El conocimiento del suelo, de sus características y aptitudes para el uso, así como de su distribución geográfica dentro de un área, es fundamental para planificar racionalmente su utilización. La finalidad de las cartas o mapas de suelos es, precisamente, divulgar conocimientos sobre las propiedades de los suelos de una región y mostrar su distribución, clasificar cada tipo de suelo presente de acuerdo a su aptitud de uso, y basándose en toda esa información, dar a conocer las normas generales para su manejo y conservación.
El presente estudio está destinado principalmente al productor agropecuario con el propósito de ayudarlo a conocer mejor sus tierras y contribuir a que las maneje en forma adecuada, aumentando así su nivel de aprovechamiento; a los extensionistas y agrónomos, para que lo utilicen en las tareas de divulgación, ase-soramiento y manejo de campos; a los Ingt eros Civiles e Hidráulicos, para sus proyecos de construcción de caminos, edificios y demás obras para los cuales deben poseer datos sobre propiedades de los suelos.
La información suministrada por los mapas de suelos permite, además, su interpretación con otros importantes fines, entre ellos:
1. Determinar la capacidad de uso de suelos y estimar su productividad bajo determinado nivel de manejo.
2. Planificar el uso racional del suelo a distintos niveles (regional, subregional y predial) permitiendo adecuar las prácticas de manejo y conservación que exigen las distintas ciases de tierras para una mayor y sostenida productividad agropecuaria.
3. Dar las bases para la investigación y experimentación agropecuaria, permitiendo la extrapolación de resultados experimentales a otras regiones de condiciones similares.
4. Establecer bases técnicas con fines impositivos.
5. Determinar áreas de recuperación económica afectadas por la erosión, salinidad, alcalinidad, deficiente drenaje, etc.
6. Establecer criterios técnicos para la política crediticia, de colonización, de reforma de las estructuras agrarias, etc.
El presente informe contiene las Cartas de Suelos y el texto explicativo correspondientes a las Hojas 2963-32 Villa de María, 2963-33 Villa Candelaria, 3163-2 Sebastián Elcano y 3163-3 Puesto de Castro completas y parciales de las Hojas 2963-34-3 Paso de Beltrán, 3163-4-1 y 3 La Rinconada, 3163-8-1 y 2 San José de la Dormida, 3163-9-1 y 2 Villa Rosario del Saladillo y 3163-10-1 Pozo Verde, 2963-26-3 y 4 Villa Ojo de Agua y 2963-27-3 Sol de Julio del Instituto Geográfico Militar; presentadas en cuatro fo tocar tas.
Cada Hoja cubre una superficie aproximada de 178.500 ha, comprendidas entre el límite Norte de la provincia de Córdoba y el paralelo 30°30* de latitud Sur y los meridianos 62°45’ y 64°00’ de longitud Oeste, abarcando parte de los departamentos Río Seco, Tulumba, Sobremonte y Totoral (Fig. N°1 y 2).El área estudiada cubre una superficie aproximada de 11.250 km2.
El uso tradicional de la tierra es la ganadería de monte, que es reemplazada actualmente por prácticas de desmonte con el objeto de implantar pasturas o cultivos de cosecha. Inclusive se están implemen-tando sistemas de riego complementario.
En este trabajo se utilizó como material básico las hojas topográficas 3163-2-1 Rayo Cortado, 3163-2-2 Sebastián El-cano, 3163-2-4 La Esperanza, 3163-3-1 La Cañada, 3163-3-3 Puesto de Castro, 3163-8-2 Las Arrias y 3163-9-1 Villa Rosario del Saladillo, a escala 1:50.000, publicadas por el IGM. También se usaron fotografías aéreas a escala 1:40.000 y 1:75.000 del IGM y 1:20.000 de la Segunda Brigada Aérea de Paraná, y la imagen satelitaria Landsat N@ 229-81 del 14 de noviembre de 1997. Sobre esta última se trazaron los límites de suelos de las unidades cartográficas en las cuatro cartas.
La metodología utilizada incluye la interpretación de pares fotográficos estereoscópicos, la confección de mosaicos aerofotográficos no apoyados a escala 1:100.000, los procedimientos de reconocimiento y caracterización de suelos en el campo, tal como se describen en las Normas de Reconocimiento de Suelos (Arens y Etchevehere 1976).
La clasificación taxonómica de los Suelos se basa en el sistema americano Soil Taxo-nomy. Dado que los análisis mecánicos disponibles no segregan las fracciones 50-74 y 74-100 micrones, sino que se determina solo la fracción arena muy fina de 50-100 micrones, en la determinación de la clase por tamaño de partícula a nivel de familia, se ha empleado el criterio de asignar la mitad de la fracción arena muy fina al limo y la otra mitad a las arenas. Las tierras que se han delineado en los mapas fueron ubicadas por su capacidad de uso en alguna de las ocho clases definidas por el sistema del USDA.
La presente publicación es una actualización y ampliación de zona, en coincidencia con los límites de las Hojas Topográficas del IGM, de una primera edición de parte del área denominada Planicie Fluvio Eólica y Depresión del Río Dulce. NE de la provincia de Córdoba (Zamora et al 1981). Además de incluir un capítulo que trata sobre la caracterización agroclimática y la impresión sobre imagen satelital.
COORDINADOR DEL PLAN MAPA DE SUELOS:
Dr. Bahill JARSUN A. (1)
AUTORES
CORRELACION, FOTOINTERPRETACION Y REDACCION DE LA MEMORIA:
Dr. Eduardo M. ZAMORA (1)
RECONOCEDORES DE SUELOS:
Sector Norte: Geól. Héctor ESPIL (2)
Jorge A. SAADI (2)
Sector Sur: Dr. Eduardo M. ZAMORA
Ing. Agr. Víctor PACHECOY (2)
Ayudante de campo: Ing. Agr. Ricardo PORCEL DE PERALTA (2)
Guillermo PETROPULO (1)
CAPACIDAD DE USO Y MANEJO DE LAS TIERRAS:
Dr. Bahill JARSUN A.
Geól. Eduardo ZAMORA
Ing. Agr. León A. MURUA (1)
Participación de los Ings. Agrs. Carlos López (1), Luis M. Tomalino (1), Daniel Herrera (1), José Fortunato (3) y Carlos Arlla (3)
CONDICIONES CLIMATICAS:
Ing. Agr. Mariana CARNERO (2)
PROCESAMIENTO DIGITAL DE IMAGENES SATELITALES:
Verónica BUSTOS (1)
Ing. Agr. Mariana CARNERO
Ing. Agr. José Luis TASSILE (2)
Tipeo y procesamiento de textos:
Verónica BUSTOS
Ing. Agr. Mariana CARNERO
Guillermo PETROPULO
Los análisis físico químicos fueron realizados en el laboratorio de Suelos y Aguas de la SAGyRR.
(1) Técnicos del INTA Manfredi.
(2) Técnicos de la S.A.G. y R.R.
(3) Técnicos de la actividad privada.
En un corte esquemático de Oeste a Este del área de trabajo, se observan las siguientes unidades geomorfológicas y su vinculación con los suelos dominantes, a la altura aproximada del paralelo 30° Lat.S. (Figura N°3)
REFERENCIAS:
I: Flanco occidental
II: Meseta de San Francisco del Chañar
III: Flanco oriental
IV: Planicie fluvio eólica
V: Depresión del Río Dulce
VI: Planos altos
La Sierra Norte de Córdoba es considerada como una prolongación de la Sierra Chica y está compuesta por serranías y cordones montañosos que raramente superan los 1.000 m de altura. Geomorfoló-gicamente consiste en uno de los bloques elevados del sistema de fallas, de orientación aproximada Norte-Sur que caracteriza a las Sierras Pampeanas.
La conformación litológica es variada, siendo en la zona de estudio un granito en facie porfírico granodiorítica (Lucero, N. et al 1995). La vertiente occidental es más árida que la oriental, con suelos esqueléticos, pendientes pronunciadas y escarpadas, con altos porcentajes de afloramientos de roca. Por lo general tienen procesos de erosión hídrica generalizados localizados en algunos vallecitos.
Está ubicada en el área central de la Sierra Norte. Posee un relieve ondulado que raramente supera el 8% de gradiente.
El material superficial es un loes muy homogéneo de textura franco limosa a franco arcillo limosa, con espesores variables (1-20 m. a más), apoyados sobre horizontes petrocálcicos (tosca) o sobre la propia roca granítica parcialmente meteorizada.
Se observan, además, algunos desagües con suelos profundos, bien desarrollados, que drenan las aguas hacia la vertiente oriental de las sierras. Las Series de suelos dominantes son Haplustoles énticos, Calciustoles típicos y petrocálcicos (Series San Francisco del Chañar II, I y III).
La litología es semejante a la de la vertiente occidental. La diferencia consiste en relieves menos pronunciados, meteoriza-ción algo más intensa y profunda, horizontes superficiales de los suelos mejor desarrollados y menor porcentaje de roca expuesta.
Climáticamente esta vertiente recibe mayores precipitaciones que la occidental, siendo mas templada. Por lo general los procesos erosivos se observan en algunos vallecitos de forma lineal.
Es un plano muy suavemente ondulado, con pendiente regional hacia el Este, constituido por materiales loéssicos de textura franco limosa dominante, con intercalaciones de sedimentos fluviales provenientes de la Sierra Norte.
La composición granulométrica del loess (arena, limo y arcilla) es muy típica y similar a las ya estudiadas en gran parte de la llanura cordobesa. Este se encuentra cubriendo grandes sectores, sin ninguna modificación de sus características por influencia fluvial y en otros, más próximos al borde occidental de la planicie, está modificado (loess redepositado) y mezclado con materiales más gruesos (arenas y aún gravillas).
Estos materiales fluviales se encuentran vinculados a lomas onduladas o pendientes típicas de las formaciones pede-montanas (conos, abanicos, planos y derrames fluviales). El loess más típico o no modificado es característico en el Este, más lejos de las sierras.
Dominan las siguientes Series de suelos: En la zona de pié de monte y adyacencias, las Series San Pedro, Los Hoyos, El Rodeo y Las Macitas, integrando unidades compuestas con otros suelos subordinados. En el área de la planicie central y Este, son las Series Sebastián Elcano, Las Arrias y Las Macitas las dominantes.
Cuenca cerrada de la Laguna Mar Chiquita. Constituye una amplia concavidad de 80 a 100 Km. de ancho, limitada lateralmente por dos escalones aproximadamente paralelos denominados, el del Oeste "Barranca del Saladillo" y el del Este "Bordo de los Altos".
La parte más baja de la depresión, constituye la laguna Mar Chiquita, la cual es alimentada permanentemente por el Río Dulce, luego de atravesar de NNO a SSE a la depresión. En un pasado más o menos reciente, este río derramó sus aguas en forma de cauces principales y secundarios en los sectores aledaños al actual. En el presente, aún numerosos brazos forman una serie de bañados y lagunas salobres. En los períodos lluviosos el río sale de su cauce madre, desbordando y anegando áreas deprimidas.
Los materiales originarios reconocen un origen fluvio - lacustre, con texturas que varían entre franco limosas, franco arcillosas y franco arcillo limosas. Los suelos presentan un drenaje impedido con elevados tenores de sales solubles y alcalinidad sódica, salvo sectores de los albardones y algunos paleocauces, en los que las limitantes indicadas son menos severas.
Dominan las siguientes Series de suelos: En la zona del primer Saladillo, las Series El Jume, El Guanaco y La Angelita. En el área de la planicie aluvial de la Rinconada, mayoritariamente está ocupada por las Series La Rinconada, Pozo de la Olla, Los Aibales y suelos menores salino sódicos con drenaje deficiente. En la zona vinculada al curso actual del Río Dulce, las Series El Silencio y La Angelita asociadas a otros suelos aluviales inundables moderadamente alcalinos.
Son lomas suavemente onduladas, separadas abruptamente de la depresión por una falla geológica profunda, conformando un bloque elevado que contrasta notablemente con la concavidad.
Los materiales originarios están constituidos por sedimentos eólicos (loéssicos), dando lugar a suelos bien desarrollados en profundidad y con drenaje moderado a bueno, aunque por la escasa pendiente, presentan sectores de lento escurrimiento, en los que el drenaje se ve impedido y conformando suelos con limitaciones moderadas de alcalinidad sódica subsuperficial. Esta unidad se prolonga por decenas de kilómetros hacia el Este en la provincia de Santa Fe. Este ambiente geomorfológico queda excluido del área de la presente publicación.
Es de fundamental importancia el conocimiento de los elementos climáticos de la región para el análisis de sus posibilidades agrícolas, ganaderas y/o forestales.
Existen registros termométricos del Servicio Meteorológico Nacional en Villa de María de Río Seco. Esta localidad se encuentra a los 63°46’ Long.O y 29°54’ Lat.S, y a una altura de 341 m.s.n.m. La temperatura media anual es de 18,3°C, con una mínima en el mes de julio de 11,4°C y una máxima media mensual en el mes de enero de 24,8 °C.
Con respecto al período de heladas, éste abarcaría desde abril hasta principios de noviembre, con 140 días libres de heladas.
Analizando desde un punto de vista global, se puede concluir que se está frente a un régimen de precipitaciones irregular tipo monzónico, con un semestre lluvioso (octubre-noviembre a marzo-abril), que concentra el 80-84% del agua pluvial, y un semestre seco, con solo el 16- _ 20% del agua precipitable.
Es importante destacar la gran variabilidad interanual que se presenta, encontrándose años con precipitaciones del orden del 32% de la media, a extremos que alcanzan el 143% de la misma en años lluviosos (La Rinconada), por lo que los valores promedio son poco confiables.
Dada la magnitud del área estudiada, se efectúan los análisis pluviométricos para las localidades de Cerro Colorado, La Cañada, La Rinconada y Las Arrias, cubriendo de esta forma gran parte del área de estudio (Fuente: Cátedra de Climatología y Fenología Agrícolas de la F.C.A. de la U.N.C.).
CERRO COLORADO
Esta localidad se halla ubicada a los 63°56' long.O y 30°06' lat.S, y a una altura de 550 m.s.n.m. En el Cuadro N°1 se presenta el registro de precipitaciones promedio, abarcando 15 años (1970-1985).
La información de precipitaciones por si sola no es suficiente para conocer el Régimen Hídrico de un lugar, es decir, para conocer si la cantidad de agua que aportan las lluvias satisfacen las demandas requeridas por los cultivos en ese ambiente. Para ello es imprescindible conocer los consumos y las pérdidas de agua en el suelo y los cultivos, procesos que en conjunto se denominan evapotranspiración.
La misma puede tener dos formas: evapotranspiración potencial (ETP) que es un valor máximo en función de las características atmosféricas del lugar, y evapotranspiración real (ETR) que es consecuencia de las disponibilidades hídricas dadas por la precipitación y los aportes de humedad del suelo. A través del Balance Hidrológico se pueden vincular estos elementos para tener una idea aproximada de las posibles épocas de deficiencias o excesos de agua para los cultivos.
Un método que se emplea comúnmente para resolver esto es el de Thornthwaite y Mather (1967), estos autores proponen tablas de retención de humedad del suelo según las distintas capacidades. En este caso se utilizó la de 300 mm de almacenaje, tal como se hizo para otras Cartas de Suelos, a fin de que sean comparables, por lo menos a escala geográfica y climática, aunque a escala local o puntual los valores difieren un tanto de la realidad.
Con estas consideraciones se pueden comentar los datos consignados en el Cuadro N°5 y que se representa en el Gráfico N°l, los cuales corresponden a los resultados obtenidos al calcular el balance hídrico utilizando los datos de precipitación y temperaturas medias mensuales de la localidad de Villa de María de Río Seco (Serie 1941-1980 del Servicio Meteorológico Nacional).
Analizando el balance hidrológico, surge la existencia de un desequilibrio hídrico negativo entre la demanda de agua (ETP), y los aportes del suelo y la precipitación (126 mm de déficit anual). Solamente un mes (marzo) no presenta déficit, cuando se produce la recarga, y los meses de mayores déficit son Agosto, Setiembre, Diciembre y Enero. El agua total almacenada se mantiene en valores muy bajos, muy alejada de la capacidad máxima planteada.
En este capítulo se da a conocer la clasificación taxonómica de los suelos que se han reconocido en las Hojas que comprenden esta publicación, y se describen todas las unidades cartográficas señaladas en las Cartas. Las mismas llevan sobreimpresos límites y símbolos que corresponden a las unidades cartográficas o de mapeo de suelos.
Cada unidad cartográfica representa un suelo o una agrupación de suelos vinculados geográficamente. Algunas veces la unidad cartográfica corresponde a un paisaje homogéneo y los suelos suelen tener características muy similares entre sí, como sucede en la mayor parte de las lomas o campos altos del área estudiada.
Un grupo homogéneo de suelos desarrollados sobre un mismo material originario y donde la mayor parte de sus características son similares entre sí, constituyen una Serie de suelos. Dentro de cada Serie se admite una gama de variaciones en sus características, pero en general los suelos de una misma Serie son muy semejantes entre sí. Cada Serie de suelos se identifica con un nombre tomado de alguna localidad, paraje, o estancia de los alrededores del lugar donde dicho suelo se halla mejor representado o ’ fue primeramente estudiado. La Serie es la más pequeña de las unidades taxonómicas del sistema de clasificación empleado (Véase Clasificación de los Suelos).
Si bien los suelos de una misma Serie son prácticamente similares en todas sus propiedades y caracteres, dentro de un área cartografiada como perteneciente a una misma Serie se pueden observar sectores cuyos suelos poseen alguna propiedad externa o interna que difiera de lo que se tiene por “normar* para la Serie. Por ejemplo, una misma Serie puede ofrecer diferencias cuando sus perfiles muestran un grado mayor de alcalinidad o salinidad. Cuando se estima que las diferencias observadas pueden afectar el uso potencial y requerir distinto manejo, a esos sectores se los distingue y separa en el mapa como fases de la . Serie respectiva. En estas Hojas se han cartografiado fases por erosión, pendiente, salinidad, alcalinidad, drenaje e inundación.
En pocos sectores de las cartas que se presentan con este informe, las unidades cartográficas corresponden a Series puras o consociaciones. Los caracteres de los suelos comprendidos en ellas son suficientemente similares como para que se comporten de igual manera ante un mismo uso. Sin embargo, debe tenerse en cuenta que aún en las unidades consideradas como Series puras puede existir algún suelo menor o poco representativo, que cubra una superficie difícil de representar a lp. escala de esta publicación. Por ello, se advierte al lector sobre la posibilidad de que en una Serie cartografiada como unidad pura, puede encontrarse un 10 ó un 15% de inclusiones o impurezas de suelos menores.
Cuando un paisaje no es homogéneo en cuanto a los suelos, como ocurre con la mayor parte del área, o cuando por razones de escala no ha sido posible separar Series puras, en el mapa se han señalado asociaciones o complejos de suelos; en estas "Unidades Cartográficas compuestas" se agrupan dos o más suelos (Series) distintos. Las asociaciones de suelos reciben ios nombres de las Series o fases que la integran y en la mayoría de los casos también se indica el porcentaje correspondiente a la superficie ocupada por cada suelo dentro de la asociación. Las asociaciones podrían en muchos casos ser objeto de estudios más detallados, es decir, a escalas mayores (1:50.000, 1:20.000 o 1:10.000), para delimitar por separado los suelos que incluyen.
Sobre el borde oriental de la planicie fluvio eólica se observa una sola unidad correspondiente a la Serie Sebastián Elcano (SEc) con suelos homogéneos. A la escala utilizada (1:100.000), los suelos de estas lomas suavemente onduladas tienen características tan similares que se consideran como pertenecientes a esta única Serie de suelos. Por el contrario, la gran mayoría del área, en sectores planos influenciados por derrames fluviales, cauces de avenamiento temporario (cañadas), paleocauces y áreas próximas a las sierras del Oeste, muestra una variación muy notable de suelos en relativamente poca distancia. Este hecho obliga, por la escala de trabajo, a agrupar dos o más suelos diferentes en unidades cartográficas compuestas por más de una Serie, que se denominan asociaciones o complejos de suelos. Los complejos, caracterizados por una distribución más intrincada, donde los suelos cambian en pocos metros, no pueden ser separados a escalas más detalladas.
La mayor parte de los complejos corresponden a campos bajos, bañados, depresiones, sierras y mesetas. En la mayoría fue posible identificar las Series que los integran, en estos casos sus nombres se expresan de la misma manera que en las asociaciones. Cuando no se han podido determinar o identificar la mayor parte de los suelos que forman el complejo, la unidad cartográfica se define como un complejo indeterminado.
En el punto 3.1. se da la clasificación taxonómica de los suelos reconocidos en las cuatro cartas. Seguidamente, en el punto 3.2. se describen las unidades cartográficas, es decir, consociaciones, asociaciones y complejos de suelos.
De cada asociación o complejo se establecen las características del paisaje, los suelos que lo integran, los porcentajes de cada suelo -cuando ha sido posible estimarlos- y breves consideraciones sobre la aptitud para el uso, tales como las referidas a los problemas derivados de características desfavorables del suelo, del grado de erosión, del mal drenaje, etc.
La estimación del porcentaje de superficie que cubre cada suelo dentro de una asociación o un complejo es de suma utilidad para establecer la capacidad de uso válida para toda la unidad compuesta, de acuerdo con las capacidades de uso individuales de cada suelo integrante. Esto adquiere mayor importancia en los casos de unidades combinadas que están integradas por suelos de aptitudes agropecuarias muy dispares, como sucede cuando un complejo está formado por suelos arables aptos para agricultura y suelos alcalinos, muchas veces no aptos para cultivos de cosecha.
La estrecha relación de los suelos aluviales en el área de la depresión con la vegetación, fue un elemento vital durante la etapa de relevamiento original.
El nivel de la información presentada se considera de reconocimiento. Se delimitan áreas de diferente aptitud bajo el punto de vista de su receptividad natural o bien las posibilidades de implantación de pasturas o cultivos anuales.
