente deprimidos. Los suelos bien drenados de la serie Leguizamón aparecen en los sectores tendidos del relieve y la serie Rosales, en las áreas deprimidas, con drenaje deficiente y alcalinidad subsuperficial. Son unidades fácilmente reconocibles en el campo por la presencia en ciertos cultivos de los característicos “charqueados” en los sectores correspondientes a los suelos de la serie Rosales. La capacidad de uso de estas tierras se ve restringida por factores climáticos y por el drenaje y alcalinidad subsuperficial en el 20% del área, siendo en general aptos para los cultivos comunes de la zona.
Este complejo se vincula a un relieve de planos extendidos y está constituido por suelos de la serie Rosales que posee alcalinidad .sódica subsüperficial, asociados a suelos libres de sales y/o álcalis de las series Las Marinas y Laboulaye. Él ericharcamiento que puede condicionar la oportunidad de labranza y/o-cosecha, las malas condiciones físicas que producen la presencia de sodio de intercambio, son las principales limi-taciones de estas tierras, cuya aptitud para el uso se encuentra en el límite agrícola, principalmente cuando se realizan cultivos de raíces profundas. En el Capítulo 4 se indican, las prácticas de manejo.
Estas tres unidades ocupan sectores ligeramente deprimidos, donde las condiciones de drenaje interno de los suelos van de moderado a im-perfectamente drenados. La serie Rosales que presenta alcalinidad sódica subsuperficial, está asociada a otros suelos que poseen diferentes tenores de sales y/o álcalis a profundidades diversas. La baja fertilidad de los suelos, el drenaje pobre y las sales y álcalis presentes, hacen que estas tierras resulten inaptas para cultivos de cosecha, restringiendo su uso a campos naturales de pastoreo y pasturas cultivadas. En el Capítulo 4 se indican las sugerencias de uso y manejo de estos suelos.
Esta unidad ocupa un paisaje de planos deprimidos, con drenaje impedido, compuesto por suelos de la serie Rosales que posee alcalinidad subsuperficial, asociados a las series Ea. La Alicia que además de fuerte alcalinidad subsuperficial se encuentran cementadas dentro del metro de profundidad y la serie Estación Salguero, que presenta salinidad débil en superficie, pero a partir de los 20 cm es fuertemente salina. El pobre drenaje de estos suelos hace que puedan sufrir anegamientos periódicos, además la salinidad y/o alcalinidad determinan que estas tierras resulten aptas para pasturas naturales o pasturas implantadas, residentes a las condiciones de alcalinidad, salinidad y drenaje impedido.
Estos dos complejos ocupan sectores deprimidos del paisaje, con escurrimiento superficial muy lento y drenaje impedido, lo que ocasiona anegamientos e inundaciones periódicas. Están integrados por suelos de la serie Rosales con alcalinidad sódica subsuperficial, asociados en distintos porcentajes a otros suelos que poseen diferentes tenores de alcalinidad y/o salinidad a distintas profundidades y cementados dentro del metro de profundidad.
El drenaje impedido de estos suelos donde la napa freática se encuentra muy cerca de la superficie, la fuerte alcalinidad sódica y la salinidad determinan que estas tierras presentan graves limitaciones de uso. Son apropiadas para campos naturales de pasturas y pasturas implantadas, resistentes a las condiciones de alcalinidad y/o salinidad y drenaje impedido. En el Capítulo 4 se indican las prácticas de manejo.
En este capítulo se hace la interpretación utilitaria (clasificación por su capacidad de uso para fines agrícolas) de las unidades delimitadas en los mapas de suelos y se mencionan las prácticas adecuadas para el manejo y la con-servación del suelo, la planta y el agua.
Se ha adoptado el sistema de clasificación utilizado por el Servicio de Conservación de Suelos de los Estados Unidos, adaptado para los suelos de esta área en particular. Este sistema comprende tres grandes categorías: Clase, Subclase y Unidad de Capacidad de Uso. Dado que en el reconocimiento básico de los suelos de la provincia de Córdoba se han utilizado las escalas de semidetalle y reconocimiento, la clasificación adoptada agrupa los suelos sólo al nivel de clase y subclase.
El sistema de clasificación distingue ocho clases (señaladas con números romanos del I al VIII) que indican un aumento progresivo de las limitaciones que presentan los suelos para el desarrollo la producción. Las cuatro primeras clases incluyen los suelos aptos para agricultura. La clase I no presenta prácticamente limitantes para su uso, requiriendo poco tratamiento de manejo o conservación especial. En las clases II, III y IV las limitantes aumentan progresivamente y en consecuencia grados crecientes de cuidado y protección. Las clases V a VII por lo general no son aptas para agricultura y precisan cuidados progresivamente más intensos aun cuando se destinen para pastura o forestación. Finalmente, la clase VIII no tiene aplicación agrícola ni ganadera; solo sirve para la recreación, para preservación del ambiente y la biodiversidad, aprovisionamiento de agua o fines estéticos.
Las subclases informan sobre los tipos principales de limitaciones que afectan a las clases. Excepto la clase I, el resto admite una o dos de las cuatro subclases y se designan agregando las letras minúsculas "e", "w", "s" o "c" a continuación del número de clase. Por ejemplo: "IIIe"; "IVws".
La subclase "e" - erosión - está integrada por suelos erosionados y/o con la susceptibilidad a la erosión como limitante para su uso.
La subclase "w" - exceso de agua - incluye suelos que presentan drenaje pobre, humedad excesiva, capa freática alta y/o peligro anegabilidad.
La subclase "s" - limitaciones del suelo dentro de la zona radical - incluye suelos que presentan escasa profundidad, baja capacidad de retención de humedad, salinidad o alcalinidad y/o bajo nivel de fertilidad.
La subclase "c" - limitación climática - está compuesta por suelos en los cuales el clima es la mayor limitante.
En la zona se hallaron las cuatro subclases, pero fundamentalmente la limitación “c” (climática), podría considerarse como “permanente”. Otro razgo destacable es que en la mayor parte de las unidades reconocidas presentan la limitación “w” (exceso de agua), ya sea por problemas de escurrimiento superficial o por presentar los suelos un drenaje natural impedido (horizontes sódicos, cementación, etc. a menos de 1m de profundidad).
En cuanto a la limitación climática “permanente” en el área, son moderadas y en algunos casos graves, según los años y épocas de cada año. Por otro lado, ésta puede agravarse según la retención de humedad del suelo, es decir ante la misma situación climática, los cultivos sufren los efectos de la “sequía” de manera diferente, según el tipo de suelo, es decir en función de la capacidad de retención de humedad de los mismos y la textura. Así en el área excluyendo los suelos afectados por alcalinidad y/o salinidad, hidromorfismo, etc. podemos distinguir: (cuadro 19).
Serie |
Capacitación de retención de humedad |
Textura |
La Payanca |
Buena |
Franca |
Leguizamón |
Buena |
Franca |
Laboulaye |
Moderada a baja |
Franco arenosa |
Ea. Los Andes |
Baja |
Arenosa franca |
Ea. Las Mercedes |
Baja a muy baja |
Arenosa franca a arenosa |
En resumen, a medida que baja la retención de humedad, aumentan los efectos de sequía edáfíca.
CLASE I: Suelos con ninguna o leves limitaciones que restrinjuan su uso, capaces de producir una amplia variedad de plantas. Pueden utilizarse para cultivos, pasturas, forestación, como campos naturales de pastoreo, etc. Son profundos, bien drenados y se trabajan con facilidad. En el área no se encontraron suelos pertenecientes a esta clase.
CLASE II: Suelos con algunas limitaciones que exigen prácticas simples de manejo y conservación, de fácil aplicación. Son adecuados para agricultura, pasturas y forestación.
Subclase IIc: Suelos con moderada limitación climática. Comprende:
CLASE III: Los suelos de esta clase tienen mayores y más severas limitaciones que las clases anteriores, por lo que requieren prácticas de manejo y conservación más complejas. No obstante, son adecuados para cultivos, pasturas y otros usos, de la tierra.
Subclase IIIc: Suelos con moderada a severa limitación climática. Comprende:
Subclase IIIsc: Suelos con moderada a severa limitación climática, asociados con suelos de baja retención de humedad y/o moderada alcalinidad sódica subsuperficial. Comprende:
CLASE IV: Suelos con limitaciones más severas que la clase III, cuando están cultivadas requieren prácticas de manejo y conservación más difíciles y complejas. Generalmente son adecuados para una estrecha gama de cultivos. No obstante, pueden ser utilizados para pasturas y otros usos de la tierra.
Subclase IVws: Suelos con drenaje interno impedido y moderadamente afectados por alcalinidad que restringe de manera bastante severa el crecimiento y elección de cultivos. Esta subclase está representada por:
Subclase IVes: Suelos con severa a grave susceptibilidad a la erosión eólica y baja retención de humedad que restringe el laboreo del suelo y elección de cultivos. Comprende:
CLASE V: Suelos con escaso o ningún riesgo de ser afectado por erosión; pero con otras limitaciones que impiden el laboreo normal para los cultivos comerciales. Por esta razón sólo resultan adecuados para ser usados como campos naturales de pastoreo, pasturas cultivadas, bosques o como refugio de la fauna silvestre. En la Hoja 3563-3 LABOULAYE, no se han reconocido suelos pertenecientes a esta clase.
CLASE VI: Suelos con graves limitaciones para el uso, resultando ineptos para los cultivos. Son apropiados como campos naturales de pastoreo, bosques o refugio de la fauna.
Subclase VIws: : Suelos con exceso de humedad por la acumulación de las aguas de escorrentía provenientes de las áreas circunvecinas más elevadas o con drenaje interno pobre que con frecuencia producen anegamientos. También estos suelos presentan generalmente elevada alcalinidad o salinidad o están asociados con otros suelos con estas características. Lo integran:
CLASE VII: Suelos con muy graves limitaciones para el uso, resultando también inaptos para cultivos. Las condiciones físicas y químicas de los suelos de esta clase son tales que generalmente no se justifica aplicar ningún tipo de mejoras, quedando reducido su uso casi exclusivamente como campos naturales de pastoreo o para bosques y refugio de la fauna.
Subclase VIIws: Suelos afectados por un considerable exceso de humedad, debido a la acumulación de las aguas de escorrentía provenientes de áreas circunvecinas más elevadas, con anegamiento o capa de agua que permanece sobre o cerca de la superficie por largo tiempo. Esta subclase también incluye suelos fuertemente afectados por alcalinidad y/o salinidad. Comprende:
Subclase VIIes: Suelos con muy grave susceptibilidad a la erosión eólica y baja retención de humedad que impiden el laboreo del suelo. Comprende:
CLASE VIII: Los suelos de esta clase no tienen aplicación agrícola ni ganadera. Debido a la gravedad de sus limitaciones sólo sirven para recreación, conservación de la fauna silvestre, provisión de agua, fines estéticos, etc. En la Hoja 3563-3 LABOULAYE comprende:
Para cada subgrupo y subclase de capacidad de uso se sugieren las prácticas de manejo y conservación adecuadas, seleccionadas en base a la experinecia y conocimiento local. Estas prácticas, ordenadas en diversas combinaciones, suministran alternativas de tratamiento para que el productor seleccione las más convenientes, de acuerdo con su plan de explotación y capacidad económica y siempre que con ellas no ocasione perjuicios a las explotaciones vecinas.
Todas las prácticas de manejo y conservación incluidas en el texto están definidas en el Glosario de Términos Técnicos (Capítulo 5 de esta Memoria).
En el cuadro No 20 se enumeran las prácticas sugeridas para los diferentes usos de la tierra, de acuerdo con las limitaciones expresadas por las distintas unidades de clasificación reconocidas, prácticas que convendrá tener en cuenta pero cuyo ajuste final debe lograrse mediante la experimentación y el asesoramiento técnico correspondientes. Las prácticas de manejo y conservación sugeridas se han agrupado con los objetivos siguientes, observándose que algunas de ellas pueden ser aplicadas para más de un objetivo:
a) Control de la erosión y conservación del agua.
b) Corrección de los problemas de drenaje y anegamiento.
c) Mantenimiento o mejora de la productivi-dad del suelo.
El Cuadro N° 20 está destinado, principalmente, a los técnicos comprometidos con la programación de prácticas de manejo y conservación y fue preparado de acuerdo con las limitaciones señaladas por fcl inventario de las necesidades de manejo y conservación de la hoja LABOULAYE. También será útil como material de consulta para los extensionistas del lugar, cuando deban asistir a los productores para seleccionar las prácticas de manejo y conservación más adecuadas para sus suelos. Dicho üso y técnicas de manejo estarán suficientemente probadas como para tender a:
1) Mantener los niveles de erosión dentro de los límites permisibles.
2) Asegurar el mantenimiento y acrecenta-miento de la productividad de las tierras a mediano y largo plazo.
3) Serán económicamente factibles de aplicar.
4) Asegurarán suficientes alternativas de producción de acuerdo a las posibilidades, características y modalidades del produc-tor.
Significa esto, que las recomendaciones son dinámicas y no estáticas; su cambio o modificación dependerá del avance de los conocimientos técnicos en la materia.
Como la adopción de una tecnología superior con respecto a otra tradicional depende de la decisión del productor, ella será acorde a la rentabilidad probable de la misma. Por ello se ha preferido incluir prácticas que aseguren un alto nivel de manejo del predio, pero cuya realización pueda concretarse con la información, infraestructura y recursos comúnmente disponibles en la región pampeana.
Del mismo modo, se cita, define y explica las prácticas recomendadas pero sin llegar a un grado completo de detalle, que se considera inconveniente para la naturaleza del trabajo, que tiende sólo a proponer una planificación semidetallada de cada predio.
Objetivos de manejo |
Uso de la tierra |
Nombre de la práctica (1) |
Categ. de tratamien |
Frec. de aplicac. |
Unidades de Clasificación (Subgrupos y subclases o Unidades de Cap. de Uso) | ||||||
y conserv. |
to (2) |
(3) |
He |
lile |
IIIsc |
IVec |
IVws |
VIws |
VIIws | ||
Conserv. |
Rotación de cultivos |
E |
A |
X |
X |
X |
X |
X | |||
del agua |
Uso racional del rastrojo |
E |
A |
X |
X |
X |
X |
X | |||
y control |
Barbecho bajo cubierta de rastrojos |
N |
A |
X |
X |
X |
X |
X | |||
de erosión |
Siembra bajo cubierta de rastrojos |
C |
A |
X |
X |
X |
X |
X | |||
Cultivos |
Cincelado |
N |
A |
X |
X |
X |
X |
X | |||
Labranza mínima |
N |
A |
X |
X |
X |
X |
X | ||||
Direc. de siembra perp. a los vientos |
E |
A |
X |
X | |||||||
Corree. |
Cultivos |
Camellones |
N |
A |
X | ||||||
problem. de |
Subsolado |
C |
0 |
X | |||||||
drenaje y anegam. |
Ingenier. |
Canal derivador |
N |
P |
X |
X | |||||
Rotación de cultivos |
E |
A |
X |
X |
X |
X |
X | ||||
Cultivos |
Uso racional del rastrojo |
E |
A |
X |
X |
X |
X |
X | |||
Mantenim. y mejoram. |
Elec. adecuada de cultivares, densidad y época de siembra, etc |
E |
A |
X |
X |
X |
X |
X | |||
de la |
Manejo de pasturas |
E |
A |
X |
X |
X |
X |
X |
X |
X | |
product. |
Establecimiento de pasturas |
N |
0 |
X |
X |
X |
X |
X |
X |
X | |
agrícola y |
Mejoramiento de pasturas |
N |
0 |
X |
X |
X |
X |
X |
X |
X | |
ganadera |
Pastoreo apropiado |
E |
A |
X |
X | ||||||
Pasturas |
Manejo rae. del pastoreo en campos nat |
E |
A |
X | |||||||
Control de malezas |
E |
A |
X |
X |
X |
X |
X |
X |
X |
(1) Ver Glosario.
(2) E: Esencial - N: Necesario -C: Conveniente
(3) A: Anual - O: Ocasional - P: Permanente
4.2.1.1 Subclases IIe , IIIe y IIIsc
Se entiende por rotación un sistema planificado de actividades agropecuarias en el cual se alternan especies leguminosas y gramíneas, en varios ciclos continuados de duración (edificación de fertilidad), con ciclos anuales de cultivos agrícolas (consumo de fertilidad).
La rotación es la clave del mantenimiento de la “fertilidad física” y de la “fertilidad química” del suelo; particularmente en el primer aspecto, no existe otra técnica que a nivel de manejo extensivo o semi-intensivo tienda a mantener un grado aceptable de estabilidad estructural de los suelos. Y la relación entre dicha estabilidad, el movimiento del agua y del aire, encostramientos superficiales, erosión, etc. son demasiado conocidas.
La programación de la rotación, de acuerdo a la información disponible actualmente, podría esquematizarse:
Alfalfa (5 años continuados); verdeo otoñal de centeno más cultivo estival sorgo principalmente, girasol o maíz (2 a 3 ciclos continuados); cultivo invernal de centeno o trigo (2 a 3 ciclos continuados), avena puede incluirse. Además pueden realizarse algunas variaciones posibles:
Alfalfa: su duración se estima puede variar de 4 a 6 años; la pastura puede ser monofítica o polifítica y sembrarse con o sin cultivo protector.
— Verdeo otoñal: se lo recomienda a fin de controlar malezas, parásistos del suelo; etc. del cultivo estival. Puede omitirse.
— Cultivo estival: Sorgo, se recomienda los de ciclo largo y doble propósito.
— Girasol, no es recomendable su repetición continuada.
— Maíz, se lo destina habitualmente para pastoreo, puede destinarse parte a cosecha.
— Soja, puede incluirse, pero teniendo en cuenta que la secuencia trigo-soja constituye la alternativa más riesgosa desde el punto de vista de la disponibilidad hídrica para asegurar una razonable productividad de ambos cultivos en sucesión, siendo los réndimientos de trigo los más afectados, ya que la prolongación del ciclo de la soja hasta mayo, conspira contra la reconstitución de los niveles de humedad edáfica, sobre todo por tratarse de suelos algo livianos que acentúan el “stress” hídrico, por su baja retención de humedad.
Cultivo invernal: Centeno, es la especie más recomendable por su seguridad de producción.
Trigo, se recomienda las variedades de ciclo largo y aún mediano y de doble propósito.
Cebada, especie interesante por su adaptación a condiciones de salinidad y/o alcalinidad, teniendo en cuenta el proceso de salinización ligera y en casos moderadas, de muchos suelos del área que han sufrido por ascenso de la freática por efectos de los excesos de lluvias de los últimos años.
Por ser el clima y la baja retención de humedad de algunos suelos, las limitaciones señaladas, se remarca la importancia de las prácticas que minimicen el riesgo de sequía, mencionándose así:
— Uso racional del rastrojo, consiste en el uso del rastrojo de cosecha particularmente los de cosecha fina, para la protección del suelo durante los períodos de barbecho. Esta práctica involucra la supresión de la quema de los rastrojos como práctica rutinaria.
- Barbechos bajo cubiertas de rastrojos: Consiste esta práctica en implantar y mantener la limpieza de los barbechos bajo un colchón o cubierta muerta de rastrojo que cubre el suelo.
— Siembra bajo cubierta de rastrojos: Consiste en utilizar sembradoras especialmente adaptadas para desempeñarse a través de colchones espesos de rastrojos, permi-tiendo depositar la semilla en la zona hú-meda del suelo. Se la recomienda especial-mente en los suelos de subclase IIIsc. Cincelado (desfonde o arada profunda): Práctica diseñada para la remoción sin inversión del suelo de horizontes densificados, hecho usualmente producido por acción del hombre (“pisos de arado”). La profundidad de trabajo puede alcanzar a los 30 cm de profundidad; la elasticidad de cada diente proporciona un movimiento vibratorio que contribuye a la destrucción del horizonte compactado; en esto se diferencia de los escarificadores comunes, cuya acción, profundidad de trabajo, etc. es similar. En su uso debe cuidarse que:
— La distancia entre cinceles asegure la remoción total del suelo.
— Aplicar la herramienta con suelo seco.
— Preferir los implementos que posean un mecanismo de “zafe” ante sobrecargas.
En términos generales y por tratarse de una labranza conservacionista, podría considerarse necesaria en los suelos de subclase IIe y IIIe y esencial en los de subclase IIIsc.
Dirección de siembra perpendicular a los vientos: práctica diseñada como complementó de las anteriormente citadas (particularmente para los barbechos y siembra bajo cubierta de rastrojos), para disminuir los efectos de la erosión eólica al frenar o “entrampar” a las partículas en saltación.
Labranza mínima: consiste en la reducción o eliminación de las tareas de remoción del suelo requeridas para el barbecho, siembra, etc.
Los beneficios para el suelo derivan de:
— Menor compactación (superficial y subsuperficial) consecuencia del menor “tráfico” de maquinaria agrícola.
— Mejor relación de porosidad y movilidad del agua en el perfil del suelo.
— Menor erosión,
— Menores costos operativos.
La instrumentación de la práctica puede conseguirse según diferentes vías:
Combinar varias tareas en una sola operación.
— Siembra directa de cultivos con preparación mínima del suelo.
— Intersiembra de especies.
— Reemplazo parcial o total del barbecho convencional por herbicidas (barbecho químico, “escafallow”.
Los más serios problemas que pueden presentarse al aplicar estos sistemas de manejo provienen de:
— Alto costo de los agroquímicos necesarios.