Los criterios utilizados en la identificación y definición de las Series, han sido fundamentalmente de índole práctico, tomando las limitaciones de uso dominantes, tales como: drenaje, alcalinidad y/o salinidad (intensidad y profundidad), inundaciones, etc., además de los elementos que definen a las Series (materiales originarios, secuencia de horizontes, etc.).
Las referencias de orden utilitario e interpretativo de todas las unidades mapea-das (Series, Fases, Asociaciones o Complejos) se encuentran en el Capítulo 4, donde se consigna la clasificación por aptitud de uso de cada unidad.
En el Capítulo 5 se procede a señalar los rasgos distintivos y las características que identifican a cada una de las Series reconocidas en el área de esta memoria. En la descripción de cada Serie de suelos se indican en primer término la secuencia de horizontes que la caracterizan, las propiedades internas y algunas características externas del suelo, la posición que ocupa en el paisaje y, entre otras condiciones, su drenaje natural. A continuación se presenta la descripción técnica de un perfil típico de la Serie con los datos analíticos respectivos, destinados especialmente a quienes se interesen por una información más exhaustiva de la Serie.
En cuanto a la distribución geográfica de las unidades reconocidas, éstas aparecen en las cartas identificadas por medio de sus respectivos símbolos. En la Guía de Unidades Cartográficas, se consignan dichos símbolos, la composición de las unidades y la superficie en hectáreas y en porcentaje.
El sistema utilizado es el sistema americano conocido como Soil Taxonomy (USDA, 1975), que comprende seis categorías. Comenzando desde la más amplia, estas categorías son: Ordenes, Subórdenes, Grandes Grupos, Subgrupos, Familias y Series. La clasificación se basa en propiedades que pueden ser observadas en el campo o inferidas a partir de estas observaciones, o bien en datos analíticos de laboratorio. En el Cuadro N°6 se consigna la clasificación taxonómica de los suelos reconocidos en las Hojas, clasificados de acuerdo con este sistema. Las categorías del mismo son:
Orden: actualmente se reconocen doce órdenes; las diferencias entre los mismos reflejan los procesos dominantes de formación y la intensidad con que los mismos actuaron. Cada Orden se identifica con una sílaba. Por ejemplo: si termina en “ol” es Molisol.
Suborden: cada uno de los Órdenes se divide en Subórdenes principalmente sobre la base de propiedades que influyen en la génesis y son importantes para el crecimiento de las plantas o de propiedades que reflejan las variables más importantes dentro de los Órdenes. La última sílaba en el nombre de un Suborden indica el Orden y la primera señala la propiedad diferenciadora del Suborden. Por ejemplo “Udol”; en el que “Ud” significa húmedo y “ol” proviene de Molisol o bien “Ustol” donde “Ust” significa subhúmedo o semiárido.
Gran Grupo: cada Suborden se divide en Grandes Grupos sobre la base de similitudes en el tipo, disposición y grado de desarrollo de los horizontes genéticos, de los regímenes de temperatura y humedad y del nivel de saturación con bases. Cada Gran Grupo se identifica con el nombre de un Suborden al que se le agrega un prefijo que indica la propiedad diferenciadora del suelo. Por ejemplo: “Argiustol”; en el cual “Argi” significa desarrollo diferencial de horizontes y “ustol” es el nombre del Suborden de los Molisoles de climas subhúmedos o semiáridos.
Subgrupo: cada Gran Grupo tiene un Subgrupo típico más otros que representan intergrados o extragrados. El Subgrupo típico corresponde al concepto central del Gran Grupo y no es necesariamente el más difundido. Los intergrados señalan transiciones hacia otros Órdenes, Subórdenes o Grandes Grupos; los extragrados presentan alguna propiedad que no corresponde al Gran Grupo, pero tampoco indican transiciones hacia ningún otro tipo conocido de suelos. Cada Subgrupo se identifica por uno o más adjetivos que califican el nombre del Gran Grupo. El adjetivo “típico” identifica al Subgrupo que tipifica al Gran Grupo. Por ejemplo: Argiudol típico.
Familia: se establecen dentro de los Subgrupos sobre la base de características o propiedades físico-químicas que afectan el manejo. En general son propiedades de horizontes que aparecen por debajo de la profundidad del horizonte superficial, donde hay intensa actividad biológica. Entre las características y propiedades tenidas en cuenta están las clases por tamaño de partícula, la composición mineral, el régimen de temperatura, la profundidad de la zona de enraizamiento, la consistencia, la humedad equivalente, la pendiente y el agrietamiento. El nombre de una Familia se forma con el nombre del Subgrupo al cual pertenece seguido de los términos que indican las propiedades. Por ejemplo: Argiustol típico, franca gruesa, mixta, térmica.
Serie: las Series, como concepto taxonómico, consisten en suelos que tienen perfiles similares en cuanto a la sucesión de horizontes, los cuales son semejantes en color, estructura, reacción, consistencia y composición mineral y química. La textura de la capa superficial o del sustrato puede diferir dentro de las Series. Los nombres que se asignan a las Series son nombres locales que identifican el lugar donde los suelos están más difundidos o fueron estudiados por primera vez.
En este capítulo se describen las unidades cartográficas simples (consociaciones), y las unidades cartográficas compuestas (asociaciones y complejos). Estas unidades se describen por orden alfabético a continuación y en la Guía de Unidades Cartográficas.
Este complejo se ubica en el pié de monte de la sierra vinculado al Río Pisco Huasi, al Norte de San José de la Dormida. Se caracteriza por presentar relieves ondulados con arenas fluviales y suelos en capas de diversa granulometría.
Es frecuente la erosión lateral del río en crecientes, asociada a procesos de acumulación de materiales estériles sobre suelos agrícolas. En general, esta unidad cartográfica es apta para la implantación de pasturas o eventualmente para agricultura restringida a sectores escogidos estables.
Esta unidad se caracteriza por un patrón muy intrincado de suelos (aluviales, thápticos, con escaso desarrollo genético, etc.) y con serias limitaciones de drenaje impedido (capa freática alta), fuerte alcalinidad sódica y/o salinidad que restringen severamente su uso.
Se vinculan a terrazas fluviales y al-bardones, con inundaciones muy frecuentes y prolongadas, salvo los albar-dones favorecidos por el relieve relativamente más elevado, que permiten el es-currimiento de las aguas hacia las unidades bajas adyacentes.
El hecho de recibir aportes de agua dulce, posibilita en ciertas épocas el lavado superficial de las sales más solubles. Constituye un área de buenos pastizales naturales pero de difícil acceso, cuyo uso es de ganadería esencialmente bovina.
Ocupa sectores adyacentes al Río Dulce, siendo menos inundable que la unidad anterior; desde donde provienen los excesos hídricos. Comprende campos de pastoreo estacionales, estando los suelos esencialmente limitados por el hidromorfismo indicado, siendo la salinidad y alcalinidad de carácter moderadas.
Son laderas escarpadas o colmadas del basamento cristalino granítico, con valles en forma de “v”, y gradiente regional hacia el Este. Los suelos son de tipo regosólicos, escasamente desarrollados sobre rocas parcialmente meteorizadas (Ustorthent Uticos y paralíticos y en menor proporción Haplustoles paralíticos).
Se incluyen también en este complejo porcentajes menores de suelos profundos en pequeños valles y, además, un 30% estimado de roca expuesta. Las limitantes son suelos someros, fuertes pendientes, afloramientos, susceptibilidad a la erosión hídrica y clima.
Esta unidad cartográfica es apta para pastoreo extensivo bovino y caprino sobre especies nativas. Los vallecitos longitudinales pueden ser utilizados para la implantación de pasturas o agricultura en pequeña escala.
Comprende un pequeño sector ubicado al NO de la meseta de San Francisco del Chañar, en transición al flanco occidental de la Sierra Norte. Dominan los suelos regosólicos (poco desarrollados), afloramientos, y en menor medida, suelos profundos sobre loess, en relieves menos escarpados u ondulados. La aptitud natural es para pastoreo sobre especies nativas.
Ambiente de laderas muy escarpadas, áridas y semiáridas, donde se observan afloramientos de roca y suelos muy someros y esqueléticos, siendo la receptividad ganadera muy baja.
Como inclusiones, se observan algunos vallecitos, con suelos profundos, que drenan las aguas hacia la cuenca de las salinas, los que eventualmente admiten siembra de pasturas adaptadas.
Esta asociación se vincula a vías de escurrimiento bien manifiestas de la planicie, con suelos desarrollados a partir de materiales fluviales, los que presentan una buena estructura superficial, con buen contenido de materia orgánica y por lo general engrosado, por efectos de una evidente cu-mulización. El drenaje es bien a moderadamente bien drenado y totalmente libre de. sales y/o álcalis.
Está integrado por suelos de la Serie El Bañado 40%, que presenta un horizonte subsuperficial muy arcilloso (horizonte B2 fuertemente textural) y el 60% restante lo constituyen las Series El Rodeo y Los Sauces, de menor desarrollo subsuperficial, menos arcillosos.
Estas unidades constituyen en la región las llamadas "cañadas", y tienen un ancho que varía entre los 200 a 600 m. y reciben las aguas de escurrimiento de las partes más altas. Este proceso favorece la provisión de humedad a las mismas, presentando por lo tanto, una moderada limitación climática para su uso agrícola, no tan severa como las lomas propia-mente dichas.
Esta unidad corresponde al sector más bajo de la pendiente al "primer Saladillo” y conforma una gran zona ubicada en el flanco occidental de la depresión. Este complejo está compuesto por cuatro suelos, de los cuales dos de ellos son los más representativos y dominantes: la Serie El Guanaco con alcalinidad y salinidad moderada superficial y la Serie La Encrucijada, suelo franco limoso con salinidad y alcalinidad sódica moderada a fuerte subsuperficial y que aumenta en profundidad.
En menor proporción integran este complejo las Series Pozo de la Olla, caracterizado por un horizonte superficial lixiviado y fuerte alcalinidad sódica a partir del horizonte B2 y salinidad en profundidad^ y por último la Serie Las Arrias que ocupa la parte superior occidental de la unidad, menos limitada.
La vegetación natural es mixta, integrada por las especies dominantes del monte, con menor densidad y desarrollo, asociado con halófilas, cuya proporción aumenta a medida que se desciende hacia el primer Saladillo.
Las limitaciones para el uso de esta unidad constituyen fundamentalmente la alcalinidad sódica y salinidad subsuperficial (18 cm aproximadamente). En cuanto al drenaje interno de los suelos es imperfecto a moderado, y muchos presentan horizontes algo endurecidos (parcialmente cementados) en profundidad.
El anegamiento superficial es poco frecuente, de corta duración y muy localizado, ya que el agua por aportes de las partes altas es eliminada con relativa facilidad hacia el Saladillo. La aptitud de uso de la tierra es para campos naturales de pastoreo y en menor medida para la implantación de pasturas perennes.
Corresponde al sector central más inundable del primer Saladillo y se vincula a lagunas saladas, afectadas por la capa freática. El 40% de la unidad corresponde a la Serie El Jume y el resto a las Series El Saladillo y La Angelita en fases muy inundables y suelos menores alcalinos sódicos.
En general son pobre a muy pobremente drenados, muy inundables, fuertemente salino/ alcalinos desde la superficie y con la capa freática cerca de la superficie. La vegetación natural está constituida por haló-fitas exclusivamente (que soportan condiciones extremas de salinidad y drenaje impedido) como el jume colorado, salicornia y otras. Están muy restringidos en su uso por las graves limitaciones que presentan.
Este complejo se ubica en áreas relativamente planas, próximas a las sierras, de materiales fluviales con relictos loéssicos. Dominan los suelos de las series indicadas, con buena retención de humedad, razón por la cual la limitante de carácter climática, se ve en cierta medida atenuada. Por el contrario, el estrés hídrico se ob-serva con intensidad en los suelos menores arenosos sin desarrollo genético de paleocauces y lechos arenosos recientes.
Esta unidad se vincula a los típicos abanicos aluviales del pié de monte. A efectos de la cartografía se consideran como largas pendientes apoyadas en las primeras estribaciones serranas, de varios kilómetros de largo, y con un gradiente más acentuado en dirección al Oeste.
En las proximidades de las sierras, dominan los suelos más livianos (arenosos poco diferenciados con gravas y Serie Los Hoyos). En la parte media de las pendientes, dominan los suelos de texturas intermedias (Serie San Pedro) y en la parte distal, dominan los suelos de la Serie El Rodeo, de textura más pesada.
En general la unidad presenta susceptibilidad a la erosión hídrica, además de la limitación climática, que se acentúa en las proximidades de las sierras, por la baja retención de humedad de los suelos.
Esta unidad constituye un área cóncava muy extensa que se extiende de Norte a Sur, en el sector occidental de la depresión del Río Dulce, denominado en la región aprimer Saladillo”. El drenaje natural es muy pobre y la eliminación de la mayor parte del agua de aportes pluviales, es por evaporación y en menor proporción por escurrimiento muy lento en sentido Norte-Sur y hacia las lagunas que ocupan la parte central.
Por esta causa, se observa una gran acumulación de sales y en muchos casos superficialmente en forma de eflorescencias. La capa freática está alta (generalmente entre 30 y 60 cm) alimentando muchas lagunas en el área central más inundable.
El complejo esta integrado por la Serie El Saladillo 55%, que es un suelo fuertemente . salino/alcalino desde la superficie y La Angelita con salinidad y alcalinidad, pero algo mejor drenado que el anterior. Completan esta unidad en menor proporción suelos de la Serie El Jume (10%), fuertemente alcalino sódico y muy inundable y 10% de suelos sin desarrollo de horizontes genéticos (capas aluviales arcillosas) muy inundables, mal drenados y fuertemente salino alcalinos.
La vegetación natural está representada especialmente por halófitas de bajo porte como jume colorado, salicornia y otras adaptadas a las condiciones indicadas. El uso de estos suelos está muy limitado por la extrema alcalinidad, salinidad y drenaje impedido.
Ocupa dos ambientes ubicados al Este del paraje La Rinconada y al Norte de Pozo de la Olla, El relieve es plano cóncavo, observándose localmente algunas ondulaciones menores de paleoalbardones anastomo-sados menos inundables.
En su mayor parte se encuentra bajo agua en períodos lluviosos y/o con la capa freática alta afectando los horizontes superiores de los suelos. Esta unidad es apta para pastoreo extensivo sobre especies nativas.
Comprende la planicie de inundación actual del Río Dulce ubicada lateralmente a los albardones del río homónimo. Esta unidad sustenta una vegetación de esparto (hidrófilas) presentando inundaciones generales de larga duración por desbordes del Río Dulce.
Aquí se detienen las aguas provenientes de las unidades CoRD y CoRDL La alcalinidad sódica y salinidad constituyen limitaciones menos significativas por sucesivos “lavados” de las aguas del río. Este complejo solo es apto para pastoreo extensivo sobre especies nativas en períodos de estiaje del río.
Las unidades cartográficas identificadas con este símbolo son áreas de transición entre la planicie aluvial de La Rinconada y la de inundación actual del Río Dulce. En este sentido participa parcialmente de las características de ambas.
La Serie El Silencio ocupa los numerosos paleocauces (espartillares y aiba-les). La Serie La Rinconada se encuentra en sectores vinculados a la vegetación de jume y cardón, ocupando los “peladales” la Serie Pozo Verde. El resto del complejo está ocupado por los suelos salino sódicos muy inundables de la Serie La Angelita.
El uso de estas tierras está restringido con exclusividad a campos naturales de pastoreo extensivo debido a la alcalinidad, salinidad, degradación e inundaciones que son de menor duración y menos frecuentes que en la unidad cartográfica ESi2.
Son áreas netamente cóncavas, muy inundables, con suelos degradados superficialmente, con inclusiones de lagunas y bañados semipermanentes. El uso de estas tierras está restringido a campos de pastoreo muy extensivo. En relación a la unidad ESi2, son menos inundables, pero más afectadas por hidromorfismo que ESi3.
Constituye el área de transición entre el primer Saladillo (ESa) y la planicie aluvial de La Rinconada (LRi). Corresponde a una pendiente muy suave de 3 a 5 Km de largo, donde mejoran algo las condiciones de drenaje con respecto al bajo del Saladillo. Los anegamientos son pocos frecuentes, pero la capa se mantiene alta y en la mayoría de los perfiles estudiados se la encontró a 79 cm de profundidad. El factor drenaje mejora notablemente en la planicie aluvial de La Rinconada.
El complejo está integrado por suelos de la Serie La Angelita como dominante y con muy severas limitaciones en cuanto a salinidad y alcalinidad sódica superficial. En cuanto a la vegetación consiste en palo azul, salicornia, algunas gramíneas de poco desarrollo y chañares aislados de bajo porte. El resto de los suelos de este complejo, presentan las mismas limitaciones en grados diferentes, por lo .que prácticamente condicionan el uso de la unidad a campos naturales de pastoreo.
Con este símbolo se identifica a amplios derrames fluviales en el pié de monte, con relieve ondulado, surcados por paleocauces arenosos sin desarrollo de horizontes genéticos en los suelos. La Serie Los Hoyos (50%) se vincula a las partes altas y la Serie Los Sauces a los sectores más bajos con inclusiones de los paleocauces con suelos arenosos.
En estas unidades deben considerarse además de la limitación climática, la moderada a baja retención de humedad que aumenta la "sequía edáfíca", dificultando el laboreo, siembra, etc. Por otro lado presentan un regular nivel de nutrientes.
Este complejo constituye lomadas suavemente onduladas en el pié de monte, próximas a las sierras y se encuentra en los interfluvios limitados por paleocauces y planos fluviales. Los materiales originarios dominantes son de origen fluvial, sobre el cual se desarrollaron los suelos de las Series Los Hoyos y San Pedro (70%), presentando intercalaciones de relictos loéssicos, que constituyen el material madre de los suelos de la Serie Sebastián Elcano (30%).
Se relaciona con vías de escurrimiento moderadamente manifiestas que atraviesan de Oeste a Este el pié de monte. Los suelos que la integran (Serie Las Maci-tas, El Rodeo y Los Sauces), presentan un buen drenaje interno, con una buena estructura superficial y libres de sales y/o álcalis.
Estas vías son similares, aunque de menores dimensiones tanto en ancho como en profundidad, a las de la unidad EBñ (vías o líneas de escurrimiento bien manifiestas), y los suelos son de menor desarrollo en los horizontes subsuperficiales.
Presentan fundamentalmente limitaciones climáticas que restringen la elección de cultivos, aunque por su topografía, pueden tener una mejor provisión de humedad, con relación a las partes más altas del relieve.
Esta asociación corresponde a las vías de escurrimiento moderadamente manifiestas de los sectores más alejados de las sierras; los suelos se han desarrollado a partir de materiales exclusivamente de origen cólico y de redeposiciones más recientes. A diferencia de la unidad anterior (LMc) no se ha identificado a la Serie Los Sauces, la cual se ha desarrollado a partir de materiales fluviales y fluvio eólicos.
Esta unidad cartográfica se vincula a planos fluviales al pie de las sierras, en posiciones relativamente más bajas con respecto a los conos y abanicos aluviales típicos del pié de monte, que generalmente se intercalan. Las limitaciones para su uso agrícola son esencialmente climáticas.
Esta unidad cartográfica ocupa la mayor parte de la denominada planicie aluvial de La Rinconada. Se vincula a un relieve muy plano y relativamente más elevado con respecto a las demás unidades de la depresión.
Está surcada por numerosos paleocauces del antiguo derrame del Río Dulce, dispuestos aproximadamente en sentido Norte-Sur y vinculados a la Serie Los Aibales. Otra característica identificable, son los microalbardones ligeramente más elevados, vinculados a la Serie El Zapallar, micropla-nicies de inundación (Serie La Rinconada), asociado a sectores cóncavos de peladales ocupados por la Serie Pozo Verde.
Los suelos dominantes indicados que integran este complejo, presentan limitaciones de uso muy variables, es así que la Serie Los Aibales presenta problemas de inundaciones exclusivamente (cañadas); la Serie El Zapallar, con salinidad y alcalinidad subsuperficial y anegamientos poco frecuentes (albardones, vegetación de monte con halófitas); la Serie La Rinconada con alcalinidad ligera superficial y fuerte subsuperficial (planos inundables de jumiales con cardón); y finalmente los "peladales" ocupados por la Serie Pozo Verde, con anegamiento y fuerte salinidad y alcalinidad superficial.
Se puede considerar que un 70% de la unidad tiene limitaciones ligeras superficialmente, presentando una moderada aptitud como para sustentar pasturas naturales (no halófitas) y con posibilidades de implantación de pastos adaptados, observándose en las áreas con buenos accesos, sectores desmontados para estos fines.
Conviene indicar que el anegamiento y/o inundación es mayor siempre en los bordes orientales, por otro lado es selectivo, ya que los albardones o isletas de monte de la Serie El Zapallar constituyen las posiciones del relieve menos inundables. La capa freática, se la encontró durante la etapa de levantamiento entre 0,70 a 1,20 m. de profundidad.
Este complejo ocupa un pequeño sector al Oeste de Pozo de la Olla. Se vinculan a los paleocauces y áreas de derrame planas sin vegetación (suelos menores arenosos) o de jume blanco con cardón (Serie La Rinconada) y albardones con vegetación de monte y halófitas (Serie Pozo de la Olla). Generalmente presentan limitaciones en su uso, siendo la misma como campos naturales de pastoreo.
Con este símbolo se indica a las líneas de escurrimiento en el pié de monte, moderadamente manifiestas con los materiales originarios de significativa influencia fluvial. Es frecuente la presencia de arenas y gravi-llas, que en sequías prolongadas le confieren al suelo un moderado endurecimiento. No obstante, tienen una buena retención de humedad subsuperficial y reciben, además, aportes de las partes altas.