— Control de malezas poco efectivo.
“Crisis” dé fertilidad química de los suelos.
— Control de malezas: Práctica básica para toda la región. Son demasiado conocidos los efectos de las malezas sobre el consumo hídrico, fertilidad, competencia con cultivos, efectos tóxicos sobre el ganado, etc.
4.2.1.2 Subclase IVes
Se debe reducir el uso agrícola de la tierra, acortando la rotación a sólo 8 años (5 años bajo pasturas y 3 años bajo agricultura). En el ciclo agrícola se dedicará uno solo a cultivos estivales.
Barbecho bajo cubierta de rastrojo con rastron poceador.
Dirección de siembra perpendicular a los vientos.
— Cincelado.
— Cultivos en franjas en rotación.
Consiste en cultivar en franjas separadas alternas cultivos en rotación. Usualmente, el ancho de las franjas se fija en función del equipo disponible y se instalan en sentido perpendicular a los vientos dominantes. Se procura así que parte del terreno quede durante todo el año protegido de la acción de los vientos, escurrimiento, partículas en saltación, etc. Ejemplos:
— Franjas con cultivos invernales (trigo, centeno) y estivales (sorgo, maíz) para cosecha. También con cultivos anuales (de verano o invierno) y pasturas permanentes (pasto llorón); en este caso, podría reducirse el ancho de la faja bajo pasturas por ser su protección permanente. No hay especificaciones técnicas definidas sobre el ancho óptimo de fajas, pero podría ser de 10 a 20 m para pasturas dejando 40 a 80 m para el cultivo.
— Labranza mínima.
4.2.1.3 Subclase IVws
La rotación de cultivos es en base a especies adaptadas. Consiste esta práctica en la implantación de cultivos anuales y pasturas adaptadas o tolerantes a condiciones de salinidad y/o alcalinidad subsuperficial. La tolerancia a estas condiciones adversas puede conseguirse por medio de:
— Especies y/o cultivares genéticamente adaptados.
— Especies y/o cultivares de raíces ramificadas y/o superficiales.
Pueden aquí mencionarse:
— Agropiro alargado y criollo.
— Trébol de olor.
— Festuca.
— Girasol.
— Cebada.
— Sorgo.
La rotación de cultivos que se adapta a esta subclase de capacidad de uso comprende un ciclo de 7 a 9 años, integrado por 5 ó 6 años de pasturas adaptadas y 2 a 3 años de agricultura principalmente girasol, cebada y sorgo.
— Uso racional del rastrojo.
— Desfonde o arada profunda.
— Cultivo mínimo.
— Camellones.
— Subsolado.
— Canal derivador.
— Establecimiento de pasturas (adaptadas a suelos anegables).
— Manejo de pasturas, con el propósito de obtener la mayor ganancia en peso del ani-mal aprovechando para el pastoreo los estados fenológicos más adecuados (mayor cantidad de nutrientes digestibles) de la planta. Para ello se eleva la carga animal a fin de disminuir el tiempo de pastoreo. Se permite de esta manera el descanso y rebrote del pastizal entre períodos de pastoreo.
— Mejoramiento de pasturas.
— Control de malezas.
4.2.1.4 Subclases VIws y VIIws
— Canal derivador.
— Implantación de pasturas permanentes (adaptadas a suelos alcalinos y anegables), en base a agropiro y tréboles de olor amarillos y blancos.
- Manejo de pasturas permanentes.
— Mejoramiento de pasturas.
— Pastoreo apropiado.
— Control de malezas en pasturas (permanentes y naturales).
— Distribución de aguadas y panes de sal.
— Manejo racional del pastoreo en campos naturales (sólo en subclase VIIws):
Se relaciona esta práctica con el uso de cargas y períodos de pastoreo seguido por descansos de acuerdo a la composición florística de la pastura; se busca asegurar la persistencia de las especies de mayor valor y minimizar el aumento de las indeseables (malezas, especies tóxicas, etc.). El pastoreo diferido y el pastoreo rotativo son técnicas de manejo en las que al excluir el ganado por un tiempo prefijado, se permite la recuperación del vigor y multiplicación por semillas de las especies útiles.
El inventario de las necesidades de manejo y conservación de las tierras comprendidas en la hoja LABOULAYE se basó en la clasificación de la capacidad de uso descriptas en el párrafo 4.1.
Los datos del inventario aparecen expuestos en los cuadros 21 y 22. En el primero se indica el total de hectáreas correspondientes a cada clase de capacidad de uso y los porcentajes que representan con respecto a la superficie de las tierras de la hoja LABOULAYE. Ademas se han agrupado las clases de capacidad en tres categorías (A B y C) agregándose una final (D) correspondiente a las tierras no inventariadas. Las categorías diferenciadas son:
A - Tierras aptas para todo tipo de cultivos adaptados climáticamente a la región.
B - Tierras aptas sólo para ciertos cultivos.
C - Tierras generalmente no aptas para cultivos.
D - Tierras excluidas del inventario (misceláneas, lagunas, etc.).
De esta manera se expone un resumen cuantitativo del recurso tierra en términos de clases de capacidad de uso información particularmente útil para las autoridades -a cualquier nivel de gobierno— encargadas de la colonización, desarrollo, mejora del suelo y planeamiento de su uso.
El cuadro 22 contiene datos sobre el carácter y la extensión de las limitaciones para el manejo expresadas por las clases y subclases de capacidad de uso.
Esta información permite definir las prácticas de manejo y conservación adecuadas para un área con el fin de lograr el control efectivo de la erosión, la conservación del agua y el mantenimiento o incremento de la productividad de los suelos.
POR CLASE |
POR CATEGORIA A-B-C-D | |||||
°/o Sobre |
°/o Sobre | |||||
ha |
Subtotal |
TOTAL |
ha |
Subtotal |
TOTAL | |
A. Tierras aptas para todo tipo de cultivos adaptados | ||||||
climáticamente a la región. | ||||||
CLASE II |
10.042 |
5,98 |
5,89 | |||
CLASE III |
58.701 |
34,96 |
34,48 |
68.743 |
40,94 |
40,37 |
B. Tierras aptas sólo para ciertos cultivos | ||||||
CLASE IV |
62.939 |
37,48 |
36,96 |
62.939 |
37,48 |
36,96 |
C. Tierras generalmente no aptas para cultivos | ||||||
Si CLASE VI |
20.356 |
12,13 |
11,96 | |||
CLASE VII |
15.880 |
9,45 |
9,32 |
36.236 |
21,58 |
21,28 |
Substotal: tierras incluidas en este inventario. |
167.918 |
100,00 |
98,61 |
167.918 |
100,00 |
98,61 |
D. Tierras excluidas de este inventario. | ||||||
Misceláneas (tierras urbanas y suburbanas) |
970 |
0,57 | ||||
Médanos |
136 |
0,08 | ||||
Lagunas |
1.260 |
0,74 | ||||
Subtotal: tierras excluidas de este inventario. |
2.366 |
2.366 |
1,39 | |||
TOTAL DE LA HOJA |
170.284 |
100,00 |
170.284 |
100,00 i |
CLASES DE CAPACIDAD DE USO |
“c” |
“se” |
Total subclase “c”y sus combinaciones |
“w” |
“wsw |
Total subclase “w” y sus combinaciones |
“es” |
TOTAL HOJA | |||||||||
ha |
o/os Subt. |
obre Total | |||||||||||||||
ha |
o/o(l) |
ha |
0/0(1) |
ha |
o/o(l) |
ha |
0/0(1) |
ha |
°/o (1) |
ha |
0/0(1) |
ha |
0/0(1) | ||||
I |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
II |
10.042 |
5,98 |
- |
- |
10.042 |
5,98 |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
10.042 |
5,98 |
5,89 | |
III |
16.935 |
10.08 |
41.776 |
24,88 |
58.701 |
34,96 |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
58.701 |
34,96 |
34,48 | |
rv |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
62.599 |
37,28 |
62.599 |
.37,28 |
340 |
0,20 |
62.939 |
37,48 |
36,96 | |
V |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- | |||
VI |
- |
- |
- |
- |
- |
20.356 |
12,13 |
20.356 |
12,13 |
- |
- |
20.356 |
12,13 |
11,96 | |||
VII |
- |
- |
- |
- |
- |
15.880 |
9,45 |
15.880 |
9,45 |
- |
- |
15.880 |
9,45 |
9,32 | |||
VIII |
- |
- |
- |
- |
_ |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- | ||||
Subtotal |
26.977 |
16,06 |
41.776 |
24,88 |
68.753 |
40,94 |
- |
- |
98.835 |
58,86 |
98.835 |
58,86 |
340 |
0,20 |
167.918 |
100,0 |
~ |
Misceláneas |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
970 |
- |
0,57 | ||||||
Lagunas |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
1.260 |
- |
0.74 | |||||
Médanos |
~ |
- |
- |
- |
“ |
- |
- |
- |
• - |
- |
- |
~ |
136 |
- |
0,08 | ||
TOTAL |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
- |
170.284 |
- |
100,00 |
De esta manera se expone un resumen cuantitativo del recurso tierra desde el punto de vista de clases de capacidad de uso, información particularmente útil para las autoridades -a cualquier nivel de gobierno- encargadas de la colonización, desarrollo, mejora del suelo y planeamiento de su uso.
El Cuadro Nº20, contiene datos sobre el carácter y la extensión de las limitaciones para el manejo, expresadas por las clases y subclases de capacidad de uso.
Esta información permite definir las prácticas de manejo o conservación adecuadas para un área, con el fin de lograr el control efectivo de la erosión, la conservación o eliminación del agua y el mantenimiento o incremento de la productividad.
Abono verde: cultivo denso de pastos, leguminosas o cereales, usado fundamentalmente para protección y mejoramiento del suelo en ciertas estaciones. Generalmente ocupa la tierra por un período de un año o menos excepto donde, como en ciertos huertos, hay cobertura permanente. Propósito: agregar materia orgánica al suelo; mejorar sü infiltración, aireación y aptitud para el laboreo.
Acidez (del suelo): ver pH del suelo.
Acualf: Suborden taxonómico de Alfisoles (ver) que se caracterizan por estar estacionalmente saturados con agua por períodos prolongados y asociados generalmente con una capa de agua freática fluctuante y cercana a la superficie. Las condiciones reductoras y la falta de oxigenación que afecta cíclicamente la zona de crecimiento radicular, quedan evidenciados en el perfil por coloraciones grisáceas y por la presencia de moteados de hierro. Cuando la freática se encuentra en profundidad, las condiciones de saturación con agua pueden ser consecuencia de la baja conductividad hidráulica del horizonte de • acumulación de arcilla, que restringe el movimiento del agua hacia abajo. Normalmente los Acualfes se encuentran en áreas planas o cóncavas que sufren encharcamientos durante las ,pocas de lluvias dado el escaso escurrimiento superficial y el aporte de escorrentías de sectores vecinos más elevados.