Este complejo identifica a interfluvios suavemente ondulados, muy próximos a las sierras. Presenta un patrón muy intrincado de distribución de los suelos. Existen limitaciones climáticas severas en el uso agrícola, agravándose en los sectores ocupados por la Serie Los Hoyos (20% de la unidad) derivada de la baja retención de humedad que presenta.
Esta unidad corresponde a la planicie aluvial de La Rinconada en el sector Norte. Constituye un extenso plano formado por derrames del Río Dulce (paleocauces y albardones). Los suelos se han desarrollado sobre materiales originarios franco limosos; presentan un drenaje imperfecto con la capa freática cerca del metro de profundidad.
En este complejo se destaca claramente la relación del monte y halófitas subordinadas con las Series Pozo de la Olla y El Zapallar que corresponde a los sectores más altos y menos susceptibles de sufrir inundaciones, contrastando nítidamente con las partes más bajas e inundables de jumiales y peladales, relacionadas con las Series La Rinconada y Pozo Verde respectivamente.
Prácticamente el 65% de los suelos que componen la unidad, presentan leves problemas de alcalinidad superficial, aumentando considerablemente en profundidad; un 15% (Serie Pozo Verde) corresponden a los "peladales" limitados seriamente por alto contenido sódico y el 20% restante corresponden a los suelos arenosos con moderada alcalinidad.
En general no suelen tener inundaciones, salvo en épocas de crecientes muy grandes, ya que la unidad constituye topográficamente los sectores ligeramente más altos de la gran depresión. Son usados como campos naturales de pastoreo, pero presentan aptitudes para la implantación de pasturas adaptadas.
Este complejo se vincula a dos sectores alargados en sentido Norte-Sur, relativamente más elevados, constituidos por típicos albardones y paleocauces dentro de la gran planicie aluvial de La Rinconada.
Están integrados por un 60% de suelos de las Series Pozo de la Olla y El Zapallar (con alcalinidad y salinidad subsuperficial), identificables por el monte y las halófitas. En la proximidad de los paleocauces se advierten sectores alargados y elevados, con suelos más arenosos y con ligeras limitaciones de alcalinidad y salinidad después de 50 cm de profundidad y corresponden a la Serie Los Albardones: el relieve es algo ondulado sin ningún peligro de sufrir anegamiento. Son utilizados principalmente como campos naturales de pastoreo, observándose pequeños sectores desmontados con implantación de pasturas perennes.
Esta unidad cartográfica está integrada en su totalidad por la Serie Sebastián Elcano. Se relaciona a lomadas muy suavemente onduladas en el sector NE de la pla-§ nicie fiuvio eólica y bastante alejadas de las sierras del Oeste.
Los suelos de esta Serie se han desarrollado a partir de materiales loéssicos de textura franco limosa a limosa, sin evidencias de mezcla con materiales fluviales; presentan un buen drenaje interno y poco desarrollo de sus horizontes genéticos. El uso agrícola de estas tierras se ve limitado por el clima, siendo aptos para pasturas implantadas y cultivos adaptados.
Constituyen lomadas muy suavemente onduladas, al Este de la planicie, con intercalaciones de pequeños cauces y derrames finos (loess redepositados), que no tienen relevancia desde el punto de vista utilitario dentro de la unidad.
Ocupan amplios sectores en el borde oriental del área y bastante alejados de la fuente de origen de los sedimentos fluviales. También se ubican en sectores relativamente cercanos a las sierras, pero en posiciones más elevadas como para no ser considerablemente afectados por las corrientes fluviales posteriores a la deposición del loess.
Está integrado por un 80% de suelos de la Serie Sebastián Elcano y el 20% restante por suelos de las Series Las Arrias, que se caracteriza por un desarrollo incipiente íntimamente mezclada con la Serie Sebastián Elcano y por suelos de la Serie Las Macitas, que ocupa las microconcavidades de forma alargada con sentido Este-Oeste (vías de flujo de paleocorrientes) de pocos metros de ancho.
Este complejo corresponde fisiográfi-camente a áreas planas o muy suavemente onduladas con derrames fluviales en microcauces. Están ubicadas a cierta distancia de las sierras y formaciones de pié de monte.
Son sectores en los que al disminuir la pendiente regional, la mayoría de los paleocauces que recorrían la llanura del Oeste hacia el Este, derramaron sus sedimentos sobre la planicie eólica, separándose en infinidad de microcauces de pocos metros de ancho.
Están íntimamente relacionados los suelos de origen típicamente eólicos (Serie Sebastián Elcano) y los fluviales que incluyen redeposiciones loéssicas vinculados a los microcauces, siendo los suelos más representativos los de la Serie Las Macitas.
Generalmente, los pequeños cauces se encuentran en un nivel relativamente más bajo, donde hay mayor acumulación de las aguas de precipitaciones, con buena conservación de humedad por la presencia de horizontes subsuperficiales algo arcillosos.
Esta unidad corresponde a áreas relativamente deprimidas, próximas a la cuenca cerrada de la Laguna Mar Chiquita, sobre el borde oriental del área de estudio. El 80% de los suelos están afectados por salinidad y/o alcalinidad subsuperficial a partir de 50 cm de profundidad y el 20% restante, que ocupan los sectores más deprimidos, a partir de 20 cm, debajo de la capa arable.
Constituyen áreas de derrame muy planas, al SE de la planicie fluvio eólica, con elevada proporción de suelos desarrollados sobre materiales fluviales y loéssicos redepositados y una mínima proporción sobre materiales arenosos gruesos, que corresponden a derrames ligeramente deprimidos (Serie El Rodeo). Sólo el 35% está representado por la Serie Sebastián Elcano, cuyos suelos se han desarrollado sobre materiales exclusivamente eólicos (loess).
Esta asociación se vincula a lomas planas, al Este de la planicie eólica, con dominio de suelos pertenecientes a la Serie Sebastián Elcano y su fase moderadamente alcalina en profundidad y la Serie Las Arrias con influencia fluvial (loess redepositado). No se observan microcauces recientes.
Comprenden lomas onduladas, con pendientes que oscilan entre el 0,5 al 3% ubicadas en el sector SO del área, próximas a la localidad de San José de la Dormida. Su uso está limitado fundamentalmente por el peligro de erosión y alcalinidad sódica en profundidad.
Esta asociación identifica a lomas suavemente onduladas, en el área próxima al pié de monte. Está representada por suelos de la Serie Sebastián Elcano, presentando, además, sectores con un significativo aporte de materiales fluviales gruesos (gravillas y arenas medias y gruesas) a partir del cual se desarrollaron los suelos de las Series Los Hoyos y San Pedro. En general, son suelos bien a algo excesivamente drenados con buena estructura superficial y moderado contenido de materia orgánica.
Esta unidad comprende la parte superior de la pendiente hacia la depresión del Río Dulce (pendiente al Saladillo). Constituyen pendientes suaves, pero muy largas dominando en la parte superior de la misma, la Serie Sebastián Elcano y en la parte inferior u oriental la Serie Las Arrias.
Esta surcada por algunas líneas de escurrimiento temporario como consecuencia de la llegada a la pendiente de los derrames con sus micropaleocauces que al encontrar gradiente suficiente se unen nuevamente conformando estas líneas de avenamiento temporario mas manifiestas con pendientes mixtas en sus bordes. El suelo de estos cauces corresponde a la descripción de la Serie Las Macitas en posición ligeramente inclinada y moderadamente salina en profundidad.
Esta unidad constituye el borde oriental del área de trabajo, limitando con la transición al primer Saladillo de condiciones edáficas más severas (véase Fig. N°3, depresión del Río Dulce). Las limitaciones son: peligro de erosión, moderada retención de humedad (Serie Las Arrias) y la alcalinidad en profundidad indicada.
Amplio sector ubicado en el área central de la meseta homónima. Se caracteriza por poseer un relieve relativamente plano en relación con las montañas adyacentes, con pendientes del orden del 1 al 8%. Los suelos están desarrollados sobre loess, con espesores que oscilan entre una a varias decenas de metros, apoyados sobre granitos o tosca (horizontes petrocálcicos).
En los sectores mas planos (1 a 3% de gradiente) domina la Serie San Francisco del Chañar II, que es un suelo profundo, bien drenado, con aptitud natural para la implantación de pasturas.
En áreas mas onduladas, y medias lomas, se encuentran las Series San Francisco del Chañar I y III, la primera limitada por alcalinidad moderada desde la superficie y la segunda además por la profundidad efectiva.
Como inclusiones, que no superan el 15% del total de la unidad, se observan: suelos profundos, bien a moderadamente bien drenados con aptitud agrícola (desagües suavemente cóncavos), fases de suelos erosionadas por agua y otros muy someros con espesores menores a 20 cm, apoyados sobre rocas parcialmente meteorizadas. En general, esta unidad cartográfica tiene una aptitud natural destinada a la implantación de pasturas adaptadas.
Estos ambientes comprenden los bordes más ondulados y quebrados de la meseta de San Francisco del Chañar, considerados como una transición entre la unidad SFC1 y las áreas serranas adyacentes.
La Serie San Francisco del Chañar I ocupa los sectores relativamente mas planos con aptitud natural para la implantación de pasturas. En los relieves quebrados o colmados se encuentran las Series San Francisco del Chañar III, Santa cruz y afloramientos de roca y tosca que dominan el complejo, con una aptitud para pastoreo sobre especies nativas o eventualmente intersiembras. Los suelos de esta unidad se encuentran mayoritariamente cubiertos con la vegetación del bosque serrano con palma.
Este complejo se vincula geomorfológicamente a conos aluviales, constituidos por sedimentos fluviales al pié de formaciones orográficas, con gravas y arenas gruesas en las proximidades a la fuente de origen, disminuyendo en su gradiente y en el tamaño de los granos, con texturas más finas en la parte distal de los mismos.
En general las pendientes son muy notables, en casos pueden llegar al 8% y están surcadas por cárcavas y pequeños lechos arenosos. Los suelos se distribuyen de acuerdo a su posición en el paisaje, siendo arenosos poco diferenciados los sectores más altos y con mayores gradientes, descendiendo en forma sucesiva desde la pendiente alta las Series Los Hoyos, San Pedro y Los Sauces. Están muy limitados en su uso por la erosión existente y la susceptibilidad a la misma, producto de las fuertes pendientes.
En este capítulo se hace una interpretación utilitaria (clasificación de la tierra por su capacidad de uso para fines agrícolas) de las unidades delimitadas en los mapas de suelos y se mencionan las prácticas recomendadas para el manejo adecuado y la conservación del suelo, la planta y el agua.
Se ha adoptado el sistema de clasificación utilizado por el Servicio de Conservación de Suelos de los Estados Unidos, adaptado para los suelos de esta área en particular. Este sistema comprende tres grandes categorías: Clase, Subclase y Unidad de Capacidad de Uso. Dado que en el reconocimiento básico de los suelos de la provincia de Córdoba se han utilizado las escalas de semidetalle y reconocimiento, la clasificación adoptada agrupa los suelos sólo al nivel de clase y subclase.
El sistema de clasificación distingue ocho clases (señaladas con números romanos del I al VIII) que indican un aumento progresivo de las limitaciones que presentan los suelos para el desarrollo de la producción. Las cuatro primeras clases incluyen los suelos aptos para agricultura. La clase I no presenta prácticamente limitantes para su uso, requiriendo poco tratamiento de manejo o conservación especial. En las clases II, III y IV las limitantes aumentan progresivamente y en consecuencia grados crecientes de cuidado y protección. Las clases V a VII por lo general no son aptas para agricultura y precisan cuidados progresivamente más intensos aun cuando se destinen para pastura o forestación. Finalmente, la clase VIII no tiene aplicación agrícola ni ganadera; solo sirve para la recreación, para preservación del ambiente y la biodiversidad, aprovisionamiento de agua o fines estéticos.
En la cartografía se han encontrado las clases de capacidad de uso IV, VI, VII y VIII
Las subclases informan sobre los tipos principales de limitaciones que afectan a las clases. Excepto la clase I, el resto admite una o dos de las cuatro subclases y se designan agregando las letras minúsculas “e”, “w”, “s” o “c” a continuación del número de clase. Por ejemplo: “IIIe”; “IVws”.
La subclase “e” – erosión – está integrada por suelos erosionados y/o con la susceptibilidad a la erosión como limitante para su uso.
La subclase “w” – exceso de agua – incluye suelos que presentan drenaje pobre, humedad excesiva, capa freática alta y/o peligro de anegamiento.
La subclase “s” – limitaciones del suelo dentro de la zona radical – incluye suelos que presentan escasa profundidad, baja capacidad de retención de humedad, salinidad o alcalinidad y/o bajo nivel de fertilidad.
La subclase “c” – limitación climática – está compuesta por suelos en los cuales el clima es la mayor limitante.
En la cartografía se hallaron las cuatro subclases y fundamentalmente la limitación "c" (climática), que podría considerarse como "permanente" en las unidades consideradas de la planicie íluvio-eólica, sierra norte y meseta de San Francisco del Chañar. De igual manera, las limitaciones "w" y "s" (exceso de agua y limitaciones del suelo dentro de la zona radical), son "permanentes" en diverso grado en las unidades de la depresión, ya sea por problemas de escurrimiento superficial, anegamiento o por presentar los suelos un drenaje interno impedido (horizontes cementados, capa de agua alta, etc.) o problemas de degradación, salinidad y/o alcalinidad sódica.
En cuanto a la limitación climática "permanente”, éstas son moderadas y en algunos casos graves, según los años y épocas de cada año, teniendo fundamental importancia las altas temperaturas (Capítulo 2).
No se encontraron en el área suelos pertenecientes a las Clases I, II, III y V de capacidad de uso.
CLASE IV: Suelos con limitaciones severas y que cuando están cultivados requieren prácticas de manejo y conservación difíciles y complejas. Generalmente, son adecuados para una estrecha gama de cultivos. No obstante pueden ser utilizados para pasturas y otros usos de la tierra.
Subclase IVc: Suelos con moderada a severa limitación climática. Comprende:
Subclase IVsc: Suelos moderadamente afectados por alcalinidad sódica y/o salinidad en profundidad, baja retención de humedad y por moderada a severa limitación climática. Comprende:
Subclase IVec: Suelos con moderada susceptibilidad a la erosión hídrica y moderada a severa limitación climática que restringen el laboreo del suelo y elección de cultivos. Lo integran:
CLASE VI: Suelos con graves limitaciones para el uso, resultando no aptos para cultivos. Son apropiados como campos naturales de pastoreo, pasturas cultivadas, bosque y fauna.
Subclase VIes: Suelos con moderada erosión actual y grave susceptibilidad y suelos de baja retención de humedad. Comprende:
Subclase VIsc: Suelos afectados por moderada a grave limitación climática, baja retención de humedad y baja estabilidad estructural que restringen el laboreo. Comprende:
Subclase VIws: Suelos con exceso de humedad por la. acumulación de aguas de escorrentía provenientes de áreas ■circunvecinas más elevadas o con drenaje interno muy pobre e impedido que, ■ con frecuencia, producen anegamiento. Están asociados a otros suelos frecuentemente alcalinos y/o salinos. Lo integran:
CLASE VII: Suelos con muy graves limitaciones para el uso, resultando también no aptos para cultivos. Las condiciones físicas y químicas de los suelos de esta clase son tales que generalmente no se justifica aplicar ningún tipo de mejoras, quedando reducido su uso casi exclusivamente como campos naturales de pastoreo o para bosques y refugio de la fauna.
Subclase VIIws: Suelos con considerable exceso de humedad, debido a la acumulación de las aguas de escorren-tía proveniente de áreas circunvecinas más elevadas, con anegamiento o capa de agua que permanece cerca o sobre la superficie la mayor parte del tiempo.
También esta subclase incluye suelos fuertemente afectados por alcalinidad y/o salinidad. Comprende:
Subclase VIIes: Suelos con graves limitaciones, motivadas por pendientes escarpadas o colmadas de sectores serranos con suelos esqueléticos, someros, apoyados sobre rocas parcialmente meteorizadas, incluyéndose además laderas con suelos profundos pero con pendientes pronunciadas. Comprende:
CLASE VIII: Los suelos de esta clase no tienen aplicación agrícola ni ganadera. Debido a la gravedad de sus limitaciones sólo sirven para recreación, conservación de la fauna silvestre, etc. En el área está comprendido en esta clase:
Es un axioma en edafología que a cada "clase de tierra" le corresponde un manejo y uso particular diferente. Dicho uso y técnicas de manejo estarán suficientemente probadas como para tender a:
1) Mantener los niveles de erosión dentro de límites permisibles.
2) Asegurar el mantenimiento y acrecentamiento de la productividad de las tierras a mediano y largo plazo.
3) Ser económicamente factibles de aplicar. .
4) Asegurar suficientes alternativas de producción de acuerdo a las posibilidades, características y modalidades del productor.
Significa esto que las recomendaciones son dinámicas y no estáticas, su cambio o modificación dependen del avance de los conocimientos técnicos en la materia, la coyuntura económica, etc.
Como la adopción de una tecnología superior con respecto a otra tradicional depende de la decisión del productor, ella debe ser acorde a la rentabilidad probable de la misma. Por ello se prefiere incluir prácticas que aseguren un alto nivel de manejo del predio, pero cuya realización pueda concretarse con la información, infraestructura y recursos comúnmente disponibles en la región.
Del mismo modo, se citan, definen y explican las prácticas recomendadas pero sin llegar a un grado completo de detalle, que se considera inconveniente para la naturaleza- del trabajo, que tiende solo a proponer una planificación generalizada para cada unidad cartográfica.
Clase IV:
Breves consideraciones acerca de prácticas de labranza ampliamente difundidas en la región:
Siendo los suelos con capacidad de uso IV los mas difundidos en el área de estudio y sobre los que se cimentó el desarrollo agropecuario del Centro Norte de Córdoba, es preciso mencionar algunos aspectos que hacen a la preservación y mantenimiento de la fertilidad y estructura de los suelos, como base para una producción sustentable.
Desmonte apropiado: Esta práctica de uso generalizado que permitió la incorporación de nuevas tierras, tuvo en los últimos 20 años un ritmo cercano a las 20.000 has desmontadas anualmente. Se debe evitar el desmonte indiscriminado; es decir, dejando un determinado porcentaje de monte natural de acuerdo a la reglamentación vigente (Ley Provincial 8066/91), que es fundamental como protector y sombra de animales. Tiene importancia también el tamaño y forma de las áreas sin desmontar, siendo lo común dejar núcleos y corredores biológicos. En ambos casos, los relictos de monte cumplen su cometido, siendo fundamental el tamaño y distribución adecuada de los mismos. Para continuar con la limpieza de los terrenos, se debe ser cuidadoso con las herramientas a usar.
Evitar el uso de arados destroncadores.
Usar mayormente las rastras de tiro excéntrico (tipo Rome).
Recordar que el uso del fuego está prohibido. Asesórese.
Generalizar el uso de cinceles o herramientas de labranza vertical, aún en lotes con siembra directa.
Finalizadas las tareas de limpieza y habiendo incorporado los suelos a la rotación mencionada, deberían respetarse:
Reemplazar el arado destroncador por otras herramientas.
Usar racionalmente los rastrojos con el pastoreo.
Evitar el sobrepastoreo de las forrajeras.
Remover periódicamente los lotes ganaderos intersembrando leguminosas.
Cuando la siembra directa forme parte de las prácticas habituales, se deberá ser mas cuidadoso con el uso de los rastrojos de cosecha para evitar pisoteos y compactaciones excesivas.
En tal caso, los beneficios para los suelos serán los siguientes:
Disminuye la compactación superficial y subsuperficial.
Mejora la porosidad y movilidad del agua en el suelo.
Aumenta la retención de la humedad con beneficio para los cultivos.
Reduce al mínimo los riesgos de erosión.
Facilita los trabajos aprovechando mas el tiempo y las condiciones de humedad edáfica, reduciendo costos operativos.
Una mención especial es el adecuado y oportuno control de malezas, tanto en cultivos de cosecha como en pasturas perennes, lo que requiere el conocimiento del consumo de humedad, fertilidad y competencia.
Siendo la siembra directa una práctica agronómica relativamente reciente en la región, que ha demostrado beneficios, especialmente en el uso más racional y eficiente del agua, en el mantenimiento del nivel de materia orgánica de los suelos, en el mejoramiento de la estabilidad estructural de los mismos y en el incremento de la seguridad de cosecha; ha sido adoptada en más del 70% de los suelos bajo uso agrícola de esta clase, correspondiente a la planicie central Norte de la provincia de Córdoba. No obstante, el uso prolongado de esta técnica, puede presentar efectos no deseados, vinculados especialmente a la fertilidad física y química de los suelos, tales como densificaciones superficiales, disminución en la disponibilidad de algunos nutrientes, y acidificación superficial, lo que será necesario considerar a los fines de su corrección.
Subclases IVc y IVsc
Por ser el clima la limitación fundamental, se remarca la importancia de las prácticas que minimicen el riesgo de sequía. Así se menciona la utilidad de los barbechos, en especial bajo cubierta de rastrojos, el control apropiado de malezas y el resto de prácticas agronómicas propias de cada cultivo (rotaciones, elección adecuada de cultivares, densidades de siembra, época de siembra, control de plagas, etc.).
En el caso de lotes dedicados a la producción pecuaria, la reserva de forraje en cualquiera de sus formas (heno, silo; diferidos rastrojos en píe y concentrados) es obligatoria.
Rotación de cultivos: Se entiende por rotación, un sistema planificado y recurrente de cultivos, en el cuál se alternan especies leguminosas y gramíneas, en ciclos continuados de duración (edificación de fertilidad), con ciclos anuales de cultivos agrícolas (consumo de fertilidad).
La rotación es la clave del mantenimiento de la "fertilidad física" y de la "fertilidad química" del suelo; particularmente en el primer aspecto, no existe otra técnica que a nivel de manejo extensivo o semi-intensivo tienda a mantener un grado aceptable de estabilidad estructural de los suelos. Y la relación entre dicha estabilidad y el movimiento del agua y del aire, los encostramientos superficiales, erosión, etc., son demasiado conocidas.
Especies a integrar una rotación:
a) Leguminosas: trébol de olor blanco (Me-lilotus albus) y alfalfa (Medicago sativa).
b) Gramíneas anuales de invierno: Triticale (Triticosecale Sp.), centeno (Secale cércale) y avena (Avena sativa) y en menor proporción trigo y cebada.
c) Gramíneas anuales de verano: sorgos forrajeros y doble propósito (Sorghum Sp.), moha de Hungría (Setaria itálica) y maíz para pastoreo o reserva de forraje eventualmente.
d) Gramíneas perennes: grama rhodes (Chloris gay ana), . pasto llorón (Era-grostis cúrvula), sorgo negro o garaví (Sorghum almun)., gatton panic (Pañi-cum maximun), Panicum coloratum, Digitaria erianta y buffel grass (Cenchrus ciliaris).
e) Cultivos de cosecha: Maíz (Zea mays), sorgo granífero y soja, en menor medida, poroto negro y zapallos.
Programación de la rotación: De acuerdo con la información disponible actualmente, ella podría esquematizarse así:
Cinco o seis años de pasturas en base a las especies indicadas en el punto d) y un máximo de tres a cuatro años de ciclo agrícola. Dentro del ciclo agrícola debe prestarse mayor atención a la elección de especies tolerantes al estrés hídrico, teniendo presente la sucesión de leguminosas con cereales. En este sentido, el sorgo es el más utilizado (pastoreo directo, diferido, ensilado y/o cosecha) y como cultivos de invierno, el triticale y la avena se encuentran muy difundidos.
Un cultivo tradicional en la zona es el maíz, a pesar de tratarse de una zona marginal, con variaciones muy grandes en los rendimientos cada año. Generalmente este cultivo y otros anuales se realizan en las cañadas y bajos o donde las condiciones de humedad son más favorables. La siembra directa favorece al cultivo atenuando los efectos de estacionales sequías.
En el caso de campos recién desmontados, una recomendación altamente rentable después del desmonte es la implantación simultánea de pasturas (gatton, grama o buffel) con roturación eventual e intersiembra de melilotus, manteniendo este esquema ganadero hasta que se pueda profundizar en la limpieza e intensificación del uso del suelo y entrar en otro esquema mixto. (Se tiene referencia de manejo de 800 kg. de carga animal con producción de 350-400 kg. de carne/ ha ganadera).
Otra alternativa para después del desmonte, puede ser el uso de dos a más años de forrajeras anuales, hasta conseguir una buena limpieza del lote y luego implantar pasturas perennes o cultivos de cosecha.
Para las tierras calificadas con limitaciones "s", debidas a suelos con mayor contenido de arenas, se recomienda dentro de las pasturas perennes el pasto llorón, Digitada, Panicum coloratum y buffel grass. ■ Fundamentalmente comprende algunos sectores aledaños a las sierras (pié de monte).
Cuando la limitación "s", es debida a salinidad y/o alcalinidad en profundidad, la sugerencia o recomendación más difundida y probada es la siembra de especies tolerantes. Se menciona clásicamente a grama rhodes; gatton panic y tréboles de olor, entre las pasturas a introducir en la rotación. Entre los cultivos agrícolas, el sorgo granífero supera en comportamiento al maíz, aunque la reciente introducción de la soja, cultivada en rotación y con siembra directa, aumenta las posibilidades de cosecha.
Estas rotaciones, y de acuerdo a las experiencias del área, deben comprender, considerando el total del predio (desmontado), un 40% a cultivos anuales y el 60% restante a pasturas perennes y naturales, con tendencia a acrecentar el área agrícola. En este aspecto, trabajos recientes del INTA Jesús María y Villa María de Río Seco indican que a pesar del avance agrícola de los últimos años, se mantiene en la zona de estudio la proporción mencionada. También es una práctica frecuente la cosecha de semillas de forrajeras de la región.
Subclase IVec
La limitación por erosión "e" corresponde en todos los casos a la fase hídrica del fenómeno; esto es, aquella producida por el escurrimiento acelerado en tierras con pendientes. En estos suelos, de pretender aprovechar su potencial agrícola, deben extremarse las medidas de prevención y lucha contra la erosión hídrica. Los trabajos se encararán en forma integral, es decir, bajo el concepto de "cuenca hidrológica". El escurrimiento debe reducirse a su mínima expresión mediante:
a) Prácticas ingenieriles: cultivo en contorno clásico, cultivo en contorno pa-ralelizado, terraceo convencional, te-rraceo paralelizado, desagües empastados, inactivación de cárcavas y su rellenamiento, estructuras reguladoras * del escurrimiento, etc.
b) Prácticas agronómicas: barbechos bajo colchón de residuos, siembra de pasturas, rotación de cultivos "en franjas" y siembra directa, manejo del pastoreo y demás prácticas conservacionistas.
c) Prácticas de forestación: en la cuenca alta, donde se originan los escurrí-mientes. El uso de macizos forestales y el manejo apropiado de pasturas, suelen ser técnicas suficientemente eficaces y sencillas.
d) Cuidar y preservar la vegetación natural de las partes mas comprometidas por pendientes, evitando la tala de los remanentes de monte.
e) Manejar los canales de desagüe manteniéndolos empastados, evitando los laboreos y la siembra. De resultar posible, podrían forestarse.
En aquellas áreas en las que la aptitud del suelo o las limitaciones sean severas (erosión), y que solo permitan el uso racional con ganadería, el desmonte selectivo o desarbustado e implantación simultánea de pasturas* es una práctica en uso altamente recomendable.
Subclase VIse y VIes
Por tratarse de áreas erosionadas o con susceptibilidad a la erosión por pendientes onduladas o pronunciadas, se dedican estas tierras al uso pastoril.
Como los suelos integrantes, tienen en general moderada a baja capacidad de retención de agua, tanto los de textura limosa con débil desarrollo, como aquellos de textura franco arenosa y/o escasa profundidad efectiva, se recomienda la implantación de Panicum coloratum y Digitaria y en suelos muy livianos, pasto llorón. Entre las pasturas anuales se sugieren la moha, sorgo y eventualmente melilotus o verdeos.
Para mejorar el control de la erosión hídrica en estos suelos, es conveniente considerar el uso de estas técnicas:
a) Forestación de la parte alta de la cuenca.
b) Instalación de retardadores rústicos en las cárcavas.
c) Rellenado de cárcavas pequeñas.
d) Empastado de canales de desagüe.
e) Defensas de cabecera de cárcava.
f) Siembra directa.
Subclase Viles
Para aquellos suelos de clase Viles, con pendientes pronunciadas, además de suelos someros, esqueléticos y rocosos (áreas de sierras o preserranas donde sólo es recomendable su uso como campos naturales de pastoreo), se incluyen las siguientes recomendaciones:
Manejo racional de la pastura.
Descansos oportunos y en sistema de pastoreo diferido.
Siembra de pasturas perennes (pasto llorón) en forma manual (hombre a caballo) para que por semillazón, tienda a naturalizarse.
Proteger y favorecer la vegetación natural arbórea.
Siendo la parte más alta de los campos donde se produce el inicio de las correntadas, mantener con abundante cobertura para evitar las escorrentías violentas.
Reforestación de campos en forma ordenada y planificada (incluye suelos de clase VIes), con las finalidades de:
Dar reparo a la hacienda en lotes degradados a nivel de suelo y/o de vegetación.
Reducir picos de corrientes hídricas tanto en sectores comprometidos por pendientes como en partes de pendientes regionales mas suaves.
Formar isletas o bosquecillos en lugares protegidos de fuegos y depredadores.
Subclases VIws y VIIws
Estas tierras carentes de aptitud agrícola, deben dedicarse al uso pastoril. Las denominadas VIws, son susceptibles de mejoramiento a través de pasturas adaptadas a las condiciones de salinidad, alcalinidad y drenaje pobre predominantes. Las especies más recomendadas son: grama rhodes; melilotus, sorgo negro, agropiro y otras.
Para las unidades VIws, que son complejos de suelos compuestos por sectores de clase VIws y VIIw subordinada, se deberán escoger cuidadosamente los sectores a desmontar, siendo los mas adecuados las isletas de monte con halófitas escasas, incluyendo las cañadas de aibe.
Se deja constancia que si bien edáfi-camente pueden justificarse inversiones en materia de desmonte e incorporación de pasturas, la principal limitante es la inexistencia de agua de calidad en el subsuelo. Existen actualmente graves dificultades para la provisión de agua para consumo humano y animal (área de La Rinconada y proximidades).
Para la clase VIIws, con dominio de suelos imperfectamente drenados, puede intentarse la introducción de dichas especies en la pradera natural (intersiembras). Sin embargo, la solución más habitualmente recomendable, es el mejoramiento de los pastizales naturales por un manejo adecuado del pastoreo, combinando cargas altas en períodos breves de aprovechamiento, con descanso prolongado. Por supuesto, para ambos casos, son de uso obligatorio aquellas técnicas de manejo del animal que aseguren una adecuada conservación de la pastura.
Se citan, a tal fin, el apotreramiento adecuado (alambrados fijos, suspendidos, pastoreo rotativo mediante electrificadores de alambrados) tratando de seguir en lo posible los límites de unidades de suelos indicados en los mapas y dentro de éstos las áreas más adecuadas. Para el caso de implantación de pasturas en los sectores aptos, la labranza debe hacerse evitando el uso de arados, recomendándose a tal fin rastras de tipo excéntrico (tipo rome o similares), y a profundidades no mayores de 12 cm, sin inversión de suelos, apropiada repartición de aguadas, provisión de bosquecillos y protección arbórea para la hacienda, etc.
Este inventario se basa en la clasificación de la capacidad de uso descripta en el capítulo 4.1 y se expresan en el cuadro N°7.
En este cuadro se indica el total de hectáreas correspondientes a cada clase de capacidad de uso (de I a VIII inclusive) y el porcentaje que representa con respecto a la superficie total de las tierras que contiene.
De esta manera se expone un resumen cuantitativo del recurso suelo, en términos de clases de capacidad de uso, información particularmente útil para su uso tanto a nivel estatal como por particulares.
La Serie Albardones es un suelo algo excesivamente drenado con moderado contenido de sales y álcalis en profundidad (después de 50 cmj. Está desarrollado incipientemente sobre capas aluviales muy próximas a los antiguos cauces del Río Dulce.
Se puede identificar a esta Serie, además, por la vegetación natural, con dominio de monte bien desarrollado (mistol,brea, quebracho, etc.) con algunas halófitas (jume blanco, en especial aislado). Se la encuentra en los sectores más elevados dentro de la denominada "planicie aluvial de La Rinconada".
Los primeros 18 cm son de un color pardo grisáceo muy oscuro a pardo oscuro de textura franco arenosa fina con estructura en bloques débiles. Le sigue un horizonte de transición hasta 47 cm con condiciones naturales similares y estructura con tendencia masiva. Estos dos horizontes están prácticamente exentos de salinidad y alcalinidad.
Luego se pasa bruscamente a otra capa fluvial que se extiende hasta 80 cm, tiene estructura en bloques subangulares moderados a débiles, textura franco arenosa fina, moderadamente alcalina y no salina*
A mayor profundidad y hasta los 1,5 m, hay otra capa con estructura masiva, franco arenosa fina, moderadamente salina y alcalina que se extiende hasta los 2 m. No se ha observado la capa freática ni evidencias de ella hasta la profundidad estudiada*
Los suelos de esta Serie están limitados por baja retención de humedad en los horizontes superficiales* La alcalinidad y salinidad son moderadas por debajo de 50 cm* Ocupa sectores pequeños dentro de los albardones con relieves ondulados y suavemente ondulados formando complejos con la Serie Pozo de la Olla, El Za-pallar y suelos menores arenosos de los propios cauces.
No está mapeada por separado en ninguna unidad y puede aparecer como suelos menores en las unidades relativamente más altas dentro de la planicie aluvial de La Rinconada, siempre muy próxima a los paleocauces (PzO 1).
Descripción del perfil típico:
A continuación, se da la descripción de un perfil representativo de la Serie, obtenido a unos 10 Km. al SSO de Pozo de la Olla, departamento Río Seco, provincia de Córdoba.
0-18 cm; color en húmedo (10YR3/2,5) pardo grisáceo muy oscuro a pardo oscuro; franco arenoso a franco; estructura en bloques subangulares medios débiles; friable en húmedo; raíces abundantes; límite inferior claro, suave.
18 - 47 cm; color en húmedo (10YR3/3,5) pardo oscuro a pardo amarillento oscuro; franco arenoso a franco; estructura en bloques débiles tendencia masiva; raíces escasas; límite inferior abrupto, suave.
47 - 80 cm; color en húmedo (10YR3,5/4) pardo amarillento oscuro; franco arenoso a franco; estructura en bloques subangulares moderados a débiles; vestigios de barnices húmico arcillosos; raíces escasas; límite inferior abrupto, suave.
80 cm a +; color en húmedo (10YR3,5/4) pardo amarillento oscuro; franco arenoso; masivo; vestigios de raíces; pseudomicelios salinos escasos.
En los perfiles correspondientes a esta Serie se han observado variaciones con respecto a los espesores de las capas superiores (Ai - AC) entre 30 a 70 cm; por consiguiente, varían también las profundidades de la alcalinidad y salinidad de la capa II.
La Serie Albardones se clasifica como un Haplustol fluvéntico (suelo aluvial con alcalinidad moderada en profundidad). Los datos analíticos del perfil se encuentran en el Cuadro N°8.
La Serie El Bañado es un suelo moderado a fuertemente desarrollado sobre materiales eólícos con influencia fluvial de textura franco limosa fina propia de las líneas de escurrimiento bien manifiestas.
Tiene un horizonte Ai de 20 cm, color pardo grisáceo muy oscuro, franco limoso, estructura en bloques subangulares medios moderados. Le sigue el horizonte B2 textural más pesado (franco arcillo limoso) color pardo grisáceo muy oscuro a pardo oscuro hasta 80 cm de profundidad. No presenta salinidad o alcalinidad sódica en ningún horizonte y su drenaje es moderadamente bueno.
Prácticamente no presenta limitaciones edáficas. Es considerado como uno de los de mejor aptitud en condiciones de secano merced a las óptimas condiciones del horizonte superficial y la muy buena recepción de humedad por su condición ligeramente deprimida; además, la retención de humedad subsuperficial es muy buena.
Las líneas de escurrimiento donde se encuentra esta Serie están desmontadas en su mayoría, no obstante, una menor proporción sustenta una vegetación natural de monte. La Serie El Bañado no aparece mapeada sola por motivos de escala, sino formando asociaciones con las Series El Rodeo y Los Sauces. Puede estar también como suelos menores o inclusiones en otras líneas de escurrimiento de menor dimensión.
Descripción del perfil típico:
A continuación se da la descripción de un perfil representativo de la Serie obtenida a 10 Km. al SO de la localidad de las Arrias, departamento Tulumba, provincia de Córdoba.
0-20 cm; color en húmedo (10YR3/2) pardo grisáceo muy oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios moderados; friable en húmedo; ligeramente plástico; no adhesivo; pH 6,5; raíces muy abundantes; límite inferior claro, suave.
20 - 34 cm; color en húmedo (10YR3/2,5) pardo grisáceo muy oscuro a pardo oscuro, franco arcillo limoso; estructura en prismas irregulares finos, rompe a prismas, friable en húmedo; plástico; adhesivo; pH 6,9; barnices húmico arcillosos muy abundantes a abundantes medios;
34 - 80 cm; color en húmedo (10YR3/3) pardo oscuro; franco limoso; estructura en prismas regulares medios moderados, rompe a prismas; ligeramente firme en húmedo; plástico; adhesivo; pH 6,8; barnices arcillosos húmicos abundantes a muy abundantes medios finos; raíces escasas; límite inferior gradual.
80 - 120 cm; color en húmedo (10YR4/4) pardo a pardo oscuro; franco limoso; estructura en prismas irregulares medios moderados rompe a prismas y bloques; plástico; ligeramente adhesivo; pH 7; barnices arcillosos abundantes a escasos finos; raíces escasas; límite inferior gradual.
120 cm a +: color en húmedo (7,5YR4/4) pardo a pardo oscuro; masivo; ligeramente plástico; no adhesivo; pH 7; concreciones de COaCa escasas y finas; vestigios de raíces.
En los perfiles correspondientes a esta Serie se han observado cementaciones parcíales por debajo del metro o una influencia fluvial más evidente por la presencia de arena gruesa pero siempre en menor proporción que la fina.
En el Cuadro N°9, se dan los datos analíticos que corresponden al perfil típico de la Serie. La Serie El Bañado se clasifica como un Argiustol típico y la apti-. tud para el uso de las unidades que integra se consignan en el capítulo 4.
La Serie El Guanaco es un suelo desarrollado sobre materiales franco limosos de origen eólico redepositado, es ligeramente alcalino o neutro en superficie y sin salinidad. Su drenaje natural es moderado con alcalinidad y salinidad moderada subsuperficialmente y ocupa la parte baja de la pendiente occidental de la gran depresión de la laguna Mar Chiquita.
Es un área típica de transición con la llanura alta fluvio eólica de los departamentos Río Seco y Tulumba. Esta Serie se la encuentra también como inclusiones en sectores relativamente más altos dentro de la depresión.
Presenta un horizonte superficial (Ai) de 23 cm de espesor, color pardo oscuro, estructura en bloques subangulares medios moderados a débiles, franco limoso sin salinidad y alcalinidad muy ligera o no alcalino.
Le sigue hasta 42 cm un horizonte ligeramente más arcilloso (B2 cámbico) de color pardo amarillento oscuro con estructura en bloques tendencia prismática, moderadamente salino (11 mmhos de conductividad).
A mayor profundidad aparece material calcáreo diseminado en la masa y la salinidad se mantiene constante. El horizonte C aparece a 59 cm de color pardo a pardo oscuro, franco, con nodulos abundantes y bochas cementadas.
Los suelos de esta Serie están limitados parcialmente en su aptitud por la salinidad y alcalinidad moderada a partir de 23 cm y drenaje natural moderado a imperfecto, Ocupa sectores de la transición entre el monte y el Saladillo en especial los más próximos a este último formando un complejo de suelos con la Serie La Encrucijada y Las Arrias en fase moderadamente alcalina subsuperficial.
La vegetación es la típica del monte con menos desarrollo y densidad, asociada con halófitas como el jume blanco y cachiyuyo especialmente.
Descripción del perfil típico:
A continuación se da la descripción de un perfil representativo de esta Serie, obtenida a 2 Km. al Este del paraje homónimo, departamento Río Seco, provincia de Córdoba.
0-23 cm; color en húmedo (10YR3/3) pardo oscuro; franco a franco limoso; estructura en bloques subangulares medios moderados a débiles; raíces comunes; límite inferior claro, suave.
23 - 42 cm; color en húmedo (10YR3,5/4) pardo amarillento oscuro; franco a franco limoso; estructura en bloques subangulares medios moderados tendencia a prismas rompe a bloques; ligeramente plástico; no adhesivo; barnices húmico arcillosos escasos y finos; límite inferior abrupto, suave.
42 - 59 cm; color en húmedo( 10YR4 / 4) pardo amarillento oscuro; franco; estructura en bloques subangulares medios débiles; reacción violenta al C1H en la masa del suelo; barnices arcillosos vestigios; eflorescencias salinas abundantes; límite inferior gradual.
59 cm a +; color en húmedo . (7,5YR4/4) pardo a pardo oscuro; franco; masivo; violenta reacción al C1H en la masa del suelo; concreciones de COaCa comunes; nodulos cementados comunes; eflorescencias salinas abundantes; presencia de bochas cementadas (más del 50%).
En los perfiles correspondientes a esta Serie se han observado variaciones con respecto a la salinidad de los horizontes superiores que puede ser ligera. Tiene entre 50 cm y el metro de profundidad endurecimientos irreversibles que afectan más del 50% del horizonte.
El horizonte superficial (A1) puede tener entre 17 y 25 cm de espesor y es frecuente la presencia de material decolorado. La Serie El Guanaco es un Duracuol típico (suelo oscuro y blando superficial, salino alcalino subsuperficial, con débil desarrollo, algo hidromórfico y endurecido en profundidad). Los datos analíticos se encuentran en el Cuadro N°10.
La Serie El Jume es un suelo pobremente drenado, sin desarrollo de horizontes genéticos, formado por capas aluviales con dominio de texturas pesadas; generalmente tiene la capa freática afectando el perfil muy próxima a la superficie.
Es sódico, fuertemente salino desde la superficie y susceptible a sufrir inundaciones y/o anegamientos. Ocupa un área alargada en sentido Norte - Sur correspondiente a la parte más baja dentro del primer Saladillo. La vegetación natural consiste exclusivamente en halófitas muy resistentes a las limitaciones extremas indicadas, en especial jume colorado y salicornia.
La capa I superficial se extiende hasta 22 cm, es franco arcillo limosa con más del 15% de sodio de intercambio y 88,6 mmhos de conductividad. La capa siguiente se extiende hasta la capa freática (30 cm) con texturas similares aumentando el sodio de intercambio y el material calcáreo diseminado en la masa. Es normal la presencia en todo el perfil de pseudomice-lios salinos.
Descripción del perfil típico:
El perfil tipo de esta Serie ha sido estudiado a 6 Km. al Este de El Guanaco, departamento Río Seco, provincia de Córdoba y se describe a continuación:
0-22 cm; color en húmedo (10YR3/4) pardo amarillento oscuro; franco arcillo limoso; estructura masiva tendencia laminar; plástico; ligeramente adhesivo; raíces escasas; presencia de caracoles y pseudomicelios salinos superficiales; límite inferior abrupto, suave.
22 cm a +; color en húmedo (10YR3/4) pardo amarillento oscuro; franco arcillo limoso; masivo; violenta reacción de larga duración al C1H en la masa del suelo; vestigios de raíces; capa freática a 40 cm; abundantes seu-domicelios salinos y caracoles.