Acuent: Suborden taxonómico de los
Entisoles (ver). Son suelos de ambientes casi permanentemente saturados con agua (ver régimen ácuico), las coloraciones son grisáceas neutras con moteados. Comúnmente soportan una vegetación tolerante a los excesos de humedad.
Acuico (1) régimen de humedad: bajo este régimen los suelos están saturados por períodos suficientemente prolongados como para que existan condiciones de reducción. Los colores neutros y los moteados son indicativos de esta condición. (2): adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que presenta condiciones de exceso de humedad y drenaje pobre, cuando el concepto típico del Gran Grupo corresponde a condiciones de drenaje libre.
Acuol: Suborden taxonómico de los
Molisoles (ver) típicos de las áreas saturadas con agua por largos períodos. El agua que se infiltra alimenta la capa freática, la cual fluctúa estacionalmente afectando el perfil y confiriéndole caracteres hidromórficos. El uso de estos suelos está restringido por las deficiencias en el drenaje.
Aérico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo extragrado que presenta condiciones de drenaje mejores que las que son típicas del Gran Grupo.
Agregados (de la estructura del suelo): ver
estructura.
Albacualf: Gran Grupo taxonómico de los Acualfes (ver) que se caracterizan por la presencia de un horizonte fuertemente lavado (ver álbico) y decolorado cuyo contenido en arcillas es marcadamente inferior al del horizonte subyacente. Entre ambos hay un cambio en la textura muy abrupto: la baja permeabilidad del horizonte fluvial genera las condiciones de saturación con agua por encima del mismo, durante períodos de tiempo considerables.
Albico: horizonte de coloración clara como consecuencia de un proceso de lavado o eluviación.
Albol: Suborden taxonómico de los Molisoles (ver) que presentan un horizonte lavado, decolorado y empobrecido en nutrientes (ver álbico) como consecuencia de las fluctuaciones del agua que satura el suelo cíclicamente. Ocupan partes planas o cóncavas.
Alcalinidad (del suelo): ver pH del suelo.
Alfisol: Orden taxonómico que se caracteriza por presentar un horizonte subsuperficial de enriquecimiento secundario de arcillas desarrollado en condiciones tanto de acidez como de alcalinidad sódica y asociado con un horizonte superficial (ver epipedón) de color claro, pobre en materia orgánica o de poco espesor. Son suelos altamente saturados con bases en todo el perfil.
Arada y siembra simultánea: implantar un cultivo en línea en el momento en que se ara el suelo o inmediatamente después para preparar la sementera sin otras operaciones de labranza. Propósito: conservar la humedad y reducir la compactación del suelo.
Arcilla: partículas minerales del suelo de tamaño inferior a 2 micrones (0,002 mm.).
Arcillosa: ver textura del suelo.
Arena: partículas minerales del suelo de un diámetro superior a 50 micrones (0,05 mm.) y no mayor a 2 milímetros.
Arenosa: ver textura del suelo.
Argiácuico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que combina la ocurrencia de un horizonte B bien desarrollado (ver argílico) y drenaje pobre (ver ácuico) en aquellos Grandes Grupos que normalmente no lo poseen.
Argiacuol: Gran Grupo taxonómico de los Acudes (ver) que tienen un horizonte enriquecido de arcilla (ver argílico).
Argialbol: Gran Grupo taxonómico de los Alboles (ver) en los cuales el horizonte álbico pasa hacia abajo a un horizonte enriquecido en arcillas (ver argílico).
Argílico: horizonte subsuperficial de
acumulación de arcilla fluvial, posee por lo menos 1,2 veces más arcilla que el horizonte eluvial suprayacente. En general, corresponde con los horizontes B en los cuales son evidentes los barnices arcillosos y tienen un espesor de por lo menos 15 cm.
Argiudol: Gran Grupo taxonómico de los Udoles (ver) que tienen un horizonte enriquecido en arcilla fluvial (ver argílico) no demasiado espeso, cuyo contenido de arcilla decrece rápidamente con la profundidad. Típicamente el horizonte superficial es casi negro y el horizonte argílico parduzco. Debajo puede haber un horizonte rico en carbonato de calcio. En la Región pampeana, estos suelos se han desarrollado sobre sedimentos loéssicos. Dentro de este Gran Grupo están incluidos los mejores suelos de la región.
Argiustol: Gran Grupo taxonómico de los Ustoles (ver) que presentan debajo del horizonte superficial oscuro (ver epipedón mólico) un horizonte con enriquecimiento secundario en arcillas (ver argílico).
Asociación de suelos: unidad cartográfica compuesta por dos o más suelos que se asocian geográficamente según un patrón geográfico definido y en proporciones constantes. Por razones de escala, el mapa muestra esos suelos en una sola unidad, pero a una escala de detalle apropiada, los componentes edáficos de una asociación podrían mostrarse separadamente.
B textural: horizonte B2t (ver horizonte del suelo).
Balance hídrico: relación entre la cantidad de agua recibida por precipitación y las pérdidas de humedad debidas a la
evapotranspiración en un área determinada. Cuando el balance es negativo (periodos de deficiencia), las plantas suelen sufrir por falta de agua. En los periodos de exceso el agua se infiltra alimentando las capas freáticas o drena hacia bañados o arroyos. Ver también evapotranspiración.
Barbecho sucio: consiste en permitir un descanso durante toda o parte del año, pero con una cubierta protectora de residuos correspondientes al cultivo anterior. Este material recibe el impacto de las gotas de lluvia y reduce así su energía a un valor muy bajo. También disminuye la velocidad del escurrimiento superficial y, consecuentemente, su capacidad de transporte. Una cantidad de 560 Kg de paja por hectárea, bien distribuida, reduce la erosión hasta un 25%, de la que se produce con un barbecho limpio.
Barbecho limpio o desnudo: práctica que consiste en dar un descanso a la tierra,1 ya sea labrada o no, durante, parte o todo el año. Las labores culturales se efectúan sólo para controlar las malezas o incrementar el almacenamiento del agua en el suelo. La mayor parte de la erosión ocurre durante este tipo de barbecho, debido a la ausencia de protección por la cubierta vegetal y porque la energía cinética de las gotas de lluvia actúa directamente sobre la superficie del suelo. Estas dos condiciones generan la máxima cantidad de escurrimiento.
Barnices: películas brillosas generalmente formadas por arcilla y humus, que suelen revestir los agregados de los horizontes B2t de los suelos. La presencia de barnices se debe a la migración interna de esos materiales dentro del perfil.
Calciacuol: Gran Grupo taxonómico de los Acuoles (ver) que tienen dentro de los 40 cm un horizonte enriquecido en carbonato de calcio (ver horizonte cálcico).
Cálcico: horizonte de por lo menos 15 cm de espesor que presenta una acumulación secundaria de carbonatos de calcio o magnesio, que alcance al 15% de carbonato de calcio equivalente, y que esto significa un 5% más de carbonato que el del nivel subyacente.
Cámbico: horizonte subsuperficial que
presenta evidencias de trasformación pedogenética, pero no suficientes para calificar como un argílico. En general son horizontes B en los cuales la relación de arcilla B/A no alcanza 1,2.
Cambio textura! abrupto: concepto usado en taxonomía que hace referencia a un salto abrupto (en una distancia vertical de 7 u 8 cm) en el contenido de arcilla entre un epipedón (ócrico o álbico) y un horizonte argílico subyacente. Si el epipedón tiene menos de 20% de arcilla, éste se duplica en el argílico, y si tiene más de 20%, el incremento absoluto supera el 20%.
Camellones: lomos anchos y bajos separados por surcos paralelos y poco profundos. Para construir camellones se debe arar, alomar o elevar de algún modo la superficie del terreno llano o suavemente inclinado (los surcos efectuados de esta manera no serán clasificados como "zanjas de drenaje). Propósito: reducir la erosión en
tierras suavemente onduladas y mejorar las condiciones del drenaje superficial en tierras planas.
Canal derivador: canal nivelado o excavado a través de la pendiente con un camellón de soporte en el costado más bajo.
Propósito: derivar el exceso de agua hacia lugares donde se puede disponer de ella sin peligro.
Capa freática: nivel dentro del solum o en el substrato que se encuentra saturado con agua. Suele ascender o descender según que la ,poca sea lluviosa o seca. A veces puede formarse una falsa capa freática apoyada sobre algún horizonte o capa impermeable del suelo.
Capacidad de intercambio: propiedad de ciertos materiales del suelo (arcilla, humus, etc.) de retener cationes por absorción y de intercambiarlos. Se trata de un fenómeno físico-químico muy importante en la nutrición de las plantas.
Cincelado (labranza con cinceles) y subsolado: consiste en aflojar el suelo, sin invertirlo y con un mínimo de mezcla con el horizonte superficial, para romper las capas densas (como pisos de arado) por debajo de la profundidad normal de arada que impiden el movimiento del agua o el desarrollo radical. El cincelado se aplica cuando las capas densas se encuentran a menos de 30 cm. de profundidad. El subsolado se efectúa cuando dichas capas limitantes se hallan a más de 30 cm.
Propósito: mejorar la penetración del agua y de las raíces y la aireación del suelo.
Cobertura: aplicar sobre la superficie del suelo residuos de plantas u otros materiales adecuados no producidos en el lugar del cultivo.
Propósito: conservar la humedad, prevenir la compactación superficial o la formación de costras, reducir la escorrentía y la erosión, controlar las malezas y favorecer el desarrollo de una cubierta vegetal.
Color del suelo: características del material del suelo debidas a la reflexión de la luz sobre las partículas minerales o sus revestimientos. En las descripciones técnicas de los perfiles siempre se indica el color del material o de los barnices comparándolo con una carta patrón (Munsell Soil Color Chart) que designa los colores con un nombre y un símbolo de acuerdo con tres variables: el matiz, la luminosidad y la intensidad. El color del suelo tiene importancia para su clasificación.
Complejo de suelos: unidad cartográfica compuesta por dos o más suelos que se asocian geográficamente según un patrón definido y en proporciones
constantes. Este patrón es, sin embargo, suficientemente complejo e intrincado como para que aún a escalas de detalle, los suelos componentes no podrían mostrarse separadamente.
Concepto central: toda unidad taxonómica es creada con fines de clasificación para manejar más fácilmente el conjunto, a veces numeroso, de individuos de diversa naturaleza. Cada unidad taxonómica agrupa de esta manera a individuos que representan, con mayor aproximación, el concepto que se tiene de la misma. En cambio, otros individuos se alejan algo de ese concepto. Cuando se agrupan suelos para formar unidades de clasificación, ciertos individuos representan mejor los caracteres que se consideran esenciales para el conjunto o taxón. El suelo más representativo del conjunto, que ejemplifica mejor los caracteres más esenciales, se considera como "concepto central" del taxón. En la práctica, para documentar o ilustrar el concepto central con un perfil, se describe uno denominado "perfil típico" o "perfil tipo". El concepto central es mas bien abstracto o hipotético; en cambio, el perfil típico es concreto.