Los datos analíticos de este perfil se encuentran en el Cuadro N°11. Dentro de la Serie El Jume existen algunas variaciones en cuanto a los espesores de las capas pero las condiciones de drenaje pobre, anegamientos muy frecuentes, alcalinidad y salinidad muy alta son un denominador común para todos los perfiles de la Serie.
Los suelos de esta Serie se encuentran formando complejos de suelos con la Serie La Angelita y El Saladillo en fases muy inundables en el centro del primer Saladillo vinculados a las áreas de influencia inmediata de lagunas del Sur (unidad EJu). Taxonómicamente se clasifica como un Hapla-cuent típico (salino sódico).
La Serie El Rodeo es un suelo moderadamente desarrollado sobre materiales franco limosos de origen eólico con influencia fluvial. Ocupa planos bajos fluviales, interfluvios, derrames planos y líneas de escurrimiento.
Presenta un horizonte Ai de 18 cm, franco limoso con estructura en bloques. Le sigue hasta 50 cm un horizonte más arcilloso (B2 textura!)» franco limoso a franco arcillo limoso y estructura en prismas irregulares medios moderados. El horizonte C es franco limoso de origen eólico con influencia fluvial y aparece a partir de 86 cm.
Es un suelo bien drenado con buena capacidad de retención de humedad. Está exento de sales y álcalis en todo el perfil. Los datos analíticos del perfil típico se encuentran en el Cuadro N°12.
Descripción del perfil típico:
El perfil tipo que representa a los suelos de esta Serie ha sido estudiado a 5 Km. al NNE de la Ea. Los Sauces, en el departamento Tulumba, provincia de Córdoba y se describe a continuación:
0-18 cm; color en húmedo (10YR3/2) pardo grisáceo muy oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios moderados; friable en húmedo; ligeramente plástico; no adhesivo; pH 6,5; raíces muy abundantes; límite inferior claro, suave.
18 - 50 cm; color en húmedo (10YR3/3) pardo oscuro; franco limoso a franco arcillo limoso; estructura en prismas irregulares medios moderados rompe a prismas y bloques; friable en húmedo; plástico; ligeramente adhesivo; pH 6,5; barnices húmico arcillosos, abundantes, medios y finos; raíces comunes; límite gradual, suave.
50 - 86 cm; color en húmedo (10YR3/4) pardo amarillento oscuro; franco limoso a franco arcillo limoso; estructura en bloques subangulares y prismas débiles; friable en húmedo; ligeramente adhesivo; pH 7,0; barnices arcillosos escasos y finos; raíces escasas; límite inferior gradual.
86 cm a +; color en húmedo (10YR3,5/4) pardo amarillento oscuro; franco limoso; masivo; ligeramente plástico; no adhesivo; pH 7,2; vestigios de raíces.
Dentro de esta Serie los tenores de arcilla del horizonte C pueden tener ligeras variaciones pero siempre dentro del franco limoso. Existen ligeras variaciones en cuanto a espesores de los horizontes.
Tiene buena capacidad de retención de humedad y se encuentra generalmente en sectores planos deprimidos donde recibe mayor cantidad de agua de la normal, por lo tanto, es en general más húmedo que las partes más altas.
Esta Serie no se encuentra nunca mapeada sola por razones de escala integrando las siguientes unidades en asociaciones o complejos con otras Series: EBñ, LMc, LMcl, ERo y ERoL Los suelos de la Serie El Rodeo pertenecen a los Argiustoles típicos, desarrollados sobre materiales originarios de origen mixto (fluvio eólicos).
La Serie El Saladillo es un suelo pobremente drenado, de amplia difusión en los sectores más bajos e inundables dentro de la depresión de la laguna Mar Chiquita. Se ha desarrollado sobre materiales franco limosos a franco arcillo limosos de origen fluvial depositados en aguas tranquilas.
Se caracteriza por la fuerte alcalinidad y salinidad desde la superficie con la capa freática a 70 cm con evidentes indicios de frecuentes ascensos hasta los horizontes superficiales. La vegetación natural está representada por halófitas casi con exclusividad, en especial jume colorado y salicor-nia (palo azul y cachiyuyo en menor proporción).
El horizonte superior (A2) es. de 8 cm de espesor» color pardo grisáceo muy oscuro» franco limoso a franco arcillo limoso y fuertemente salino alcalino. Le sigue a continuación un horizonte más arcilloso (Bat) de textura franco arcillo limosa a franco arcillosa con condiciones de salinidad y alcalinidad más severas.
La estructura es prismática y tiene pseudomicelios salinos abundantes; la base de este horizonte se encuentra a 26 cm. El sustrato (horizonte C) aparece a 57 cm, tiene textura franca a franco arcillosa, estructura masiva, cristales de yeso y pseudomicelios salinos abundantes. Se observa generalmente en épocas de sequía una pátina de sales solubles que cubre toda la superficie.
Esta Serie no integra unidades puras. Se encuentra formando complejos en la unidad El Saladillo (ESa) con las Series El Jume» La Angelita y en la unidad El Jume (EJu) en fase muy inundable.
Descripción del perfil típico:
El perfil tipo de esta Serie que se describe a continuación fue estudiado a 10 Km. al SSE de la localidad de Puesto de Castro, departamento Tulumba, provincia de Córdoba.
0-8 cm; color en húmedo (10YR3/2,5) pardo grisáceo muy oscuro a pardo oscuro; franco limoso a franco arcillo limoso; estructura laminar media moderada; friable en húmedo; plástico; ligeramente adhesivo; raíces escasas; eflorescencias salinas en superficie; límite inferior abrupto» suave.
8 - 26 cm; color en húmedo (10YR3/3) pardo oscuro; franco arcillo limoso a franco arcilloso; estructura en prismas irregulares medios a finos rompe a prismas; friable en húmedo; muy plástico y adhesivo; barnices húmico-arcillosos abundantes y finos; raíces escasas; pseudomicelios salinos abundantes; límite inferior claro, suave.
26 - 57 cm; color en húmedo (10YR4/3) pardo a pardo oscuro, franco limoso a franco arcilloso; estructura en prismas irregulares medios moderados rompe a prismas y bloques débiles; friable en húmedo; plástico; adhesivo; moderada reacción al C1H en la masa del suelo;
57 cm a +; color en húmedo (7,5YR4/4) pardo a pardo oscuro; franco a franco arcilloso; masivo; friable en húmedo; plástico; ligeramente adhesivo; moderada reacción al C1H en la masa del suelo; cristales de yeso y pseudomicelios salinos comunes.
Dentro de la Serie El Saladillo existen variaciones en cuanto al espesor del horizonte A2 de 7 a 14 cm; la salinidad y alcalinidad pueden tener ligeras variaciones pero siempre dentro de tenores muy perjudiciales para todos los cultivos a excepción de las halófitas indicadas anteriormente que soportan, además, condiciones de drenaje pobre a imperfecto.
Los suelos de esta Serie pertenecen a los Natracualf típicos (suelo salino alcalino con horizonte A2 desde la superficie y con horizonte B2 textural e hidromórfico). Los datos analíticos pertenecientes a esta Serie se encuentran en el Cuadro N°13.
5.6.1. Serie El Saladillo fase muy inundable
Esta fase ocupa la porción central y más deprimida del primer Saladillo, siempre vinculada a lagunas y cubetas de agua salada. Las condiciones edáficas son extremadamente severas por el problema del anegamiento frecuente y de larga duración.
La unidad cartográfica es el complejo designado con el símbolo EJu (El Jume) integrada también por la Serie homónima y La Angelita en fase muy inundable. La capa freática se encuentra muy próxima a la superficie.
La Serie El Silencio es un suelo oscuro» pobremente drenado, que ocupa las planicies de inundación del actual cauce del Río Dulce y los paleocauces más deprimidos de los bordes orientales de la planicie aluvial de La Rinconada (áreas de transición).
Tiene la capa muy próxima a la superficie en la mayoría de los perfiles estudiados, con salinidad y alcalinidad moderada a partir del horizonte superior (Ai). Este suelo es muy susceptible de sufrir inundaciones de larga duración por los periódicos desbordes del Río Dulce. La vegetación dominante y casi exclusiva es el espartillo (hidro-halófita) que soporta condiciones extremas de hidromorfismo además de la alcalinidad.
Tiene un horizonte superior (Ai) de 14 cm, es de color pardo grisáceo muy oscuro, textura franco limosa a franca, moderadamente salino alcalino, con 14% de arcilla. Le sigue hasta 32 cm un horizonte más arcilloso (B2 textural) con 17% de sodio de intercambio, textura franco arcillosa a franca con 29,6% de arcilla.
Luego comienza un horizonte de transición (Baca) con reacción al C1H en la masa del suelo saturado con la capa freática. El escurrimiento es muy lento a estancado y la alcalinidad se mantiene constante en todo el perfil con carácter moderado.
Aparentemente los suelos de esta Serie se diferencian de los dominantes del primer Saladillo (Serie El Saladillo) porque además de tener mayor peligro de anegamiento tienen menor alcalinidad y/o salinidad. La presencia cíclica de agua dulce impediría que estos procesos lleguen a términos extremos.
Descripción del perfil típico:
El perfil tipo que representa a esta Serie ha sido obtenido a 14 Km. al Oeste del paraje denominado Pozo Verde, en el departamento Tulumba, provincia de Córdoba.
0-14 cm; color en húmedo (10YR3/2) pardo grisáceo muy oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares tendencia laminar; friable en húmedo; li-. geramente plástico; ligeramente adhesivo; moteados comunes gruesos y sobresalientes; raíces muy abundantes; límite inferior claro, suave; pseudomicelios salinos en superficie.
14 - 32 cm; color en húmedo( 10YR3 / 3) pardo oscuro; franco arcilloso a franco; estructura en prismas irregulares medios moderados rompe a prismas; friable. en húmedo; muy plástico; adhesivo; barnices húmico arcillosos abundantes medios; raíces abundantes; reacción en puntos al C1H en la masa del suelo; límite inferior claro.
32 cm a +; franco arcilloso a franco; plástico; adhesivo; violenta reacción al C1H en la masa del suelo; presencia de la capa freática.
En los perfiles correspondientes a esta Serie se han observado variaciones muy notables con respecto al espesor del horizonte Ai de 7 a 16 cm. Algunos perfiles pueden tener moderada a fuerte salinidad superficial.
Los suelos de esta Serie se encuentran en las unidades ESil, ESi2, ESi3 y ESi4 conformando grandes "manchones de esparto" o bien áreas alargadas y deprimidas de varias decenas de metros de ancho (paleocauces) especialmente en la unidad ESi3 y bordes orientales de la unidad LRL
Se clasifica desde el punto de vista taxonómico dentro de los Natracualf mélicos (suelos hidromórficos salino alcalinos con horizonte superior oscuro). Los datos analíticos se encuentran en el Cuadro N°14.-
5.7.1. Serle El Silencio fase muy inundable
Con el símbolo ESi4 se ha cartografia-do un sector ubicado en la parte más baja de la planicie de inundación del Río Dulce. En este caso está vinculado a suelos menores con capas arcillosas muy inundables compartiendo la condición de éstos. El agua se elimina muy lentamente permaneciendo durante la mayor parte del año sobre la superficie.
La Serie El Zapallar es un suelo oscuro e imperfectamente drenado que ocupa sectores más altos dentro de la planicie aluvial de La Rinconada. Tiene vegetación de monte y halófitas asociadas (jume blanco, cachi-yuyo, palo azul, etc.). Puede ocupar sectores pequeños (isletas o micro albardones) o bien en unidades mayores siempre más altos y no inundables.
Se ha desarrollado a partir de un sedimento franco limoso de origen fluvial (incluye loess redepositado). Es un suelo muy típico y de amplia difusión ¡dentificable por la vegetación y su posición en el relieve.
La parte superficial del suelo (horizonte Ai) tiene 11 cm de espesor con estructura en bloques débiles tendencia laminar, está bien provisto de materia orgánica, tiene color pardo grisáceo oscuro, es moderadamente salino y ligera a moderadamente alcalino.
Le sigue hasta 55 cm un horizonte más arcilloso (B2) franco limoso a franco arcillo limoso, con estructura en prismas, moderadamente salino alcalino con 27% de sodio de intercambio. En la parte inferior (horizonte B22) es fuertemente salino alcalino.
El sustrato (horizonte C) se encuentra a 80 cm, está generalmente afectado por la capa freática. No presenta peligro de inundación o es muy eventual y de corta duración y el drenaje es imperfecto a moderado.
Descripción del perfil típico:
El perfil típico de los suelos de esta Serie fue estudiado a 6 Km. al SO del paraje homónimo, departamento Río Seco, en la provincia de Córdoba.
0-11 cm; color en húmedo (10YR3/2) pardo grisáceo oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares y laminar media moderada; friable en húmedo; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; moteados comunes, finos y sobresalientes de hierro y manganeso; raíces comunes; límite inferior claro suave.
11 - 34 cm; color en húmedo (10YR3/3) pardo oscuro; franco limoso a franco arcillo limoso; estructura en prismas regulares medios fuertes rompe a prismas y bloques; friable en húmedo; muy plástico; adhesivo; barnices abundantes a muy abundantes; moteados abundantes; finos y precisos; raíces escasas a comunes; límite inferior claro, suave.
34 - 55 cm; color en húmedo (10YR3/3) pardo oscuro; franco limoso a franco arcillo limoso; estructura en prismas irregulares medios moderados rompe a prismas y bloques; friable en húmedo; plástico; adhesivo; concreciones de COaCa abundantes y medias; barnices arcillosos abundantes; moteados comunes medios y precisos; raíces escasas; poros comunes; pseudomicelios salinos comunes; límite inferior abrupto, suave.
55 - 90 cm; color en húmedo (10YR3,5/3) pardo oscuro a pardo; franco limoso; estructura en prismas irregulares medios moderados rompe a bloques; friable en húmedo; plástico; ligeramente adhesivo; violenta reacción al C1H en la masa del suelo; barnices arcillosos escasos a comunes finos; moteados de FeMn comunes medios y sobresalientes; vestigios de raíces; límite claro.
90 cm a +; color en húmedo (10YR5/3); franco limoso; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; violenta reacción al C1H en la masa del suelo; moteados comunes medios y sobresalientes; capa freática afectando el horizonte; se observan caracoles finos en todo el perfil.
Los datos analíticos pertenecientes a este perfil se encuentran en el Cuadro N°15. Dentro de la Serie El Zapallar existen algunas variaciones con respecto al espesor del horizonte Ai (10 a 17 cm) y puede tener evidentes síntomas de lavado. El nivel freático puede estar entre 70 a 140 cm. El horizonte B textural varía entre 35 y 55 cm de espesor, con la parte superior a veces sólo ligeramente afectada por sales y álcalis.
La Serie El Zapallar no aparece nunca mapeada pura; se la encuentra integrando varios complejos denominados LRi; PzO y PzOl todos ubicados en la planicie aluvial de La Rinconada.
Las limitaciones que presenta esta Serie se refieren a la alcalinidad y salinidad moderada subsuperficial y más alta a mayores profundidades; no está afectada mayormente por anegamientos como la mayoría de los suelos con los cuales se encuentran vinculados. Los suelos de esta Serie pertenecen a los Natracualf mólicos (salino sódico subsuperficial con horizonte Ai corto, lixiviado e hidromórfi-co).
La Serie La Angelita es un suelo bien provisto de materia orgánica (Ai), ocupa sectores del primer Saladillo y las áreas planas de transición que rodean por el Este, Sur y Oeste a la planicie aluvial de La Rinconada.
Es imperfectamente drenado y fuertemente salino alcalino desde la superficie donde generalmente se observan eflorescencias salinas. Puede presentar inundaciones de moderada duración. La vegetación natural dominante está representada por jume, salicornia, palo azul, cardón y chañar de poco desarrollo.
La parte superficial (horizonte Ai) de 15 cm es franco limoso a franco arcillo limoso, tiene 2,46% de materia orgánica, estructura en bloques subangulares débiles y fuerte salinidad y alcalinidad sódica.
Le sigue un horizonte más arcilloso (B-2 textural) franco arcillo limoso con estructura en prismas finos con mayor salinidad y alcalinidad. El Cca es franco limoso, se extiende a partir de 63 cm y está afectado por la capa freática.
Descripción del perfil típico:
A continuación se da la descripción de un perfil representativo de esta Serie ubicado a 13 Km. al ESE de Villa Candelaria, departamento Río Seco, provincia de Córdoba.
0-15 cm; color en húmedo (10YR3/2,5) pardo grisáceo muy oscuro a pardo oscuro; franco limoso a franco arcillo limoso; estructura en bloques subangulares medios débiles; friable en húmedo; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; raíces comunes; eflorescencias salinas en superficie; límite inferior claro, suave.
15 - 35 cm; color en húmedo (10YR3/4) pardo amarillento oscuro; franco arcillo limoso; estructura en prismas y bloques irregulares rompe a bloques; friable en húmedo; plástico; adhesivo; concreciones de COaCa escasas y finas; barnices húmico arcillosos abundantes y finos; raíces escasas; eflorescencias salinas muy abundantes; límite inferior gradual.
35 - 63 cm; color en húmedo (7,5YR5/4) amarillento oscuro; franco arcillo limoso a franco limoso; friable en húmedo; barnices arcillosos escasos y finos; reacción en puntos al C1H en la masa del suelo; límite inferior abrupto, suave.
63 cm a +; color en húmedo (7,5YR5/4) amarillento oscuro; franco limoso a franco arcillo limoso; violenta reacción al C1H en la masa del suelo; el horizonte está afectado por la capa freática.
Los datos analíticos pertenecientes ai perfil descripto se encuentran en el Cuadro N°16. Dentro de la Serie La Angelita existen pocas variaciones de interés: se puede mencionar el espesor del horizonte Ai de 11 a 17 cm permaneciendo las limitaciones más serias como alcalinidad, salinidad y drenaje prácticamente sin variaciones notables.
Esta Serie no forma una unidad cartográfica pura (en realidad todos son complejos). Integra los complejos ESa en el primer Saladillo; ESi3 y LAg en las áreas de transición y ESil y ESi2 en el segundo Saladillo o planicie de inundación del Río Dulce. Los suelos de esta Serie pertenecen a los Natra-cuoles típicos (suelos salino sódicos e hidromórficos con horizonte oscuro superficial y B2 textural).
5.9.1. Serie La Angelita en fase muy inundable
Esta fase ocupa las áreas más bajas del primer Saladillo (EJu) junto con la Serie El Jume y El Saladillo con idéntico grado de inundación.
La Serie La Encrucijada es un suelo débilmente desarrollado, moderado a imperfectamente drenado, moderado a fuertemente salino alcalino a partir del horizonte subsuperficial (AC) con ligera salinidad en superficie.
Ocupa la porción más baja de las pendientes largas que descienden desde la planicie fluvio eólica al primer Saladillo. Es típica y exclusiva de la transición entre estas dos grandes unidades. La vegetación corresponde al monte con halófitas en proporciones aproximadamente similares (jume blanco y cachiyuyo especialmente).
El material originario corresponde al loess franco limoso en parte redepositado por corrientes fluviales. Presenta un horizonte superficial (Ai) de 18 cm, textura franco limosa de color pardo oscuro. Tiene estructura en bloques subangulares, es débilmente salino con reacción al C1H en la masa del suelo (presencia de carbonates libres) y el porcentaje de sodio de intercambio no es mayor al 15%.
El horizonte de transición (ACca) tiene textura al tacto franco limosa, con CC^Ca en la masa del suelo (3,48%), fuertemente salino y más del 45% de sodio de intercambio. El horizonte Cea comienza a los 53 cm, tiene nodulos cementados comunes (no más del 20%) y es fuertemente salino alcalino.
Es muy evidente la diferencia que se observa entre el Ai con ligera limitación y con buen desarrollo radicular y el horizonte subsuperficial (AC) donde las condiciones de salinidad y alcalinidad son tan severas que prácticamente eliminan la presencia de raíces.
Descripción del perfil típico:
El perfil típico de los suelos de esta Serie fue estudiado a 3,2 Km. al Este de Puesto de Castro, aproximadamente en el límite de los departamentos Tulumba y Río Seco, provincia de Córdoba.
0-18 cm; color en húmedo (7,5YR3/2) pardo oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios débiles; friable en húmedo; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; débil reacción al C1H en la masa del suelo; escasos pseudomicelios salinos; raíces comunes a abundantes; límite inferior claro, suave.
18 - 53 cm; color en húmedo (7,5YR4/4) pardo a pardo oscuro; franco limoso; estructura masiva con tendencia a bloques débiles; ligeramente plástico; no adhesivo; violenta reacción al C1H en la masa del suelo; abundantes pseudomicelios salinos; raíces escasas a vestigios; límite inferior gradual.
53 cm a +; color en húmedo (7,5YR4/4) pardo; franco limoso; masivo; friable en húmedo; ligeramente plástico; no adhesivo; violenta reacción al C1H en la masa del suelo; abundantes pseudomicelios salinos; nodulos cementados abundantes.
Los datos analíticos pertenecientes a este perfil se encuentran en el Cuadro N°17.
Dentro de la Serie La Encrucijada se han observado variaciones con respecto al contenido de arcilla en el horizonte Ai que puede llegar hasta 13% o bien que en este mismo horizonte aparezca mayor cantidad de COsCa diseminado. Algunos perfiles presentan cristales de yeso muy abundantes en el horizonte Cca.
Esta Serie se la encuentra en la media loma baja y pie de loma de la pendiente al Saladillo (EGu), formando complejo con la Serie El Guanaco y la fase por alcalinidad y/o salinidad de la Serie Las Arrias.
Por las condiciones descriptas se deduce que las limitaciones severas comienzan a partir de 18 cm (horizonte AC), por lo tanto existen aceptables condiciones edáficas para vegetales de raíces superficiales mientras que la vegetación de monte no puede desarrollarse con plenitud ya que requiere mejores propiedades en profundidad. La Serie La Encrucijada se clasifica como un Haplustol salortídico (suelo castaño, salino alcalino).
La Serie La Rinconada es un suelo lixiviado superficialmente, imperfectamente drenado, moderadamente salino y débilmente alcalino desde la superficie. Se ha desarrollado sobre materiales franco limosos a franco arcillo limosos en la planicie aluvial de La Rinconada y áreas de transición.
Se la encuentra generalmente en manchones (micro planicies) cerca de los paleocauces (cañadas de aibe) y los albardones (isletas de monte). Suele ocupar las partes más altas de un microrelieve muy típico rodeado de pequeñas áreas plano cóncavas sin vegetación alguna (Serie Pozo Verde). La vegetación dominante es la de jume blanco con cardón con otras especies subordinadas como palo azul, grama criolla, chañar, cebadilla, etc.
Superficialmente tiene un horizonte lixiviado (A2) hasta 17 cm con 19,3% de arcilla, moderadamente salino (10,8 mmhos/cm de conductividad), moderado a ligeramente alcalino, textura franco limosa con estructura en bloques suban- ■ guiares moderados tendencia laminar.
Le sigue hasta 42 cm un horizonte más arcilloso (Encasa) con calcáreo diseminado en la masa moderadamente salino alcalino con 35% de arcilla y textura franco arcillosa. Hasta 66 cm se extiende un horizonte de transición (Escasa) franco arcillo limoso a franco limoso moderadamente salino alcalino con 3,3% de COaCa diseminado.
El sustrato (horizonte Cca) es franco limoso a franco arcillo limoso con fuerte salinidad y alcalinidad. Un dato de interés en esta Serie es la alcalinidad y salinidad que prácticamente permanecen constantes con carácter moderado hasta el horizonte C.
Descripción del perfil típico:
El perfil típico de los suelos de esta Serie fue descripto a 15 Km. al SO de El Zapallar, departamento Río Seco, provincia de Córdoba.
0-17 cm; color en húmedo (10YR3/3) pardo oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios moderados tendencia laminar; friable en húmedo; ligeramente plástico; no adhesivo; moteados comunes medios y precisos; raíces comunes; límite inferior abrupto, suave.
17 - 42 cm; color en húmedo (10YR3/3,5) pardo oscuro a pardo amarillento; franco arcilloso; estructura en prismas irregulares medios fuertes rompe a prismas y bloques; friable en húmedo; plástico; adhesivo; moderada reacción al C1H en la masa del suelo; barnices húmico arcillosos muy abundantes y medios; se observan cristales de yeso; raíces comunes; límite inferior claro, suave.
42 - 66 cm; color en húmedo (10YR3,5/4) pardo amarillento oscuro; franco arcillo limoso a franco limoso; estructura en prismas y bloques irregulares; friable en húmedo; plástico; adhesivo; moderada reacción al C1H en la masa del suelo; barnices húmico arcillosos abundantes a escasos finos; raíces escasas; cristales de yeso comunes; límite inferior gradual suave.
66 cm a +; color en húmedo (7,5YR4/4) pardo a pardo oscuro; franco arcillo limoso a franco limoso; masivo; plástico; ligeramente adhesivo; violenta reacción la C1H en la masa en el suelo.
Los datos analíticos pertenecientes al perfil descripto se encuentran en el Cuadro N°18.
Dentro de la Serie La Rinconada existen variaciones en cuanto al espesor del horizonte A2 (entre 15 a 20 cm). Puede tener estructura en bloques subangulares débiles sin tendencia laminar. La capa freática se encuentra a 90 cm fluctuando entre 100 y 120 cm.
Esta Serie no aparece mapeada por separado en el mapa, sino que se encuentra en unidades compuestas formando complejos de suelos con otras Series de diversas aptitudes. Tiene su mayor difusión en la planicie aluvial de La Rinconada donde es muy típica y fácilmente identificable por su vegetación (jumial con cardón) especialmente en las unidades LRi, LRil y PzO y en menor proporción las unidades de transición a los Saladillos del Oeste y del Este como en ESi3 y LAg,
Los suelos de esta Serie están limitados por alcalinidad y salinidad moderada a ligera superficial continuando con carácter moderado hasta 66 cm de profundidad. La Serie La Rinconada se clasifica como un Natracualf típico (suelo salino alcalino con hídromorfísmo).
La Serie Las Arrias es un suelo bien drenado a algo excesivamente, débilmente desarrollado sobre materiales mixtos de textura franco limosa a franca. Es típico de áreas de derrames planas y en el borde oriental de la planicie fluvio eólica.
La parte superficial del suelo (horizonte Ai) es de textura franco limosa a franca con estructura en bloques subangulares medios moderados a débiles. Le sigue un horizonte de transición AC hasta 60 cm. El sustrato (C) es franco limoso a franco, presenta laminillas de mica finas abundantes y calcáreo diseminado en la.masa.
Descripción del perfil típico:
El perfil tipo de esta Serie ha sido estudiado a 7,5 Km. al Sur de la localidad homónima, en el Este del departamento Tulumba.
0-20 cm; color en húmedo (10YR3/3) pardo oscuro; franco limoso a franco; estructura en bloques subangulares medios moderados; friable en húmedo; pH 6,7; raíces muy abundantes; límite inferior claro, suave.
20 - 60 cm; color en húmedo (10YR3/4) pardo amarillento oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios, débiles; friable en húmedo; pH 7,2; raíces abundantes; límite inferior abrupto, suave.
60 cm a +; color en húmedo (10YR4/4) pardo amarillento oscuro; franco limoso; masivo; friable en húmedo; pH 7,9; violenta reacción al C1H en la masa del suelo; raíces escasas.
Los datos analíticos de esta Serie se encuentran en el Cuadro N°19. La Serie Las Arrias puede presentar después de 50 cm alcalinidad ligera o moderada. Presenta una fase ligeramente inclinada (con pendientes próximas al 1%), y otra moderadamente alcalina.
Los suelos de esta Serie no constituyen una unidad cartográfica pura, se encuentran siempre asociados o formando complejos con otros suelos en las siguientes unidades cartográficas: SEcl, SEc4, SEc5, SEc6, SEc8 y Egu.
La limitación fundamental además de la climática es la ligera a moderada alcalinidad en profundidad en algunos perfiles. Los suelos de la Serie Las Arrias pertenecen a los Haplustoles énticos.
La Serie Las Macitas es un suelo débil a moderadamente desarrollado sobre materiales franco limosos de origen eólico con ligera influencia fluvial. Se la encuentra en las líneas de escurrimiento moderadas a débilmente manifiestas y microáreas de derrame en la planicie flu-vio eólica. Es un suelo bien drenado encontrándose casi siempre en áreas planas o ligeramente cóncavas pero sin ningún tipo de problema de anegamiento ni acumulación de sales ni álcalis.
La parte superficial presenta un horizonte Ai de 23 cm con textura franco limosa, estructura en bloques moderados y color pardo grisáceo muy oscuro. El horizonte subsuperficial que llega hasta 43 cm (B2 cámbico) es algo más arcilloso con estructura en prismas débiles, textura franco arcillo limosa a franco limosa.
El horizonte Cca se encuentra a 67 cm de profundidad, es franco limoso; masivo con algunas evidencias de endurecimiento a más de 1 m. de profundidad, presenta calcáreo diseminado en la masa y algunos pseudomicelios salinos que los datos analíticos no detectan.
Descripción del perfil típico:
El perfil tipo de esta Serie ha sido estudiado a 11 Km. al Norte de Sebastián Elca-no, en el departamento Río Seco, provincia de Córdoba.
0-23 cm; color en húmedo(10YR3/2) pardo grisáceo muy oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios moderados; friable en húmedo; ligeramente adhesivo; pH 6,5; raíces abundantes; límite inferior claro, suave.
23 - 43 cm; color en húmedo (10YR4/3) pardo amarillento oscuro; franco arcillo limoso; estructura en prismas irregulares medios débiles; friable en húmedo; plástico; adhesivo; pH 6,8; barnices húmico arcillosos escasos a abundantes finos; raíces escasas; límite inferior claro, suave.
43 - 67 cm; color en húmedo (10YR3,5/4) pardo amarillento oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios moderados; friable en húmedo; ligeramente plástico; no adhesivo; pH 7; barnices arcillosos vestigios a escasos finos; vestigios de raíces; límite inferior claro, suave.
67 cm a +; color en húmedo (7,5YR5/4) pardo; . franco limoso; masivo; pH 8,2; violenta reacción al C1H en la masa del suelo.
Los datos analíticos pertenecientes al perfil descripto se encuentran en el Cuadro N°20. Dentro de la Serie Las Macitas algunos perfiles pueden presentar moderada a ligera salinidad o bien ligera cementación después del metro. Se observa una fase moderadamente salina en profundidad.
Por encontrarse en líneas de escurri-miento y micro áreas cóncavas y tener un horizonte B, sufre menos la sequía que los suelos de las lomas o derrames planos de perfil débilmente desarrollado (A - AC).
Este suelo no ha sido mapeado individualmente; integra las siguientes unidades compuestas ya sea en asociaciones o compiejos: SEcl (lomas planas con influencia de derrames finos), SEc2 (áreas planas con derrames más evidentes), SEc4 (áreas de derrames alargadas con ondulaciones), LMc - LMcl » LSc (líneas de escurrimiento), y LMc2 (planos fluviales sin capas). Los suelos de esta Serie pertenecen a los Haplustoles típicos (castaños).
La Serie Los Aibales es un suelo oscuro, imperfectamente drenado, bien desarrollado con salinidad y alcalinidad ligera a partir de 50 cm. El material originario es franco limoso a franco de origen fluvial.
Esta Serie ocupa los micropaleocauces ligeramente deprimidos, conocidos en la zona como "cañadas de aibe", fácilmente reconocibles por esta típica vegetación casi exclusiva. Estas cañadas son áreas alargadas con un patrón de distribución muy intrincado, tienen pocas decenas de metros de ancho y están orientadas en el sentido de la pendiente regional (Norte -Sur) estando bien representados en la planicie aluvial de La Rinconada.
El horizonte superficial (Ai) es de 13 cm, con 3,8% de materia orgánica, franco limoso, con 12,7% de arcilla sin salinidad ni sodio y estructura en bloques subangulares medios con tendencia a laminar.
Luego de un límite abrupto se pasa a un horizonte muy enriquecido en arcilla (31,7%, B2 textural) hasta 38 cm, tiene textura franco arcillo limosa a franco arcillosa, estructura en prismas regulares medios moderados, no salino y sólo con 7,8% de sodio de intercambio.
La transición se extiende hasta 72 cm, es débilmente salino con 6,1% de sodio, textura franco limosa con 1,5% de CCbCa pulverulento. El horizonte Cca tiene 13% de arcilla y débilmente salino alcalino.
Descripción del perfil típico:
El perfil típico de los suelos de esta Serie fue estudiado a 15 Km. al SO de El Zapallar, departamento Río Seco, provincia de Córdoba.
0-13 cm; color en húmedo (10YR3/2) pardo grisáceo muy oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios moderados tendencia laminar; friable en húmedo; ligeramente plástico; no adhesivo; moteados de FeMn escasos medios y débiles; raíces muy abundantes; límite inferior abrupto, suave.
13 - 38 cm; color en húmedo (10YR3/3) pardo oscuro; arcillo limoso a franco arcilloso; friable en húmedo; plástico; adhesivo; concreciones de COaCa finas escasas; barnices húmico arcillosos muy abundantes a abundantes medios; moteados de FeMn abundantes medios y precisos; raíces abundantes; límite inferior gradual, suave.
38 - 72 cm; color en húmedo (10YR4/4) pardo amarillento oscuro; franco limoso; estructura en prismas irregulares gruesos rompe a bloques; friable en húmedo; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; débil reacción al C1H en la masa del suelo; concreciones de CCbCa comunes medias; barnices arcillosos escasos a abundantes; moteados de FeMn abundantes medios y precisos; raíces escasas; cristales de yeso finos escasos; límite inferior gradual, suave.
72 cm a +; color en húmedo (7,5YR4/4) pardo a pardo oscuro; franco limoso; masivo; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; pH 8,2; moderada reacción al C1H. en la masa del suelo; moteados abundantes medios y sobresalientes; se observan cristales de yeso comunes finos.
La capa freática se encuentra a 90 cm no afectando normalmente los horizontes genéticos. Los datos analíticos pertenecientes al perfil descripto se encuentran en el Cuadro N°21.
Dentro de la Serie Los Aibales se han observado variaciones con respecto al espesor del horizonte Ai de 12 a 18 cm. El B2 puede tener hasta 2% de COaCa en la masa del suelo. Puede aparecer alcalinidad y salinidad moderada después de 50 cm.
Los suelos de la Serie Los Aibales se encuentran vinculados geográficamente formando complejos de suelos en la unidad LRi (planicie aluvial de La Rinconada, sector Sur) con las Series La Rinconada, El Zapallar y Pozo Verde; además, se la encuentra en unidades de transición a los Saladillos en menor proporción.
Esta Serie se encuentra limitada casi exclusivamente por problemas de anegamiento y/o inundación con carácter moderadamente frecuente y de duración relativamente corta. Los suelos de la Serie Los Aibales pertenecen a los Albacualf mólicos (suelos hidromórficos sin sales ni álcalis bien desarrollados, oscuros en superficie).
La Serie Los Hoyos es un suelo oscuro, profundo, desarrollado incipientemente sobre materiales franco arenosos a francos. Se la encuentra en las formaciones de piedemonte y áreas de derrame del flanco Este de la Sierra Norte de Córdoba.
La parte superficial del suelo (horizonte Ai) es franco limoso a franco, tiene una estructura en bloques subangulares medios débiles y color pardo grisáceo muy oscuro. Le sigue a continuación una transición hacia el sustrato (horizonte AC) de textura franca y estructura débil. A partir de 59 cm comienza el material originario de textura franco arenosa y material calcáreo diseminado en la masa.
Se caracteriza por tener arena media, gruesa y gravilla en todo el perfil en especial subsuperficialmente. El drenaje es algo excesivo y el escurrimiento dominante de lento a medio.
Descripción del perfil típico:
El perfil tipo de esta Serie ha sido estudiado a 7 Km. al Sur de la localidad homónima, en el departamento Río Seco, y se describe a continuación:
0 - 25 cm; color en húmedo (10YR3/2) pardo grisáceo muy oscuro; franco limoso a franco; estructura en bloques subangulares medios débiles; friable en húmedo; pH 7,7; raíces comunes; límite inferior claro, suave.
25 - 59 cm; color en húmedo (10YR3/2) pardo grisáceo muy oscuro; franco; estructura en bloques subangulares medios débiles a masivo; friable ee húmedo; pH 8,2; escasa reacción al C1H en la masa del suelo; barnices comunes; límite inferior gradual suave.
59 cm a +; color en húmedo (10YR3/3) pardo oscuro; franco arenoso a franco; masivo; friable en húmedo; pH 8,3; violenta reacción al C1H en la masa del suelo; vestigios de raíces.
Los datos analíticos de esta Serie se encuentran en el Cuadro N°22. La limitación observada desde el punto de vista estrictamente edáfico es la baja a moderada retención de humedad. Dentro de la Serie Los Hoyos existen variaciones notables en el espesor del horizonte Ai (de 18 a 25 cm).
Por otra parte, el horizonte AC puede o no presentar COaCa pulverulento diseminado en la masa y cambios menores en los tenores de las arenas gruesas y medias siempre dentro de las texturas indicadas.
En la cartografía esta Serie no aparece como unidad pura, se la encuentra en unidades compuestas asociada con otros suelos como Los Sauces, Sebastián Eleano, San Pedro y El Rodeo. Los suelos de esta Serie pertenecen a los Haplustoles páquicos caracterizados por tener altos tenores de materia orgánica incluso hasta 50 cm de profundidad.
Esta Serie presenta una fase moderadamente erosionada por agua integrando la composición edáfica de las unidades inclinadas de piedemonte como por ejemplo los conos aluviales. En fase inclinada integra los abanicos aluviales caracterizados por pendientes suaves y largas.
La Serie Los Sauces es un suelo desarrollado sobre materiales franco limosos a francos de origen aluvial propia de los abanicos y paleocauces próximos a la Sierra Norte. Los perfiles típicos de esta Serie son profundos, bien desarrollados, con buena retención de humedad y sin problemas de salinidad ni alcalinidad.
El horizonte superior tiene 17 cm de espesor, de color pardo grisáceo muy oscuro, textura franco limosa con 11% de arena gruesa y muy gruesa y estructura en bloques subangulares medios moderados y granular. El horizonte inmediato subsuperficial (B2) se extiende hasta 37 cm, tiene textura franco limosa y estructura en prismas irregulares. El material originario se encuentra a 60 cm y el material calcáreo a 80 cm.
Descripción del perfil típico:
El perfil tipo de la Serie Los Sauces se encuentra ubicado a 15 Km. al Este de la localidad de Villa María de Río Seco, en el NE de la provincia de Córdoba.
0 - 17 cm; color en húmedo (10YR3/2) pardo grisáceo muy oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios moderados y granular; friable en húmedo; raíces abundantes; límite inferior claro suave.
17 - 37 cm; color en húmedo (10YR3/3) pardo oscuro; franco limoso a franco; estructura en prismas irregulares medios débiles a moderados rompe a bloques; friable en húmedo; no plástico; no adhesivo; barnices húmico arcillosos escasos a comunes finos; raíces abundantes; límite inferior claro, suave.
37 - 60 cm; color en húmedo (7,5YR4/4) pardo a pardo oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios débiles; friable en húmedo; barnices arcillosos finos; raíces escasas; límite inferior gradual.
60 - 80 cm; color en húmedo (7,5YR4/4) pardo a pardo oscuro; franco limoso; masivo; friable en húmedo; límite inferior abrupto, suave.
80 cm a +; color en húmedo (7,5YR5/4) pardo; franco limoso; masivo; friable en húmedo; reacción violenta al C1H de corta duración.
Los datos analíticos correspondientes a este suelo se encuentran en el Cuadro N°23. Se observan laminillas de mica abundantes y arenas gruesas con algo de gravilla en todo el perfil. Esta Serie prácticamente no tiene limitaciones desde el punto de vista estrictamente edáfico, está bien estructurada superficialmente y bien provista de materia orgánica. Generalmente se la encuentra en situaciones deprimidas por lo que es de suponer mayor afluencia de las aguas de lluvia, pero sin llegar a sufrir anegamientos.
Dentro de la Sene Los Sauces puede haber ligeras variaciones en los tenores de arcillas y arenas pero sin variar las clases texturales. Algunos perfiles pueden presentar variaciones moderadas en cuanto al espesor de horizontes y se advierte la presencia ocasional de horizontes de transición entre el A y B (AB o Bi).
Los suelos de esta Serie pertenecen a los Haplustoles típicos caracterizados sencillamente por un horizonte superficial oscuro y friable y un subsuperficial ligeramente enriquecido en arcilla (B2 no textural) sin sales ni álcalis en todo el perfil.
No aparece mapeada en ningún caso como unidad pura, sino formando complejos y asociaciones en las siguientes unidades cartográficas: EBñ, LMc, LMc2, LHy, LSc, LScl y SPd (en fase inclinada).
5.16.1. Serie Los Sauces en fase inclinada
Esta fase está vinculada a los sectores distales de los conos aluviales de las sierras (SPd). Hay limitaciones en cuanto al peligro de erosión por los gradientes próximos al 3% y la longitud de las pendientes.
La Serie Pozo de la Olla es un suelo imperfectamente drenado bien provisto de materia orgánica. Tiene alcalinidad moderada a partir del horizonte B2 aumentando a mayor profundidad y salinidad moderada después de 50 cm (horizonte B2 caso) •
Es un suelo bien desarrollado sobre materiales de origen fluvial, típico de albardones suavemente ondulados de los antiguos brazos del Río Dulce, en la planicie aluvial de La Rinconada (sector Norte en especial).
Ocupa sectores relativamente amplios en los bordes de paleocauces en áreas muy poco inundables con vegetación de monte (quebracho, cardón, quimilo, algarrobo) y halófitas como el jume verde en menor proporción.
La parte superficial del suelo, de 12 cm, es franco limoso, con 16% de arcilla, estructura en bloques subangulares sin sales ni álcalis. Le sigue a continuación, luego de un límite abrupto y hasta 54 cm, un horizonte más arcilloso (B2) con alcalinidad moderada (16% de sodio de intercambio), no salino o ligeramente en la base; tiene 25% de arcilla, textura franca a franco arcillosa y carbonatos libres en la masa del suelo.
A partir de 54 cm y hasta 82 cm es moderadamente salino alcalino con 27% de sodio de intercambio. El sustrato (horizonte Ccasa) es franco limoso con la capa freática a 80 cm, salino alcalino con calcáreo diseminado en la masa. En general la Serie Pozo de la Olla cubre áreas poco o excepcionalmente inundables (inundaciones solo durante las más grandes crecientes).
Descripción del perfil típico:
El perfil tipo de esta Serie ha sido estudiado a 300 m al Sur del paraje homónimo, departamento Río Seco, provincia de Córdoba.
0-12 cm; color en húmedo (10YR3/3) pardo oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios débiles a moderados; friable en húmedo; ligeramente plástico; no adhesivo; moteados escasos medios y débiles; raíces muy abundantes; límite inferior claro, suave.
12 - 54 cm; color en húmedo (10YR3/4) pardo amarillento oscuro; franco a franco arcilloso; estructura en prismas irregulares medios moderados rompe a prismas y bloques; friable en húmedo; plástico; ligeramente adhesivo; barnices húmico arcillosos abundantes a escasos . medios; moteados de FeMn abundantes medios y precisos; raíces abundantes; límite inferior abrupto, suave.