Concreciones: formas debidas a
concentraciones endurecidas de ciertos componentes del suelo; son a menudo esferoidales, mamelonadas o aperdigonadas. En los suelos pampeanos son comunes las concreciones calcáreas, (carbonato de calcio) vulgarmente llamadas, por su forma "tosquillas" o "muñequitas de loess", y las de hierro y manganeso con aspecto de perdigones o municiones negras.
Consociación: unidad cartográfica compuesta por una sola serie de suelos ampliamente dominante. En términos generales, una consociación puede aceptar hasta un 15% de inclusiones o impurezas de otros suelos.
Contacto lítico: limite entre el suelo y una capa continua de material subyacente de consistencia pétrea (dureza mayor de 3 en la Escala Mohs).
Control de malezas: lucha contra las malezas por medios mecánicos, químicos, biológicos u otros en todas las áreas excepto en tierras recién labradas. Incluye los bordes de los caminos, vías férreas, etc.
Propósito: eliminar o reducir la
competencia de las malezas frente a especies útiles para facilitar el restablecimiento de una cubierta vegetal aceptable para la protección del suelo, suministrar forraje o conservar la humedad.
Cubierta de residuos: manejo de los residuos vegetales a lo largo de todo el año de manera que las operaciones de preparación de la tierra, siembra o implantación, labranza y cosecha se realicen conservando cantidades protectoras de material vegetal sobre la superficie del suelo.
Propósito: reducir las pérdidas de suelo causadas por el viento o el agua, mejorar la infiltración del agua y las condiciones físicas del suelo.
Cultivo de forrajeras (henificar, ensilar, etc.): implantar por un largo período especies adaptadas de forrajeras perennes, bianuales o de resiembra espontánea en tierras dedicadas a otros usos.
Cultivo en curvas de nivel o cortando la pendiente: dirigir las labores agrícolas en tierras cultivadas inclinadas, de manera que los trabajos de arada, preparación de la sementera, siembra y cultivo se efectúen en curvas de nivel o cortando la pendiente principal. Propósito: reducir la erosión y ayudar a controlar y mejorar el aprovechamiento del agua.
Cultivo en franjas de nivel (de contorno o contorneadas): implantar cultivos
dispuestos simultáneamente en franjas o fajas siguiendo las curvas de nivel para reducir la erosión hídrica. Los
cultivos se disponen de modo tal que una franja de pastura o cultivo agrícola denso se alterne con otra franja de cultivos de escarda o un barbecho. Propósito: ayudar a controlar la
erosión y el escurrimiento superficial en tierras de cultivo y donde esta práctica en contorno sea factible.
Cultivos en franjas rectas: implantar
cultivos en disposición sistemática de franjas o fajas cruzando la pendiente general para reducir la erosión hídrica, los cultivos se disponen de manera que una franja de pastura o cultivo denso se alterne con una de cultivo de escarda o un barbecho.
Propósito: ayudar a controlar la
erosión y el escurrimiento superficial en tierras de cultivo o donde el "cultivo en franjas siguiendo las curvas de nivel" no resulte práctico o no sea factible.
Cumúlico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo extragrado en el cual hay un marcado engrosamiento del horizonte superficial por acumulación de material transportado desde posiciones altas del relieve.
Curvas de nivel: líneas imaginarias sobre la superficie del terreno que une puntos de igual altura; el conjunto de curvas de nivel dibujadas sobre el plano del campo indica la topografía del mismo.
Desagüe vegetado o praderizado: implantar vegetación adecuada en un curso natural de agua o en un desagüe perfilado o nivelado que encauce sin peligro el escurrimiento superficial. Se aplica en lugares donde el agua proveniente del escurrimiento
superficial concentrado debe ser eliminada a velocidades no peligrosas. Propósito: prevenir pérdidas
excesivas de suelo y formación de cárcavas.
Desfonde o arada profunda: consiste en arar hasta 30 cm. de profundidad (horizonte Al-Bl), con mezcla de hasta 50% del horizonte subyacente,
con el fin de romper el piso de arado u horizonte compactado y facilitar la penetración de las raíces.
Drenaje (del suelo): se refiere a la rapidez y facilidad con la que el agua es eliminada del suelo en su estado natural, tanto por escurrimiento superficial como por infiltración hacia la capa freática. El desagüe artificial por medio de zanjas, canales, y/o bombeo del agua suele mejorar la condición del drenaje natural del suelo. Se distinguen siete clases de drenaje natural.
Suelo muy pobremente drenado o mal drenado: el agua se elimina tan lentamente que la capa freática permanece sobre o muy cerca de su superficie la mayor parte del tiempo. Estos suelos suelen ocupar las depresiones, los bajos y los planos aluviales semi-pantanosos y las charcas o manchones y lagunas temporarias; en su estado natural son tan húmedos que imposibilitan la realización de cultivos importantes si antes no se procede a drenarlos artificialmente, regular el nivel freático o trazar.camellones.
Suelo pobremente drenado: el agua escurre tan lentamente que mantiene húmedo el suelo gran parte del tiempo. Esto puede ser debido a un nivel freático alto y/o un horizonte o capa de permeabilidad lenta a muy lenta y/o infiltraciones. La cantidad de agua que permanece dentro y sobre estos suelos imposibilita el crecimiento de cultivos importantes en la mayoría de los años bajo condiciones naturales. Para mejorar estos suelos es necesario un drenaje artificial, aunque no es siempre suficiente para convertirlos en tierras de cultivo.
Suelo imperfectamente drenado: el
agua se elimina con cierta lentitud y el suelo suele mantenerse húmedo por lapsos importantes. Por lo general, este suelo tiene algún horizonte de permeabilidad lenta y/o una capa freática relativamente alta y/o sufre de
infiltraciones. En áreas de praderas, los suelos de esta clase suelen tener horizontes A oscuros y espesos, con leves a moderados síntomas de hidromorfismo inmediatamente por debajo del horizonte A. En suelos planosólicos, la base del horizonte A ya puede aparecer débilmente moteada. Por lo general, el crecimiento de varios cultivos de importancia se ve restringido si no se aplica drenaje artificial.
Suelo moderadamente bien drenado: en éstos el agua se elimina con alguna lentitud, por lo cual pueden mantenerse mojado,s por pequeños pero significativos lapsos. Suelen tener algún horizonte o capa dentro del solum de permeabilidad
moderadamente lenta y/o cierta infiltración. Los suelos de esta clase suelen presentar algunos moteados en los horizontes B o C. Los cultivos perennes y con raíces profundas, pueden sufrir algo con el exceso temporario de humedad, pero los anuales de enraizamiento poco profundo no se ven afectados significativamente. El nivel freático es normalmente profundo, pero puede ascender en los períodos lluviosos hasta llegar a la base del solum.
Suelo bien drenado: es el suelo que presenta las condiciones óptimas de drenaje natural; por una parte, después de las lluvias o el riego, retiene una cantidad óptima de agua para el crecimiento de los cultivos y, por otra, el exceso de agua se retira con facilidad pero no con rapidez. Son suelos de texturas no extremas con algún horizonte de permeabilidad moderada; están libres de moteados u otros síntomas de hidromorfismo dentro del solum.
Suelo algo excesivamente drenado: el agua se retira con rapidez y tiene una capacidad de retención de humedad algo deficiente como para asegurar un buen crecimiento de los cultivos importantes sin riego adicional. Por lo general son arenosos con poca diferenciación de horizontes y permeabilidad rápida o moderadamente rápida. El suelo no muestra moteados ni nivel freático cercano a la superficie.. Sólo determinados cultivos soportan un suelo algo excesivamente drenado (maní¡ y citrus). Comúnmente los rendimientos son bajos si no se aplica riego suplementario.
Suelo excesivamente drenado: el agua se retira con demasiada rapidez debido a la alta porosidad del suelo y/o por ser escarpado; es decir, por presentar permeabilidad rápida o muy rápida y/o escurrimiento muy rápido, prácticamente no retienen humedad; la mayor parte de las precipitaciones se pierden. Por lo tanto, resulta inepto para los cultivos comunes si no se aplica riego.
Drenes verticales: pozos, caños, hoyos o agujeros barrenados hasta un estrato poroso subyacente dentro del cual puede descargarse el agua de drenaje. Algunas veces se los designa "pozos de drenaje o de infiltración".
Duracuol: Gran Grupo taxonómico de los Acuoles (ver) con un horizonte fuertemente cementado (ver duripán).
Duripán: horizonte o capa del suelo endurecida irreversible. Generalmente consiste en una cementación de las partículas por sílice o un silicato de aluminio.
Edáfico: perteneciente al suelo.
Edafología: ciencia del suelo.
Emparejamiento del terreno: eliminar las irregularidades de la superficie del terreno (microrrelieve) mediante el rabasto u otra herramienta adaptada a este fin. No incluye el "repaso fino" (práctica regular de mantenimiento en tierras bajo riego) ni la "alisadura" (etapa final en un trabajo de "nivelación del terreno para riego" o "nivelación del terreno para drenaje").
Propósito: mejorar el drenaje superficial, manejar el agua con más eficiencia, obtener profundidad de siembra, proveer a una labranza mas regular y mejorar la eficiencia operativa de la maquinaria.
Entico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que intergrada hacia el Orden de los Entisoles que se caracterizán por no evidenciar o tener escaso desarrollo de horizontes pedogenéticos.
Entisol: Orden taxonómico que se caracteriza por no evidenciar o tener escaso desarrollo de horizontes pedogenéticos. La mayoría poseen solamente un horizonte superficial claro, de poco espesor, y relativamente pobre en materia orgánica (ver epipedón ócrico). Normalmente no se presentan otros horizontes diagnósticos, lo que se debe en gran parte al escaso tiempo transcurrido desde la acumulación de los materiales parentales e iniciación de los procesos pedogénicos. También pueden incluir horizontes enterrados, siempre que se encuentren a más de 50 cm de profundidad.
Epipedón: La parte superior del suelo, no es sinónimo de horizonte A ya que puede ser mayor o menor que éste.
Erosión: remoción y transporte del material de la superficie del suelo. Si es causada por la escorrentía del agua se denomina erosión hídrica y erosión eólica si es causada por el viento. Según el grado o intensidad del fenómeno se distinguen seis clases de suelos: Z) sin erosión, 2) con erosión ligera, 3) con erosión moderada, 4) con erosión severa, 5) con erosión grave y 6) con erosión muy grave. El proceso de la erosión comprende la remoción, el transporte y la acumulación o sedimentación del material removido.
Escorrentía o escurrimiento: eliminación del agua que corre sobre la superficie del suelo. La facilidad del escurrimiento superficial está íntimamente relacionada con el relieve y la pendiente del lugar.
Establecimiento de pasturas: establecer una población de forrajeras de larga duración (perennes, bianuales o de resiembra espontánea) en tierras dedicadas a otros usos.
Propósito: regular el uso del suelo, producir forraje de calidad, recuperar tierras erosionadas, mantener o mejorar la productividad del suelo.
Estructura (del suelo): agrupación de partículas primarias en otras compuestas o en cuerpos naturales individualizados que se denominan agregados. La estructura confiere al suelo características muy diferentes de las que posee la misma masa sin estructurar. La estructura se distingue por la forma, el tamaño y la coherencia de los agregados. Con respecto a la forma se diferencian los siguientes tipos de estructuras:
- migajosa, semi-migajosa y granular;
- bloques (angulares, subangulares, aplanados, etc.);
prismática, semi-columnar o columnar;
- laminar.
Los horizontes sin estructura se denominan "masivos" cuando forman una masa coherente y en "grano simple" cuando la masa no tiene coherencia. Por su tamaño, los agregados se describen como muy finos, finos, medios, gruesos y muy gruesos; por la cohesión, se describen como débiles, moderados y fuertes.
Evapotranspiración: expresa la suma de la cantidad de agua evaporada directamente de la superficie del suelo más la transpirada por la vegetación que la cubre. Se mide en milímetros de agua por unidad de tiempo (día, mes, año). Según el grado de cobertura del suelo y la disponibilidad de agua se distingue:
a) Evapotranspiración potencial: es la cantidad máxima de agua que, en forma combinada, puede evaporar el suelo y transpirar las plantas de un lugar bajo las condiciones climáticas existentes estando el suelo completamente cubiertos de vegetación y provisto de agua en cantidad óptima.
b) Evapotranspiración real (o actual): es la cantidad de humedad que evapora el suelo y transpiran las plantas en forma combinada, de acuerdo con la cantidad de vegetación que lo cubre y con los niveles de agua disponibles en el período considerado.
Familia: categoría del sistema taxonómico en que se dividen los Subgrupos. Se establecen dentro de los Subgrupos sobre la base de características o propiedades físico-químicas que afectan el manejo. En general son propiedades de horizontes que aparecen por debajo de la profundidad de arada, donde hay intensa actividad biológica. Entre las características y propiedades tenidas en cuenta están las clases por tamaño de partícula, la composición mineral, el régimen de temperatura, la profundidad de la zona de enraizamiento, la consistencia, la humedad equivalente, la pendiente y el agrietamiento. El nombre de una Familia se forma con el nombre del Subgrupo al cual pertenece seguido de los términos que indican las propiedades. Por ejemplo: Argiudol típico, franco fina, mixta, térmica.
Fase del suelo: unidad cartográfica donde se señala alguna característica importante del suelo paras su uso o manejo, como puede ser la erosión o su peligro, la pedregosidad, la pendiente, el drenaje, el riesgo de inundación, etc.
Fertilización: acción de aplicar fertilizantes.
Fertilizante: sustancia o mezcla de sustancias que se aplican, sobre o en el interior del suelo, para estimular el crecimiento de las plantas, aumentar la productividad, mejorar la calidad de las cosechas o inducir en el suelo cambios favorables de orden físico, químico o biológico.
Fluvent: Suborden taxonómico de los
Entisoles (ver) desarrollados sobre sedimentos relativamente recientes depositados por la dinámica del agua. Es normal observar en el perfil la estratificación de los materiales entre los que suelen alternar capas con diferentes contenidos de materia orgánica. Una característica común a todos los fluvent es la ausencia de rasgos hidromórficos, los cuales son típicos de suelos más mojados como los Acuentes.
Fluvéntico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo caracterizado por una sucesión de materiales de deposición fluvial. Suele ser evidente la estratificación en capas de diferente naturaleza.
Fotocarta: mapa de suelos impreso sobre la copia de un fotomosaico aéreo.
Fotomosaico: imagen fotográfica obtenida mediante la yuxtaposición y ensamble de fotografías a,reas.
Fragiacualf: Gran Grupo taxonómico de los Acualfes (ver) que se caracteriza por la presencia de un horizonte denso y quebradizo cuando húmedo, pero que se torna muy duro en seco (ver fragipán). Este horizonte representa un impedimento para el movimiento vertical del agua por lo que el suelo se satura en épocas de lluvias, pudiendo asimismo representar un impedimento físico para el desarrollo de las raíces de las plantas, cuando se encuentra a poca profundidad.
Fragipán: capas del subsuelo con alta densidad y muy duras cuando secas, pero que se toman quebradizas, aunque no blandas, cuando se humedecen
Franca: ver textura del suelo.
Gran Grupo: categoría del sistema taxonómico en que se dividen los
Subórdenes. Cada Suborden se divide en Grandes Grupos sobre la base de similitudes en el tipo, disposición y grado de desarrollo de los horizontes gen,ticos; de los regímenes de temperatura y humedad y del nivel de saturación con bases. Cada Gran Grupo se identifica con el nombre de un Suborden al que se le agrega un prefijo que indica la propiedad diferenciadora del suelo. Por ejemplo: Argiudol; en el cuál Argi significa desarrollo diferencial de horizontes y udol es el nombre del Suborden de los Molisoles de climas húmedos.
Halófila: planta que vive normalmente en suelos salinos o con alcalinidad excesiva.
Haplacuent: Gran Grupo taxonómico de los Acuentes (ver), generalmente arcillosos y permanentemente saturados con agua, lo que no permite el desarrollo de horizontes gen,ticos, debido a la humedad y la vegetación asociada difícilmente pueden aprovecharse para pastoreo.
Haplacuol: Gran Grupo taxonómico de los Acuoles (ver) que típicamente presentan un horizonte B de escaso o mínimo desarrollo (ver cámbico)
Hapludol: Gran Grupo taxonómico de los Udoles (ver) que tienen generalmente debajo del horizonte superficial oscuro (ver epipedón mólico) un horizonte de alteración con ligero o moderado enriquecimiento en arcillas secundarias (ver horizonte cámbico); suelen ser ricos en carbonates de calcio, sobre todo si se los compara con los Argiydoles (ver).
Haplustol: Gran Grupo taxonómico de los Ustoles (ver) caracterizado por la ausencia de horizontes claramente diferenciados o bien desarrollados, aparte del horizonte superficial oscuro que caracteriza el Orden.
Helada: temperatura del aire de 0°C. o menos, medida al abrigo meteorológico a 1,50 m de altura sobre el suelo.
Número medio de días con heladas: expresa el número de heladas que, término medio, ocurren en un lugar y en una unidad del tiempo (mes, estación, año). Se obtiene dividiendo la suma de las heladas que corresponden a una misma unidad de tiempo, por el número de años del período.
Fecha media de primera helada: promedio de las fechas de la primera helada producida durante el número de años considerado.
Fecha extrema de primera helada: es la fecha de la helada que se produjo más tempranamente (más cerca del comienzo del año) durante el período observado.
Fecha extrema de última helada: es la fecha de la helada que se produjo más tardíamente (más cerca de la finalización del año) durante el período observado.
Hidrófila: planta que vive normalmente en suelos con exceso de agua por mal drenaje o anegamiento periódico.
Hidromorfismo: proceso de formación de suelo bajo condiciones de exceso de humedad o con influencia del periódico ascenso de la capa freática. Los síntomas más comunes de hidromorfismo son: presencia de moteados, barnices muy oscuros, colores neutros (grises, verdosos o amarillentos) en el material del suelo, concreciones de hierro, manganeso, etc.
Horizontes del suelo: capas naturales del perfil del suelo, aproximadamente paralelas a la superficie, con rasgos distintos en cuanto a composición y propiedades. Cada horizonte ofrece determinadas características desarrolladas por la acción de procesos de formación que se utilizan para la clasificación del suelo. En las descripciones técnicas de perfiles se distinguen los horizontes siguientes:
Horizonte A: material mineral superficial de máxima acumulación de materia orgánica debido a la mayor concentración de elementos biológicos que posee. Se los designa comúnmente como tierra negra arable. Se caracteriza porque ciertos elementos son removidos, en solución o suspensión, por las aguas de infiltración. En algunos suelos pampeanos, este horizonte suele ser objeto de un lavado intensivo; el horizonte A puede comprender: Al (con mayor contenido de materia orgánica), A2 (la parte más lavada) y A3 (la parte inferior del A transición hacia el horizonte B).
Horizonte B: material mineral donde se acumula la mayor parte de las sustancias removidas del horizonte A (arcilla y humus) y en el que se desarrolla generalmente una estructura prismática o en bloques. El sistema de clasificación de suelos utilizado en el levantamiento de la Carta de Suelos de la República Argentina denomina argílico al horizonte B cuyo tenor de arcilla supera en determinados porcentajes al tenor del horizonte A y se define como "B2t" o "B textural", para texturas medias la relación entre dichos tenores es 1,2:1. El horizonte B1 es la parte transicional entre el A y , B. El horizonte B2 ofrece siempre las características más representativas, del horizonte B y puede subdividirse en B21, B22, etc. El B3 es la transición entre el B y el C.
Horizonte C: material mineral generalmente suelto, relativamente inalterado, no -consolidado y sin estructuras, situado por debajo del horizonte B. En muchos suelos de las lomadas pampeanas, el material del horizonte C está representado por el loess pampeano y es el material originario del solum. En las descripciones de los suelos de esta publicación se lo cita como "substrato del suelo".
Cuando las capas que se observan en un perfil no están formadas por procesos edáficos o gen,ticos sino por acumulación de sedimentos aluvionales, no se denominan "horizontes" sino simplemente "capas".
Interfluvio: área de tierras altas situadas en la divisoria de agua entre dos o más corrientes especialmente cuando éstas corren aproximadamente paralelas.
Labranza mínima: limitar el número de labores culturales a las convenientes y esenciales para producir un cultivo y evitar daños al suelo.
Propósito: retardar el deterioro de la estructura del suelo, reducir la compactación y la formación de un piso de arado, mejorar la aireación del suelo, la permeabilidad y la aptitud para el laboreo.
Limo: partículas minerales del suelo cuyo di metro está entre 2 y 50 micrones (0,002 - 0,050 mm) o entre 2 y 20 micrones (0,002 - 0,020 mm) según la escala que se adopte. La primera corresponde al sistema americano y la segunda al llamado "limo internacional" o escala de Atterberg. En esta publicación se utiliza el primero.
Limoso: ver textura del suelo.
Lítico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que se caracteriza por la presencia de un contacto lítico o manto de roca sólida y continua cercana a la superficie.
Lixiviar-lixiviado: (en edafología) acción y efecto del lavado por el agua de sustancias a través de los poros y las grietas del suelo produciendo el arrastre y migración interna de las sales, arcilla o humus.