54 - 82 cm; color en húmedo (10YR3/4) pardo amarillento oscuro; franco limoso; estructura en bloques irregulares medios débiles; friable en húmedo; ligeramente plástico; no adhesivo; violenta reacción al C1H en la masa del suelo; barnices arcillosos escasos y finos; abundantes eflorescencias salinas; raíces escasas a vestigios; límite inferior claro, suave.
82 cm a +; color en húmedo (7,5YR5/4) pardo; franco limoso; friable en húmedo; violenta reacción al C1H en la masa del suelo; nodulos cementados, seudomicelios salinos abundantes y cristales de yeso.
Los datos analíticos pertenecientes ai perfil deseripto se encuentran en el Cuadro N°24. Dentro de la Serie Pozo de la Olla se han encontrado variaciones con respecto al espesor del horizonte A2 de 10 a 17 cm. Es frecuente que el horizonte B2 sea divisible en B21 y B22 por la presencia de COsCa en este último.
Este suelo se lo encuentra solamente formando complejos de suelos en las unidades LRil, PzO, PzOly en LRí como suelos menores. Se puede identificar con cierta seguridad porque ocupa sectores relativamente más altos, muy poco inundables y cubierto por la vegetación de monte dominante con algunas halófitas subordinadas. Los suelos de la Serie Pozo de la Olla pertenecen a los Natracualf típicos (solonetz solodizado, solonchak con horizonte superior lixiviado e hidromórfico).
La Serie Pozo Verde es un suelo imperfectamente drenado con un horizonte superior erosionado y redepositado en forma de un pequeño enlame de pocos centímetros. Se ha desarrollado a partir de sedimentos finos de inundación, de textura franco limosa a franco arcillo limosa en las microáreas de inundación de los paleocauces en la planicie aluvial de La Rinconada.
Ocupa pequeños sectores más deprimidos en un microrelieve cóncavo diseminados entre las áreas más altas con vegetación de jume y cardón. Se puede identificar a esta Serie en los sectores totalmente desprovistos de vegetación (peladales). Es un suelo fuertemente salino alcalino desde la superficie con eflorescencias de sales solubles en todo el perfil.
Presenta un horizonte superior o enlame de 8 cm, franco limoso a franco arcillo limoso, extremadamente salino y alcalino con eflorescencias de sales solubles en superficie en épocas de sequía. Le sigue, luego de un límite abrupto, un horizonte más arcilloso (621 nátrico/sálico con 81% de sodio de intercambio) extremadamente alcalino y fuertemente salino (51,9 mmhos de conductividad en el extracto de saturación), tiene textura franco arcillo limosa con estructura en prismas finos fuertes que rompen a prismas y bloques cuneiformes.
A 36 cm comienza un horizonte con menor contenido de arcilla (Basa) con idénticas o mayores limitaciones. Se suelen observar lentes con estructura laminar como relicto del material originario que comienza a 63 cm (horizonte C) textura franco limosa a franco arcillo limosa, estructura masiva a laminar con cristales de yeso y síntomas de gleyzación. La capa freática se encuentra prácticamente al comienzo del material originario.
Descripción del perfil típico:
El perfil tipo que representa a los suelos de esta Serie ha sido estudiado a 8 Km. al Oeste de El Zapallar, departamento Río Seco, provincia de Córdoba.
0-8 cm; color en húmedo (10 YR3/2,5) pardo amarillento oscuro a pardo oscuro; franco limoso a franco arcillo limoso; estructura laminar media moderada; friable en húmedo; plástico; ligeramente adhesivo; moteado comunes medios y precisos; raíces vestigios; eflorescencias salinas en superficie; límite inferior abrupto, ondulado.
8-36 cm; color en húmedo pardo amarillento oscuro a pardo oscuro; franco arcillo limoso a franco arcilloso; estructura en prismas irregulares medios y finos fuertes; rompe a prismas y bloques cuneiformes; ligeramente firme en húmedo; muy plástico; muy adhesivo; concreciones de COsCa escasas y finas; barnices húmico arcillosos muy abundantes y medios; vestigios de raíces; pseudomicelios salinos muy abundantes; límite inferior abrupto, suave. .
36-63; color en húmedo (10YR4/3) pardo a pardo oscuro; textura al tacto franco arcillo limosa; estructura en prismas irregulares medios moderados rompe a prismas y bloques (se observan sectores con estructura laminar fina); friable en húmedo; muy plástico; adhesivo; concreciones de carbonato de calcio escasas y finas; barnices arcillosos abundantes a escasos medios; pseudomicelios salinos; nodulos cementados y cristales de yeso; límite inferior gradual.
63 cm a +; color en húmedo pardo a pardo oscuro (7,5YR4/4); franco limoso a franco arcillo limoso; estructura masiva con tendencia laminar; friable; plástico; ligeramente adhesivo; débil reacción al C1H en la masa del suelo; moteados comunes medios y sobresalientes; cristales de yeso; la capa freática se encuentra a 70 cm.
Los datos analíticos del perfil descripto se encuentran en el Cuadro N°25. Los suelos de la Serie Pozo Verde pueden tener variaciones con respecto al espesor del enlame (de 3 a 9 cm). En algunos perfiles se describen como capas los horizontes Basa ó C en los casos que la edafización no haya modificado la estratificación original de estos materiales fluviales.
Por otra parte, las condiciones de lixiviación, erosión parcial y redeposición del horizonte superior se dan en la mayoría de los perfiles estudiados. La extrema salinidad, alcalinidad y drenaje deficiente es una constante para todos los casos. En este sentido las limitaciones son de tal magnitud que no permiten el crecimiento de ningún vegetal aún los más resistentes.
Siempre se encuentra formando complejos de suelos en la planicie aluvial de La Rinconada y áreas de transición (ESi3, LRi, LRil y PzO) vinculada con las Series La Rinconada, Los Aibales, El Zapallar, Pozo de la Olla y La Angelita. La Serie Pozo Verde se clasifica como un Natracualf típico (solonetz solonchack hidromórfico). Presenta una fase muy inundable (ESi4).
La Serie Rayo Cortado es un suelo oscuro inclusive subsuperficialmente, profundo y bien drenado con carbonato de calcio pulverulento a partir de 20 cm aumentando a mayor profundidad. Ocupa los planos fluviales del flanco oriental de la Sierra Norte de Córdoba.
El horizonte superior (AI) tiene 21 cm de espesor, de color pardo grisáceo muy oscuro, franco limoso, estructura en bloques subangulares medios moderados y granular y rico en materia orgánica. El horizonte desarrollado subsuperficialmente es franco limoso con estructura en bloques subangulares y prismas moderados con . carbonato de calcio en la masa del suelo.
La transición al material originario (Baca) tiene COaCa en mayor proporción, franco limoso y estructura en bloques débiles; se extiende hasta el metro de profundidad. Presenta arenas gruesas y gravas en todo el perfil: es un suelo bien drenado sin salinidad ni alcalinidad en ningún horizonte.
Descripción del perfil típico:
El perfil tipo de la Serie Rayo Cortado se encuentra ubicado a pocos Km. al Norte de la localidad de El Rodeo, entre los departamentos Río Seco y Tulumba, provincia de Córdoba.
0-21 cm; color en húmedo (10YR3/2) pardo grisáceo muy oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios moderados; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; pH 7,8; moderada a débil reacción al C1H en la masa del suelo; raíces muy abundantes; límite inferior claro, suave.
21 - 46 cm; color en húmedo (10YR3/2,5) pardo grisáceo muy oscuro a pardo oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios, débiles y prismas moderados que rompen a bloques; ligeramente duro en seco; friable en húmedo; ligeramente plástico; ligeramente adhesivo; pH 7,9; violenta reacción al C1H en la masa del suelo; barnices húmico arcillosos; raíces comunes; límite inferior gradual, suave.
46 - 100 cm; color en húmedo (10YR3/3,5) pardo oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares débiles; ligeramente duro; ligeramente plástico; no adhesivo; pH 8,2; barnices arcillosos escasos; raíces escasas a vestigios; límite inferior gradual.
100 cm a +; color en húmedo (10YR3/4) pardo amarillento oscuro; franco limoso a franco; masivo; ligeramente duro en seco; ligeramente plástico; pH 8,2; violenta a moderada reacción al OH en la masa del suelo.
Los datos analíticos que pertenecen a esta Serie se encuentran en el Cuadro N°26. Por ser un material originario formado por arrastre de corrientes fluviales de pié de monte, puede presentar algunas variantes en las proporciones de las arenas sin observarse límites abruptos.
Por lo general en el AI y B3 hay arenas más gruesas que en el resto del perfil y es común la presencia de gravilla. Los suelos de esta Serie pertenecen a los Haplustoles páquicos e integran solamente una asociación (ERo) con la Serie El Rodeo, Sebastián Elcano y suelos con capas arenosas.
La Serie San Francisco del Chañar I es un suelo bien drenado, desarrollado débilmente a partir de sedimentos profundos de loess de textura franco arcillo limosa a franco limosa. Está en la actualidad cubierto parcialmente por una vegetación natural de pastizales y monte serrano con palma, muy característica de la meseta homónima. Se encuentra en sectores moderadamente ondulados con gradientes que pueden llegar al 8%.
Los primeros 22 cm tienen una textura franco arcillo limosa a franco limosa de color oscuro, estructura en bloques con 29% de arcilla y 11% de carbonato de calcio libre en la masa del suelo. Continúa hacia abajo un horizonte de transición de textura franca, estructura en bloques débiles y reacción al HCL El material originario se encuentra a 46 cm de profundidad, de color pardo amarillento con mas del 15% de carbonatos libres (horizonte cálcico) en la masa del suelo.
Estos suelos son aptos para la implantación de pasturas o como campos naturales de pastoreo. Sus limitantes son, el clima, pH moderadamente alcalino y fertilidad química. Este suelo normalmente se encuentra asociado a la serie Santa Cruz, cuando la pendiente es próxima al 7% la tosca se encuentra dentro del metro de la superficie.
Descripción del perfil típico:
Un perfil representativo fue descripto a 2 Km. al Este de San Francisco del Chañar, en el departamento Sobremonte, provincia de Córdoba.
0-22 cm; color en húmedo (10YR3/2) pardo. grisáceo muy oscuro; franco arcilloso a franco arcillo limoso; estructura en bloques subangulares medios moderados; friable en húmedo; ligeramente plástico, ligeramente adhesivo, pH 8,3; raíces abundantes; violenta reacción al C1H en la masa del suelo; límite inferior suave.
22 - 46 cm; color en húmedo (10YR3/3) pardo oscuro; franco; estructura en bloques débiles, tendencia masiva; friable en húmedo; ligeramente plástico, ligeramente adhesivo, pH 7,9; concreciones de COaCa escasas; moderada reacción al C1H en la masa del suelo; raíces escasas; límite inferior claro, suave.
46 cm a +; color en húmedo (7,5YR5/4) pardo; franco arcilloso a franco arcillo limoso; masivo; muy friable en húmedo; ligeramente plástico, ligeramente adhesivo; pH 8,5; concreciones de COaCa abundantes; vestigios de raices.
En los perfiles pertenecientes a esta Serie se han observado variaciones en la profundidad a la que aparece el horizonte Cea (30 - 70 cm).
La Serie San Francisco del Chañar I se clasifica como un Calciustol típico y la aptitud para el uso de las unidades que integra se consignan en el capítulo 4. Los datos analíticos del perfil típico se encuentran en el Cuadro N°27.
Este suelo es bien drenado, débilmente desarrollado sobre sedimentos eólicos profundos redepositados de textura franca, en la meseta homónima en la Sierra Norte de Córdoba. Ocupa relieves de lomas suavemente onduladas y es el de mejor aptitud de la región. Las limitantes son esencialmente climáticas y ligera susceptibilidad a la erosión hídrica.
Presenta un horizonte superior o capa arable de 21 cm de espesor, de textura franco limosa, estructura en bloques, color oscuro. Sigue hacia abajo un horizonte de transición AC con moderada reacción al OH en la masa del suelo, estructura en bloques débiles de color algo mas claro, que se extiende hasta 42 cm. El material originario del suelo es masivo, tiene textura franca y se extiende hasta mas de 70 cm. Por debajo del metro puede aparecer cementación parcial por calcáreo libre.
Descripción del perfil típico:
Un perfil representativo de este suelo fue descripto a 11 Km. al Sur de San Francisco del Chañar, en el departamento Sobremonte, provincia de Córdoba.
0-21 cm; color en húmedo (10YR3/2) pardo grisáceo muy oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios moderados; friable en húmedo; ligeramente plástico, no adhesivo, pH 7,2; raíces comunes; límite inferior claro, suave.
21 - 42 cm; color en húmedo (10YR3/4) pardo grisáceo; franco arcillo limoso a franco; estructura en bloques débiles a masiva; friable en húmedo; ligeramente plástico, ligeramente adhesivo, pH 7,8; moderada reacción al C1H en la masa del suelo; concreciones de C03Ca comunes; ralees escasas; límite inferior gradual.
42 cm a +; color en húmedo (10YR3/4) pardo amarillento oscuro; franco; masivo; pH 7,8; violenta reacción al C1H en la masa del suelo; abundantes concreciones de COaCa.
La Serie San Francisco del Chañar II se clasifica como un Haplustol éntico y la aptitud para el uso de las unidades que integra se consignan en el capítulo 4. Los datos analíticos del perfil típico se encuentran en el Cuadro N°28.
Este suelo es algo excesivamente drenado, desarrollado sobre sedimentos eólicos de textura franco limosa a franco arcillo limosa, en los sectores de lomas onduladas y pendientes de la meseta de San Francisco del Chañar.
El horizonte superior, de 24 cm de espesor es franco limoso, con estructura en bloques subangulares moderados, de color oscuro, con 4,9% de CO3C& libre y 1,3% de materia orgánica. Sigue hacia abajo un horizonte algo mas claro, de textura franco arcillo limosa a franco limosa con 9,3% de carbonates libres. A una profundidad de 40 cm continua un horizonte cementado (Ccam) con carbonato de calcio, duro en seco y húmedo, quebradizo, difícilmente penetrable con herramientas manuales y raíces. Este suelo se encuentra limitado por profundidad efectiva, clima, fertilidad natural y susceptibilidad a la erosión hídrica.
Descripción del perfil típico:
Un perfil representativo de este suelo fue descripto a 4 Km. al Este de San Francisco del Chañar, en el departamento Sobremonte, provincia de Córdoba.
0-24 cm; color en húmedo (10YR3/2) pardo grisáceo muy oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios moderados; friable en húmedo; ligeramente plástico, ligeramente adhesivo, pH 7,7; violenta reacción al C1H en la masa del suelo, raíces comunes; límite inferior claro.
24 - 40 cm; color en húmedo (10YR3/3) pardo grisáceo oscuro; franco arcillo limoso a franco limoso; estructura en bloques débiles a masiva; friable en húmedo; ligeramente plástico, ligeramente adhesivo, pH 7,7; violenta reacción al C1H en la masa del suelo; vestigios de raíces; límite inferior abrupto.
Horizonte petrocálcico quebradizo, compacto y en lentes.
La Serie San Francisco del Chañar III se clasifica como un Calciustol petrocálcico y la aptitud para el uso de las unidades que integra se consignan en el capítulo 4. Los datos analíticos del perfil típico se encuentran en el Cuadro N°29.
Es un suelo débilmente desarrollado sobre materiales' franco limosos de origen fluvial, típico de las unidades de pié de monte en el plano oriental de la Sierra Norte de Córdoba (abanicos aluviales, conos y planicies de derrames).
El primer horizonte, de 23 cm, tiene textura franco limosa con estructura en bloques subangulares medios débiles. Luego de una transición (AC) el sustrato (horizonte C) se encuentra a 59 cm, es franco limoso, sin estructura, tiene arena gruesa en todo el perfil pero no dominante. No tiene alcalinidad ni salinidad en ningún horizonte. Es un suelo profundo, bien drenado y sin peligro de anegamiento.
Descripción del perfil típico:
El perfil característico de los suelos de la Serie San Pedro ha sido estudiado a 8*5 Km. al SO de la localidad de Gutemberg, en el departamento Río Seco* provincia de Córdoba»
0-23 cm; color en húmedo (10YR3/3) pardo oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios débiles; friable en húmedo; pH 6,7; raíces abundantes; límite inferior claro, suave.
23 - 59 cm; color en húmedo (10YR4/3) pardo a pardo oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios débiles, tendencia masiva; friable en húmedo; pH 7,4; raíces comunes; límite inferior abrupto, suave.
59 cm a +; color en húmedo (10YR4/4) pardo amarillento oscuro; franco limoso; masivo; friable en húmedo; pH 8,3; violenta reacción al C1H en la masa del suelo.
Los datos analíticos del perfil típico se encuentran en el Cuadro N°30. Dentro de la Serie San Pedro, existen pequeñas variaciones en cuanto al espesor de horizontes, de no más de 6 cm, y ligeras variaciones en el tenor de las arenas medias y gruesas.
Esta Serie no aparece mapeada como unidad pura sino que se encuentra en unidades compuestas como en interfiuvios (SEc7, LHyl y LSci), conos aluviales (SPd en fase inclinada y erosionada) y abanicos aluviales (ERol en pendientes suaves y largas). La Serie San Pedro se clasifica como Haplustol éntico (suelos castaños con incipiente desarrollo).
La Serie Santa Cruz es un suelo excesivamente drenado, desarrollado incipientemente sobre rocas graníticas de la Sierra Norte de Córdoba. Se encuentra vinculado a “cerrillos” o “mogotes” dentro o adyacente a la meseta de San Francisco del Chañar.
El horizonte superior es muy somero, de 10 cm de espesor; de color pardo grisáceo muy oscuro* de textura franco arenosa gruesa y estructura en bloques con leve reacción al HC1 en la masa del suelo. Continúa hacia abajo - un horizonte endurecido por material calcáreo (tosca, horizonte petrocálcico), quebradizo, duro en húmedo y seco penetrable parcialmente por las raíces. Por debajo, se encuentra la roca granítica parcialmente alterada con reacción al HC1.
Sus limitantes son, la profundidad efectiva, las texturas gruesas y gravillosas, clima, pendiente y alcalinidad moderada por presencia de COaCa libre desde la superficie. La aptitud de uso es exclusivamente para campos de pastoreo sobre especies naturales.
Descripción del perfil típico:
El perfil tipo de la Serie Santa Cruz fue descripta a 2 Km. de Santa Cruz, departamento Tulumba, en el ME de la provincia de Córdoba.
0-10 cm; color en húmedo (10YR3/2) pardo grisáceo muy oscuro; franco arenoso gravilloso; estructura en bloques débiles; friable en húmedo; no plástico; no adhesivo; pH 8,3; leve reacción al HC1 en la masa del suelo, raíces comunes; límite inferior abrupto.
l0 - 22 cm aproximadamente; horizonte petrocálcico en lentes, quebradizo y compacto.
22 cm a +; roca granítica alterada.
La Serie Santa Cruz se clasifica como un Ustorthent petrocálcico paralítico y la aptitud para el uso de las unidades que integra se consignan en el capítulo 4. Los datos analíticos que pertenecen a este suelo se encuentran en el Cuadro N°31.
La Serie Sebastián Elcano es un suelo de incipiente desarrollo sobre materiales franco limosos de origen eólico (loess), propia de lomas suavemente onduladas. Se la incluye también en áreas planas que han sido afectadas por derrames parciales que no pueden diferenciarse por razones de escala. Es el suelo que tiene la mayor difusión en toda el área de trabajo.
Es bien drenado, sin limitaciones, a excepción de una ligera alcalinidad o salinidad en profundidad, próxima al metro, que no afectan el normal desarrollo de las raíces, fertilidad y retención de humedad moderada. Presenta fases por alcalinidad y/o salinidad a partir de 50 cm.
En superficie es de textura franco limosa con valores altos de limo dentro de esta clase textural, color pardo grisáceo muy oscuro en húmedo y estructura en bloques subangulares medios moderados.
Luego de una transición que se extiende desde 18 cm hasta 49 cm aparece el material originario (Cca) con carbonates libres en la masa del suelo, textura franco limosa sin sales o álcalis en cantidades nocivas salvo a mayor profundidad.
Descripción del perfil típico:
El perfil tipo de la Serie Sebastián Elcano fue descripto a 8,8 Km. al Sur de la localidad homónima, departamento Río Seco, provincia de Córdoba.
0-18 cm; color en húmedo (10YR3/2) pardo grisáceo muy oscuro; franco limoso; estructura en bloques subangulares medios moderados; friable en húmedo; ligeramente plástico; no adhesivo; pH 7,1; raíces muy abundantes; límite inferior claro, suave.
18 - 49 cm; color en húmedo (10YR3/3,5) pardo oscuro; franco limoso; estructura masiva con tendencia a bloques débiles; friable en húmedo; ligeramente plástico; no adhesivo; pH 7,3; raíces abundantes; límite inferior abrupto, suave.
49 cm a +; color en húmedo(7,5YR4/4) pardo a pardo oscuro; franco limoso; masivo; friable; ligeramente plástico; no adhesivo; pH 8,3; moderada a violenta reacción al C1H; raíces escasas.
Los datos analíticos que pertenecen a este suelo se encuentran en el Cuadro N°32. Algunos perfiles de esta Serie pueden presentar ligera alcalinidad o salinidad a 90 cm aproximadamente o a menor profundidad; con estos fenómenos más acentuados fue necesario crear las fases correspondientes.
Otra variación de interés es la profundidad en la cual se encuentra el CChCa que varía entre los 35 a 70 cm; esta variación se ha observado en muchos perfiles. Este suelo se clasifica dentro de los Haplustoles énticos (suelos castaños con débil desarrollo).
5.25.1. Serie Sebastián Elcano, fase moderadamente alcalina en profundidad
Se encuentra siempre formando complejos de suelos en SEc5, lomas planas y en lomas onduladas (SEc3, SEc5 y SEc6) asociado con la Serie Las Arrias.
5.25.2. Serie Sebastián Elcano, fase ligeramente inclinada
Se encuentra en la unidad SEc6 y SEc8 como en el caso anterior.