Loess pampeano: sedimento de grano fino generalmente de textura franco limosa, transportado por los vientos del oeste desde las regiones cordilleranas y depositado en la región pampeana como una cobertura a veces de varios metros de espesor. Dado que posee un contenido de arcilla demasiado alto para constituir un verdadero "loess" muchas veces se habla de sedimentos "loessoide" o "loéssico". Cuando tiene textura limosa se denomina "limo Loessoide".
Manejo de pasturas para pastoreo y/o henificar, ensilar, etc.: tratar y usar apropiadamente los campos para pastoreo o para corte.
Propósito: ayudar a proteger el suelo y reducir las pérdidas de agua; prolongar la vida útil de las especies forrajeras convenientes; mantener o mejorar la calidad y cantidad del forraje.
Mejoramiento de pasturas para pastoreo y/o para henificar, ensilar, etc.: re implantar las especies forrajeras existentes, establecer otras o mejorar las tierras mediante discado u otros procedimientos mecánicos.
Propósito: obtener rendimientos satisfactorios de forraje de alta calidad dando protección adecuada al suelo.
Mólico: (1) epipedón: horizonte superficial que cuando se mezclan los primeros 18 cm, contienen por lo menos 1% de materia orgánica: además es de color oscuro y presenta cierto grado de estructuración como para no ser masivo y duro; la saturación con bases es de por lo menos 50% y nunca están secos por más de tres meses al año. (2): adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que presenta un horizonte superficial oscuro y rico en materia orgánica (para Ordenes que normalmente no los poseen).
Molisol: Orden taxonómico que se caracteriza por suelos de colores oscuros, desarrollados bajo una cobertura vegetal integrada fundamentalmente por gramíneas, lo que los hace ricos en materia orgánica. Están bien estructurados en la superficie, lo que facilita el movimiento del agua y el aire: el calcio domina el complejo de intercambio facilitando la floculación de coloides y la buena estructuración. En general son suelos que se trabajan fácilmente y de alta a moderada fertilidad.
Moteados: manchas en forma de lunares o "motas" de color y tamaño variable que pueden aparecer en los horizontes del suelo. La presencia de moteados se reconoce como un síntoma de falta de drenaje o de aireación del suelo, en cuyo caso predominan los de color rojizo sobre una matriz grisácea. En la descripción de los moteados se toma como referencia la abundancia, (escaso, comunes o abundantes), el tamaño (finos, medios o gruesos) y el contraste con el material que lo rodea (débiles, precisos o sobresalientes).
Natracualf: Gran Grupo taxonómico de los Acualfes (ver) que se caracteriza por un complejo de intercambio rico en cationes de sodio a nivel del horizonte iluvial de acumulación secundária de arcillas (ver horizonte nátrico). Las malas condiciones físicas, derivadas de la dominancia del sodio, afectan el desarrollo radicular, la oxigenación de la atmósfera edáfica y el movimiento vertical del agua en el perfil.
Natracuol: Gran Grupo taxonómico de los Acuoles (ver) que tienen un elevado contenido de sodio de intercambio en el horizonte iluvial (ver argílico).
Natralbol: Gran Grupo taxonómico de los Alboles (ver) con horizonte de enriquecimiento en arcilla en el cual el catión sodio domina el complejo de intercambio (ver nátrico).
Nátrico: (1) horizonte subsuperficial que reúne todas las condiciones de argílico y que además presenta una estructura fuertemente prismática o columnar y más del 15% del complejo de intercambio está dominado por sodio. (2) adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que intergrada a otro Gran Grupo con horizonte de enriquecimiento secundario de arcilla, y cuyo complejo de intercambio está dominado por el sodio.
Natrustol: Gran Grupo taxonómico de los Ustoles (ver) que presentan un horizonte de enriquecimiento secundario en arcillas en el cual el complejo de intercambio está dominado por el sodio (ver nátrico). Lo más común es encontrarlos en posiciones planas o Cóncavas del paisaje.
Nodulos: concentraciones débilmente cementadas de material del suelo que se desgranan con álcalis concentrados después de tratadas con un ácido fuerte. Suelen aparecer como bochas de tamaño variable generalmente con cemento de sílice o de hierro. Cuando más del 30% del volumen de un horizonte son nodulos duros ("durinódulos") el horizonte se considera un duripán.
Ocrico: (ver epipedón) horizonte superficial de color claro, con menos de 1% de materia orgánica, o bien que es masivo y duro o está seco por periodos mayores a tres meses al año. Son horizontes superficiales que no alcanzan a reunir las condiciones para ser mólicós (ver).
Orden: categoría más alta del sistema taxonómico. Actualmente se reconocen once Ordenes; las diferencias entre los mismos reflejan los procesos dominantes de formación y la intensidad con que los mismos actuaron. Cada Orden se identifica con una palabra que termina con la sílaba sol. Un ejemplo es Molisol.
Orthent: Suborden taxonómico de los
Entisoles (ver) formados típicamente en superficies recientes, los horizontes diagnósticos están ausentes o han sido truncados.
Pastoreo apropiado (ordenación del pastoreo): pastorear pastizales naturales o de resiembra espontánea y tierras destinadas a la fauna, con una intensidad que permita tener una cubierta vegetal adecuada (receptividad apropiada).
Propósito: permitir la acumulación del mantillo y cubierta vegetal viva para asegurar la retención del suelo y conservación del agua. Aumentar la producción cuantitativa y cualitativa del forraje.
Pastoreo diferido: posponer periódicamente en alguna ,poca de crecimiento anual, el pastoreo en las praderas por un lapso determinado.
Pastoreo rotativo diferido: sistema de apacentamiento donde una o más unidades de pastoreo descansan a intervalos planeados durante la estación de crecimiento de las plantas claves. Generalmente ninguna unidad se pastorea en la misma ,poca en años sucesivos.
Pendiente: inclinación de la superficie del suelo. Se define por su gradiente, su forma y su longitud. En la región pampeana se distinguen cinco clases de pendientes de acuerdo a su gradiente: de 0 a 0,5% (llana), de 0 a 1% (plana a muy suavemente ondulada), de 1 a 3% (suave a moderadamente ondulada), de 3 a 10% (fuertemente ondulada o inclinada) y más de 10% (fuertemente inclinada o colinada), con respecto a la longitud se distinguen pendientes cortas (menos de 50 m de longitud), medianas (de 50 a 200 m), largas (de 200 a 2.000 m) y muy largas (más de 2.000 m de longitud).
Perfil (del suelo): Corte vertical del terreno que expone la secuencia de los horizontes o capas naturales que componen el suelo. Un perfil se extiende desde la superficie del terreno hacia abajo hasta entrar en el material originario del suelo. En la región pampeana cordobesa este límite se halla generalmente entre 1,00 y 1,50 m.
Perfil modal: perfil del suelo que representa el conjunto de características típicas de una unidad taxonómica como la serie o el gran grupo. Se considera como el ejemplar tipo representativo del concepto central que se tiene de un suelo. En esta publicación se lo denomina "perfil típico".
Perfil típico: ver perfil modal.
Permeabilidad (del suelo): cualidad del suelo que permite el paso del agua o del aire tanto en sentido vertical como horizontal. Se distinguen siete clases de permeabilidad: 1) muy lenta o nula (suelo impermeable o muy poco permeable), 2) lenta (suelo poco permeable), 3) moderadamente lenta, 4) moderada (suelo moderadamente permeable), 5) moderadamente rápida (suelo permeable), 6) rápida (suelo muy permeable) y 7) muy rápida (suelo excesivamente permeable).
Petrocálcico: es un horizonte cálcico continuo y que se presenta cementado o endurecido, la cementación se produce con carbonatos y, accesoriamente, sílice. Suele ser equivalente a lo que gen,ricamente se conoce como "tosca".
pH (del suelo): medida de acidez o alcalinidad del suelo. Un valor de pH 7 indica neutralidad, valores más bajos indican acidez y valores más altos alcalinidad. Se adoptó la escala siguiente:
extremadamente ácido pH menor de 4,5
muy fuertemente ácido......de 4,5 - 5,0
fuertemente ácido.................. 5,1 - 5,5
medianamente ácido...............5,6 - 6,0
débilmente ácido................... 6,1 - 6,5
neutro.................................... 6,6 - 7,3
ligeramente alcalino................7,4 - 7,8
moderadamente alcalino.........7,9 - 8,4
fuertemente alcalino................8,5 - 9,0
muy fuertemente alcalino...... 9,1 - 9,5
extremadamente alcalino...... 9,6 a m s
Los suelos con pH superiores a 8,5 o con un porcentaje de sodio intercambiable elevado (generalmente más del 15%) son tan alcalinos que el crecimiento de la mayoría de las plantas cultivadas se ve impedido. La alcalinidad se puede evaluar por la intensidad, por la profundidad en que aparece dentro del perfil y por la extensión que abarca en el terreno.
Piso de arado: capa compacta y endurecida que suele formarse inmediatamente debajo de la parte del suelo removida por el arado dificultando la penetración del agua. La formación de un piso de arado es común en los suelos pampeanos cuando se ara siempre a la misma profundidad.
Plano aluvial: terreno plano y bajo situado sobre las márgenes de arroyos y ríos sujetos a inundaciones. Los suelos de los planos aluviales se desarrollan sobre sedimentos fluviales o fluvio lacustres depositados por las aguas.
Precipitación media: promedio de las lluvias, nieve y granizos caídos en un lugar, en cada unidad de tiempo, calculado sobre la base de registros diarios que se anotan en milímetros con la boca del pluviómetro a l,5m. sobre el suelo.
Día de lluvia: período de 24 horas (desde las 8 horas de un día hasta las 8 del día siguiente) en que se han leído por lo menos 0,3 mm. en la probeta del pluviómetro a 1,50 m de altura sobre el suelo.
Número medio de días con precipitación: expresa la frecuencia media (mensual, estacional o anual) de días de lluvia. Se obtiene dividiendo la suma de días de lluvias correspondiente a una misma unidad de tiempo por el número de años del período.
Período más seco y más húmedo: cantidad total, mínima y máxima de milímetros de agua caída en un lugar en una unidad de tiempo. Los valores mensuales, estacionales y anuales corresponden respectivamente al mes, estación y año más seco y más húmedo del período, pero no surgen de sumar los valores mensuales (o estacionales) de un mismo año.
Psamment: Suborden taxonómico de los Entisoles (ver), típicamente desarrollados sobre sedimentos arenosos de origen eólico en médanos estabilizados. Poseen una baja capacidad de retención de humedad como una de sus características sobresalientes.
Rabasto: especie de rastra o rastrón hecho de maderas o troncos destinados a allanar o nivelar el terreno.
Reducción de sales tóxicas: reducir o redistribuir las concentraciones de sales perjudiciales del suelo (algunas veces mencionado como "lavado" de suelo).
Propósito: crear en el suelo condiciones que permitan el desarrollo de una vegetación deseada.
Relieve: elevaciones e irregularidades de la superficie del terreno que dan carácter al paisaje de un área. Se distinguen: relieve pronunciado o excesivo, relieve normal (ondulado a suavemente ondulado), relieve plano o subnormal (llano) y relieve cóncavo (hoyas).
Rotación de cultivos: establecer una sucesión planificada de cultivos en un mismo terreno y durante un cierto número de años, con o sin intercalación de pasturas. La rotación incluye gramíneas y leguminosas o secuencia en las cuales los beneficios deseados se alcanzan sin esos cultivos. Es advertir que, ya por la extensión del predio como por el plan de explotación no siempre resultará posible el pastoreo. No obstante, se podrán hacer pasturas para la producción de semillas o heno. Propósito: aprovechar equilibradamente las reservas del suelo, mantener su productividad y conservarlo. Contribuir al control de las malezas, insectos y enfermedades propias del cultivo repetido.
Serie de suelo: es la unidad taxonómica más pequeña del sistema de clasificación de suelos utilizado en este trabajo.
Una serie es un grupo homogéneo de suelos desarrollados sobre un mismo material originario y donde la secuencia de horizontes y demás propiedades son suficientemente similares a las de su perfil modal o concepto central. Dentro de cada serie se admite una pequeña gama de variabilidad, siempre que no se aparte significativamente de su concepto central. Por lo tanto, los individuos que forman una serie son esencialmente homogéneos en sus caracteres más importantes.
Siembra bajo cubierta: implantar cultivos en línea entre pasturas, rastrojos o residuos de plantas sin una preparación previa de la sementera y realizar las operaciones subsiguientes de manera que se mantengan cantidades suficientes de residuos protectores, sobre o cerca de la superficie del suelo, durante la ,poca de crecimiento.
Sistema de drenaje (avenamiento): colectar y eliminar el exceso de agua superficial o subsuperficial, evitando el anegamiento de campos ya saturados.
Propósito: eliminar el exceso de agua superficial o subsuperficial, mejorar las condiciones del crecimiento previniendo daños al cultivo y facilitando las labores agrícolas. La instalación de este sistema se completa sólo cuando se han efectuado todas las prácticas planeadas: colectores principales y secundarios, defensas ribereñas, tubos de drenaje y otras prácticas o estructuras individuales destinadas a la eliminación o control del exceso de agua.
Slickensides (término inglés): superficies brillosas y estriadas presentes en los horizontes arcillosos de ciertos suelos, debidas al deslizamiento de las caras de los agregados como consecuencia del hinchamiento y contracción del material, a su vez originados por los cambios en el contenido de humedad.
Sodio intercambiable: el sodio en estado de ion (Na+) absorbido especialmente por la arcilla o el humus del suelo y que tiene la propiedad de intercambiarse con otros iones y pasar a la solución del suelo confiriéndole alcalinidad. Cuando en algún horizonte el porcentaje de sodio intercambiable supera el 15% del total de cationes absorbidos, el suelo se considera "sódico" y, por lo general, es fuertemente alcalino.
Solum: parte superior del perfil donde los procesos de la meteorización y formación del suelo actúan o han actuado más activamente. El solum comprende los horizontes A y B, pero no el substrato o material originario del suelo (horizonte C). En el solum se concentra casi la totalidad de la actividad biológica a cargo de las raíces de las plantas así como de las lombrices, insectos, hongos, bacterias, etc.
Subgrupo: categoría del sistema taxonómico en que se dividen los Grandes Grupos. Cada Gran Grupo tiene un subgrupo típico más otros que representan intergrados o extragrados. El Subgrupo típico corresponde al concepto central del Gran Grupo y no es necesariamente el más difundido. Los intergrados señalan transiciones hacia otros órdenes, subórdenes o grandes grupos; los extragrados presentan alguna propiedad que no corresponde al Gran Grupo pero tampoco indica transiciones hacia ningún otro tipo conocido de suelos. Cada subgrupo se identifica por uno o más adjetivos que califican el nombre del gran grupo. El adjetivo típico identifica al subgrupo que tipifica al gran grupo. Por ejemplo: Argiudol típico.
Suborden: categoría del sistema taxonómico en que se dividen los Ordenes. Cada uno de los Ordenes se divide principalmente sobre la base de propiedades que influencian la génesis y son importantes para el crecimiento de las plantas o de propiedades que reflejan las variables más importantes dentro de los Ordenes. La última sílaba en el nombre de un suborden indica el Orden y la primera señala la propiedad diferenciadora del Suborden. Por ejemplo Udol; en el que Ud significa húmedo y ol proviene de Molisol.
Subsolado: ver Cincelado.
Substrato: ver horizontes del suelo (horizonte C).
Temperatura media: expresa el promedio de las lecturas efectuadas diariamente en el abrigo meteorológico a 1,50 m de altura a las 8, 14 y 20 horas, más la corrección a 24 horas.
Temperaturas extremas (máxima y mínima absoluta): valores que expresan la temperatura máxima más alta y la mínima más baja registradas en cada unidad de tiempo del período considerado.
Térmico (régimen de temperatura): la temperatura media anual del suelo está entre 150 y 200 C.
Terraza de absorción: camellón o terraplén largo, ancho y sin gradiente, provisto de un canal paralelo que corta la pendiente. También se la conoce como "terraza plana". Puede ser de tipo paralela siguiendo las curvas de nivel o una combinación de ambas.
Propósito: reducir el daño por erosión interceptando el escurrimiento superficial y, al mismo tiempo, facilitar la infiltración del agua en el suelo a través del canal. Este tipo de terraza se instala en suelos permeables.
Terraza de desagüe: camellón o terraplén con gradiente provisto de un canal paralelo que corta la pendiente. También se la conoce como terraza "derivadora o de drenaje".
Propósito: reducir el daño por erosión, interceptando el escurrimiento superficial y conduciéndolo hacia una boca de salida o descarga estable a velocidad no erosiva.
Terraza paralela: ver terraza de desagüe.
Terraza plana: ver terraza de absorción.
Textura (del suelo): proporción relativa de las fracciones arena, limo y arcilla que componen la masa mineral del suelo. Sobre la base de las numerosas combinaciones posibles se han establecido doce "clases texturales" o "texturas". Estas clases, determinadas según las distintas proporciones de sus tres componentes son: arenosa, areno franca, franco arenosa, franca, franco limosa, limosa, franco arcillo arenosa, franco arcillosa, franco arcillo limosa, arcillo arenosa, arcillo limosa y arcillosa. Las texturas básicas son:
Arcillosa: clase textural donde predominan las partículas de arcilla con un mínimo 40% de esta fracción y un máximo de 45% de arena o 40% de limo.
Arenosa: clase textural donde predominan las partículas de arena con más de 85% de esta fracción y menos de 10% de arcilla.
Franca: clase textural con tenores entre 7 y 27% de arcilla, 28 al 50% de limo y menos de 52% de arena.
Limosa: clase textural donde predominan las partículas de limo con más del 80% de esta fracción y menos del 12% de arcilla.
Thapto-árgico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo caracterizado por la presencia de un horizonte argílico enterrado, debajo de materiales más recientes que corresponden a un nuevo ciclo de pedogénesis.
Thapto-mólico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo, caracterizado por la presencia de un horizonte que reúne las condiciones de un epipedón mólico enterrado debajo de materiales más recientes, que corresponden a un nuevo ciclo de pedogénesis.
Thapto-nátrico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo caracterizado por la presencia de un horizonte nátrico enterrado debajo de materiales más recientes, que corresponden a un nuevo ciclo de pedogénesis.
Tierras: denominación general que se da al conjunto de los suelos en el estudio agrológico de una región. Se reserva la designación de "clasificación de las tierras" para el agrupamiento de suelos hecho en relación con la utilización humana y considerando sólo las propiedades que definen su aptitud para determinado uso. "clasificación de los suelos" se refiere a su ubicación taxonómica. Se entiende por "suelo" cada uno de los individuos naturales morfológicamente diferentes que forman parte de un paisaje y que se caracterizan por determinadas propiedades físicas, químicas, mineralógicas, etc.; las cuales se definen de acuerdo con formas establecidas mediante la descripción de un "perfil". Así, en esta publicación, "suelos" ^ tiene una connotación técnica y "tierras" un significado de orden aplicado.
Típico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que representa al Gran Grupo en su concepto central.
Udico (1) régimen de humedad: en la mayoría de los años, los suelos con este régimen no están secos por períodos que superen los 90 días. (2). Adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que intergrada hacia un Suborden con régimen climático más húmedo.
Udifluvent: Gran Grupo taxonómico de los Fluventes (ver) que están bajo régimen údico de humedad. Pueden estar sujetos a anegamientos o inundaciones por lo menos una vez al año.
Udipsamment: Gran Grupo taxonómico de los Psammentes (ver), típicos de las regiones más o menos húmedas, desarrollados sobre arenas con apreciable cantidad de materiales meteorizables.
Udol: Suborden taxonómico de los Molisoles (ver) desarrollados típicamente en regímenes húmedos, o por lo menos que no están secos durante largos periodos en el año.
Udorthéntico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que presenta caracteres de los Entisoles (ver) y se encuentran en climas húmedos.
Unidad cartográfica: conjunto de delineaciones que aparecen en un mapa de suelos identificadas por un mismo símbolo y compuesta por un mismo suelo o la misma combinación de suelos.
Uso de rastrojo: utilizar en las tierras labradas residuos de cultivos producidos en ese mismo lugar, incorporándolos o dejándolos sobre la superficie durante la parte del año en que habitualmente ocurren períodos críticos de erosión.
Propósito: aumentar la infiltración, conservar la humedad, reducir la pérdida de suelo y mejorar la aptitud para el laboreo.
Ustico (régimen de humedad): en la mayoría de los años, los suelos se secan por períodos superiores a los 90 días, aunque inferiores a los 180 días.
Ustifluvent: Gran Grupo taxonómico de los Fluventes (ver) que se encuentran en climas subhúmedos (ver régimen ústico). Se encuentran en los planos aluviales de ríos y arroyos y generalmente están anegados en algún período coincidente con la estación lluviosa y de crecimientos de cauces.
Ustipsamment: Gran Grupo taxonómico de los Psammentes (ver), típicos de las regiones subhúmedas y semiáridas, se han desarrollado a partir de arenas ricas en minerales meteorizables.
Ustol: Suborden taxonómico de los Molisoles (ver) típico de climas subhúmedos a semiáridos, y temperaturas templadas y cálidas, en general libres de problemas de hidromorfismo. El clima se caracteriza por precipitaciones escasas y de carácter errático, aunque generalmente ocurren en la estación de crecimiento de ios cultivos.
Usíorthent: Gran Grupo taxonómico de los Orthentes (ver) que han evolucionado en condiciones semiáridas.
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