- A - B - C - D - E - F - G - H - I - J - K - L - M - N - Ñ- O - P - Q - R - S - T - U - V - W - X - Y - Z -
Acidez (del suelo): ver pH del suelo.
Acualf: Suborden taxonómico de los Alfisoles (ver) que se caracterizan por estar estacionalmente saturados con agua por períodos prolongados y asociados generalmente con una capa de agua freática fluctuante y cercana a la superficie. Las condiciones reductoras y la falta de oxigenación que afecta cíclicamente la zona de crecimiento radicular, quedan evidenciados en el perfil por coloraciones grisáceas y por la presencia de moteados de hierro. Cuando la freática se encuentra en profundidad, las condiciones de saturación con agua pueden ser consecuencia de la baja conductividad hidráulica del horizonte de acumulación de arcilla, que restringe el movimiento del agua hacia abajo. Normalmente los Acualfes se encuentran en áreas planas o cóncavas que sufren encharcamientos durante las épocas de lluvias dado el escaso escurrimiento superficial y el aporte de escorrentías de sectores vecinos más elevados.
Acuent: Suborden taxonómico de los Entisoles (ver). Son suelos de ambientes casi permanentemente saturados con agua (ver régimen ácuico), las coloraciones son grisáceas neutras con moteados. Comúnmente soportan una vegetación tolerante a los excesos de humedad.
Ácuico: (1) régimen de humedad: bajo este régimen los suelos están saturados por períodos suficientemente prolongados como para que existan condiciones de reducción. Los colores neutros y los moteados son indicativos de esta condición. (2): adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que presenta condiciones de exceso de humedad y drenaje pobre, cuando el concepto típico del Gran Grupo corresponde a condiciones de drenaje libre.
Acumulación (fase): depositación no mayor de 20 cm de material edáfico erosionado por acción del viento o del agua sobre un suelo natural. En el caso de erosión eólica corresponde al material arenoso transportado por rodamiento o saltación.
Acuol: Suborden taxonómico de los Molisoles (ver), típicos de las áreas saturadas con agua por largos períodos. El agua que se infiltra alimenta la capa freática, la cual fluctúa estacionalmente afectando el perfil y confiriéndole caracteres hidromórficos. El uso de estos suelos está restringido por las deficiencias en el drenaje.
Aérico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo extragrado que presenta condiciones de drenaje mejores que las que son típicas del Gran Grupo.
Agregados (de la estructura del suelo): ver estructura.
Albacualf: Gran Grupo taxonómico de los Acualfes (ver) que se caracterizan por la presencia de un horizonte fuertemente lavado (ver álbico) y decolorado, cuyo contenido en arcillas es marcadamente inferior al del horizonte subyacente. Entre ambos hay un cambio en la textura muy abrupto: la baja permeabilidad del horizonte iluvial genera las condiciones de saturación con agua por encima del mismo, durante períodos de tiempo considerables.
Álbico: horizonte de coloración clara como consecuencia de un proceso de lavado o eluviación.
Albol: Suborden taxonómico de los Molisoles (ver) que presentan un horizonte lavado, decolorado y empobrecido en nutrientes (ver álbico) como consecuencia de las fluctuaciones del agua que satura el suelo cíclicamente. Ocupan partes planas o cóncavas.
Alcalinidad (del suelo): ver pH del suelo.
Alfisol: Orden taxonómico que se caracteriza por presentar un horizonte subsuperficial de enriquecimiento secundario de arcillas, desarrollado en condiciones tanto de acidez como de alcalinidad sódica y asociado con un horizonte superficial (ver epipedón) de color claro, pobre en materia orgánica o de poco espesor. Son suelos altamente saturados con bases en todo el perfil.
Arcilla: partículas minerales del suelo de tamaño inferior a 2 micrones (0,002 mm).
Arcillosa: ver textura del suelo.
Arena: partículas minerales del suelo de un diámetro superior a 50 micrones (0,05 mm) y no mayor a 2 milímetros.
Arenosa: ver textura del suelo.
Argiácuico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que combina la ocurrencia de un horizonte B bien desarrollado (ver argílico) y drenaje pobre (ver ácuico) en aquellos Grandes Grupos que normalmente no lo poseen.
Argiacuol: Gran Grupo taxonómico de los Acuoles (ver) que tienen un horizonte enriquecido de arcilla (ver argílico).
Argialbol: Gran Grupo taxonómico de los Alboles (ver) en los cuales el horizonte álbico pasa hacia abajo a un horizonte enriquecido en arcillas (ver argílico).
Argílico: horizonte subsuperficial de acumulación de arcilla iluvial, posee por lo menos 1,2 veces más arcilla que el horizonte eluvial suprayacente. En general, se corresponde con los horizontes B en los cuales son evidentes los barnices arcillosos y tienen un espesor de por lo menos 15 cm.
Argiudol: Gran Grupo taxonómico de los Udoles (ver) que tienen un horizonte enriquecido en arcilla iluvial (ver argílico) no demasiado espeso, cuyo contenido de arcilla decrece rápidamente con la profundidad. Típicamente el horizonte superficial es casi negro y el horizonte argílico, parduzco. Debajo puede haber un horizonte rico en carbonato de calcio. En la región pampeana, estos suelos se han desarrollado sobre sedimentos loéssicos.
Argiustol: Gran Grupo taxonómico de los Ustoles (ver) que presentan debajo del horizonte superficial oscuro (ver epipedón mólico) un horizonte con enriquecimiento secundario en arcillas (ver argílico).
Asociación de suelos: unidad cartográfica compuesta por dos o más suelos que se asocian geográficamente según un patrón definido y en proporciones constantes. Por razones de escala, el mapa muestra esos suelos en una sola unidad, pero a una escala de detalle apropiada (mayor), los componentes edáficos de una asociación podrían mostrarse separadamente.
B textural: horizonte Bt (ver horizonte del suelo).
Balance hídrico: relación entre la cantidad de agua recibida por precipitación y las pérdidas de humedad debidas a la evapotranspiración en un área determinada. Cuando el balance es negativo (períodos de deficiencia), las plantas suelen sufrir por falta de agua. En los períodos de exceso el agua se infiltra alimentando las capas freáticas o drena hacia bañados o arroyos. Ver también evapotranspiración.
Barbecho: práctica que consiste en permitir un descanso durante toda o parte del año, pero con una cubierta protectora de residuos correspondientes al cultivo anterior. Este material recibe el impacto de las gotas de lluvia y reduce así su energía a un valor muy bajo. Al no perturbar el suelo y mantenerlo cubierto por los rastrojos, mejora la infiltración, aumenta la retención hídrica y disminuye la evaporación directa. También disminuye la velocidad del escurrimiento superficial y, consecuentemente, su capacidad de transporte.
Barnices: películas brillosas, generalmente formadas por arcilla y humus, que suelen revestir los agregados de los horizontes Bt de los suelos. La presencia de barnices se debe a la migración interna de esos materiales dentro del perfil.
Calciacuol: Gran Grupo taxonómico de los Acuoles (ver) que tienen dentro de los 40 cm un horizonte enriquecido en carbonato de calcio (ver horizonte cálcico).
Cálcico: horizonte de por lo menos 15 cm de espesor que presenta una acumulación secundaria de carbonatos de calcio o magnesio, que alcance al 15% de carbonato de calcio equivalente, y que esto signifique un 5% más de carbonato que el del nivel subyacente.
Cámbico: horizonte subsuperficial que presenta evidencias de trasformación pedogenética, pero no suficientes para calificar como un argílico. En general, son horizontes B en los cuales la relación de arcilla B/A no alcanza a 1,2.
Cambio textural abrupto: concepto usado en taxonomía que hace referencia a un salto abrupto (en una distancia vertical de 7 u 8 cm) en el contenido de arcilla entre un epipedón (ócrico o álbico) y un horizonte argílico subyacente. Si el epipedón tiene menos de 20% de arcilla, éste se duplica en el argílico, y si tiene más de 20%, el incremento absoluto supera el 20%.
Camellones: lomos anchos y bajos separados por surcos paralelos y poco profundos. Para construir camellones se debe arar, alomar o elevar de algún modo la superficie del terreno llano o suavemente inclinado (los surcos efectuados de esta manera no serán clasificados como “zanjas de drenaje”).
Propósito: reducir la erosión en tierras suavemente onduladas y mejorar las condiciones del drenaje superficial en tierras planas.
Canal derivador: canal nivelado o excavado a través de la pendiente con un camellón de soporte en el costado más bajo.
Propósito: derivar el exceso de agua hacia lugares donde se puede disponer de ella sin peligro.
Capa freática: nivel dentro del solum o en el substrato que se encuentra saturado con agua. Suele ascender o descender según que la época sea lluviosa o seca. A veces puede formarse una falsa capa freática apoyada sobre algún horizonte o capa impermeable del suelo.
Capacidad de intercambio: propiedad de ciertos materiales del suelo (arcilla, humus, etc.) de retener cationes por adsorción y de intercambiarlos. Se trata de un fenómeno físico-químico muy importante en la nutrición de las plantas.
Carta imagen: mapa de suelos impreso sobre una imagen satelital procesada digitalmente.
Cobertura: aplicación sobre la superficie del suelo de residuos de los cultivos.
Propósito: conservar la humedad, prevenir la compactación superficial o la formación de costras, reducir la escorrentía y la erosión, controlar las malezas y favorecer el desarrollo de una cubierta vegetal.
Color del suelo: características del material del suelo debidas a la reflexión de la luz sobre las partículas minerales o sus revestimientos. En las descripciones técnicas de los perfiles siempre se indica el color del material o de los barnices comparándolo con una carta patrón (Munsell Soil Color Chart) que designa los colores con un nombre y un símbolo de acuerdo con tres variables: matiz, luminosidad e intensidad. El color del suelo tiene importancia para su clasificación.
Complejo de suelos: unidad cartográfica compuesta por dos o más suelos que se asocian geográficamente según un patrón definido y en proporciones constantes. Este patrón es, sin embargo, suficientemente complejo e intrincado como para que aun a escalas de detalle, los suelos componentes no puedan mostrarse separadamente.
Concepto central: toda unidad taxonómica es creada con fines de clasificación para manejar más fácilmente el conjunto, a veces numeroso, de individuos de diversa naturaleza. Cada unidad taxonómica agrupa de esta manera a individuos que representan, con mayor aproximación, el concepto que se tiene de la misma. En cambio, otros individuos se alejan algo de ese concepto. Cuando se agrupan suelos para formar unidades de clasificación, ciertos individuos representan mejor los caracteres que se consideran esenciales para el conjunto o taxón. El suelo más representativo del conjunto, que ejemplifica mejor los caracteres más esenciales, se considera como "concepto central" del taxón. En la práctica, para documentar o ilustrar el concepto central con un perfil, se describe uno denominado "perfil típico" o "perfil tipo". El concepto central es más bien abstracto o hipotético; en cambio, el perfil típico es concreto.
Concreciones: formas debidas a concentraciones endurecidas de ciertos componentes del suelo; son a menudo esferoidales, mamelonadas o aperdigonadas. En los suelos pampeanos son comunes las concreciones calcáreas, (carbonato de calcio) vulgarmente llamadas por su forma "tosquillas" o "muñequitas de loess", y las de hierro y manganeso con aspecto de perdigones o municiones negras.
Consociación: unidad cartográfica compuesta por una sola Serie de suelos ampliamente dominante. En términos generales, una consociación puede aceptar hasta un 15% de inclusiones o impurezas de otros suelos.
Contacto lítico: límite entre el suelo y una capa continua de material subyacente de consistencia pétrea (dureza mayor de 3 en la escala Mohs).
Control de malezas: lucha contra las malezas por medios mecánicos, químicos, biológicos y culturales. Incluye los bordes de los caminos, vías férreas, etc.
Propósito: eliminar o reducir la competencia de las malezas frente a especies útiles para facilitar el restablecimiento de una cubierta vegetal aceptable para la protección del suelo, suministrar forraje o conservar la humedad.
Cubierta de residuos: manejo de los residuos vegetales (rastrojo) a lo largo de todo el año que actúan como una cubierta protectora que atenúa la presión ejercida sobre la superficie del suelo por los tractores y los equipos de cosecha, evitando así problemas de compactación.
Propósito: reducir las pérdidas de suelo causadas por el viento o el agua, mejorar la infiltración del agua y las condiciones físicas del suelo.
Cultivo de cobertura:Es un cultivo que se siembrancon el objetivo de mantener el suelo cubierto durante el período que de otra forma permanecería desnudo. Tiene valor por su efecto sobre la fertilidad del suelo y puede servir como forraje para el ganado.
Propósito: mejorar la estabilidad del sistema, no solo en cuanto a propiedades del suelo, sino también por su capacidad de promover una biodiversidad aumentada en el agroecosistema.
Cultivo de forrajeras (henificar, ensilar, etc.): implantación por un largo período de especies adaptadas de forrajeras perennes, bianuales o de resiembra espontánea en tierras dedicadas a otros usos.
Cultivo en curvas de nivel o cortando la pendiente: dirección de las labores agrícolas en tierras cultivadas inclinadas, de manera que los trabajos de arada, preparación de la sementera, siembra y cultivo se efectúen en curvas de nivel o cortando la pendiente principal.
Propósito: reducir la erosión y ayudar a controlar y mejorar el aprovechamiento del agua.
Cultivo en franjas de nivel (de contorno o contorneadas): implantación de cultivos dispuestos simultáneamente en franjas o fajas siguiendo las curvas de nivel para reducir la erosión hídrica. Los cultivos se disponen de modo tal que una franja de pastura o cultivo agrícola denso se alterne con otra franja de cultivos de escarda o un barbecho.
Propósito: ayudar a controlar la erosión y el escurrimiento superficial en tierras de cultivo y donde esta práctica en contorno sea factible.
Cultivos en franjas rectas: implantación de cultivos en disposición sistemática de franjas o fajas cruzando aproximadamente la pendiente general para reducir la erosión hídrica. Los cultivos se disponen de manera que una franja de pastura o cultivo denso se alterne con una de cultivo de escarda o un barbecho.
Propósito: ayudar a controlar la erosión y el escurrimiento superficial en tierras de cultivo o donde el "cultivo en franjas de nivel" no resulte práctico o no sea factible.
Cumúlico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo extragrado en el cual hay un marcado engrosamiento del horizonte superficial por acumulación de material transportado desde posiciones altas del relieve.
Curvas de nivel: líneas imaginarias sobre la superficie del terreno que unen puntos de igual altura. El conjunto de curvas de nivel dibujadas sobre el plano del campo indica la topografía del mismo.
Desagüe vegetado o praderizado: implantación de vegetación adecuada en un curso natural de agua o en un desagüe perfilado o nivelado que encauce sin peligro el escurrimiento superficial. Se aplica en lugares donde el agua proveniente del escurrimiento superficial concentrado debe ser eliminada a velocidades no peligrosas.
Propósito: prevenir pérdidas excesivas de suelo y formación de cárcavas.
Drenaje (del suelo): término que se refiere a la rapidez y facilidad con la que el agua es eliminada del suelo en su estado natural, tanto por escurrimiento superficial como por infiltración hacia la capa freática. El desagüe artificial por medio de zanjas, canales, y/o bombeo del agua suele mejorar la condición del drenaje natural del suelo. Se distinguen siete clases de drenaje natural.
Suelo muy pobremente drenado o mal drenado: suelo en el que el agua se elimina tan lentamente que la capa freática permanece sobre o muy cerca de su superficie la mayor parte del tiempo. Estos suelos suelen ocupar las depresiones, los bajos y los planos aluviales semi-pantanosos y las charcas o manchones y lagunas temporarias. En su estado natural son tan húmedos que imposibilitan la realización de cultivos importantes si antes no se procede a drenarlos artificialmente, regular el nivel freático o trazar camellones.
Suelo pobremente drenado: suelo donde el agua escurre tan lentamente que lo mantiene húmedo gran parte del tiempo. Esto puede ser debido a un nivel freático alto y/o a un horizonte o capa de permeabilidad lenta a muy lenta y/o a infiltraciones. La cantidad de agua que permanece dentro y sobre estos suelos imposibilita el crecimiento de cultivos importantes en la mayoría de los años bajo condiciones naturales. Para mejorar estos suelos es necesario un drenaje artificial, aunque no es siempre suficiente para convertirlos en tierras de cultivo.
Suelo imperfectamente drenado: suelo en el que el agua se elimina con cierta lentitud, suele mantenerse húmedo por lapsos importantes. Por lo general, este suelo tiene algún horizonte de permeabilidad lenta y/o una capa freática relativamente alta y/o sufre de infiltraciones. En áreas de praderas, los suelos de esta clase suelen tener horizontes “A” oscuros y espesos, con leves a moderados síntomas de hidromorfismo inmediatamente por debajo del horizonte “A”. En suelos planosólicos, la base del horizonte “A” puede aparecer débilmente moteada. Por lo general, el crecimiento de varios cultivos de importancia se ve restringido si no se aplica drenaje artificial.
Suelo moderadamente bien drenado: suelo donde el agua se elimina con alguna lentitud, por lo cual puede mantenerse mojado por pequeños pero significativos lapsos. Suele tener algún horizonte o capa dentro del solum de permeabilidad moderadamente lenta y/o cierta infiltración. Los suelos de esta clase suelen presentar algunos moteados en los horizontes “B” o “C”. Los cultivos perennes y con raíces profundas pueden sufrir algo con el exceso temporario de humedad, pero los anuales de enraizamiento poco profundo no se ven afectados significativamente. El nivel freático es normalmente profundo, pero puede ascender en los períodos lluviosos hasta llegar a la base del solum.
Suelo bien drenado: es el suelo que presenta las condiciones óptimas de drenaje natural. Por una parte, después de las lluvias o el riego, retiene una cantidad óptima de agua para el crecimiento de los cultivos y, por otra, el exceso de agua se retira con facilidad, pero no con rapidez. Son suelos de texturas no extremas, con algún horizonte de permeabilidad moderada; están libres de moteados u otros síntomas de hidromorfismo dentro del solum.
Suelo algo excesivamente drenado: suelo en el que el agua se retira con rapidez, y tiene una capacidad de retención de humedad algo deficiente como para asegurar un buen crecimiento de los cultivos importantes sin riego adicional. Por lo general, es arenoso, con poca diferenciación de horizontes y permeabilidad rápida o moderadamente rápida. El suelo no muestra moteados ni nivel freático cercano a la superficie. Solo determinados cultivos soportan un suelo algo excesivamente drenado (maní y citrus). Comúnmente los rendimientos son bajos si no se aplica riego suplementario.
Suelo excesivamente drenado: suelo donde el agua se retira con demasiada rapidez debido a su alta porosidad y/o a ser escarpado; es decir, por presentar permeabilidad rápida o muy rápida y/o escurrimiento muy rápido. Prácticamente no retiene humedad; la mayor parte de las precipitaciones se pierden. Por lo tanto, resulta no apto para los cultivos comunes si no se aplica riego.
Drenes verticales: pozos, caños, hoyos o agujeros barrenados hasta un estrato poroso subyacente dentro del cual puede descargarse el agua de drenaje. Algunas veces se los designa "pozos de drenaje o de infiltración".
Duracuol: Gran Grupo taxonómico de los Acuoles (ver) con un horizonte fuertemente cementado (ver duripán).
Duripán: horizonte o capa del suelo endurecida irreversible. Generalmente, consiste en una cementación de las partículas por sílice o un silicato de aluminio.
Edáfico: perteneciente al suelo.
Edafología: ciencia del suelo.
Éntico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que intergrada hacia el Orden de los Entisoles que se caracterizan por no evidenciar o tener escaso desarrollo de horizontes pedogenéticos.
Entisol: Orden taxonómico que se caracteriza por no evidenciar o tener escaso desarrollo de horizontes pedogenéticos. La mayoría poseen solamente un horizonte superficial claro, de poco espesor, y relativamente pobre en materia orgánica (ver epipedón ócrico). Normalmente no se presentan otros horizontes diagnósticos, lo que se debe en gran parte al escaso tiempo transcurrido desde la acumulación de los materiales parentales e iniciación de los procesos pedogénicos. También pueden incluir horizontes enterrados, siempre que se encuentren a más de 50 cm de profundidad.
Epipedón: La parte superior del suelo. No es sinónimo de horizonte “A”, ya que puede ser mayor o menor que éste.
Erosión: remoción y transporte del material de la superficie del suelo. Si es causada por la escorrentía del agua se denomina erosión hídrica y erosión eólica si es causada por el viento. Según el grado o intensidad del fenómeno se distinguen seis clases de suelos:
1) sin erosión, 2) con erosión ligera, 3) con erosión moderada, 4) con erosión severa, 5) con erosión grave y 6) con erosión muy grave. El proceso de erosión comprende la remoción, el transporte y la acumulación o sedimentación del material removido.
Escorrentía o escurrimiento: eliminación del agua que corre sobre la superficie del suelo. La facilidad del escurrimiento superficial está íntimamente relacionada con el relieve y la pendiente del lugar.
Establecimiento de pasturas: establecimiento de una población de forrajeras de larga duración (perennes, bianuales o de resiembra espontánea).
Propósito: regular el uso del suelo, producir forraje de calidad, recuperar tierras erosionadas, mantener o mejorar la productividad del suelo.
Estructura (del suelo): agrupación de partículas primarias en otras compuestas o en cuerpos naturales individualizados que se denominan agregados. La estructura confiere al suelo características muy diferentes de las que posee la misma masa sin estructurar. La estructura se distingue por la forma, el tamaño y la coherencia de los agregados. Con respecto a la forma, se diferencian los siguientes tipos de estructuras:
- migajosa, semi-migajosa y granular.
- bloques (angulares, subangulares, aplanados, etc.).
- prismática, semi-columnar o columnar.
- laminar.
Los horizontes sin estructura se denominan "masivos" cuando forman una masa coherente y en "grano simple" cuando la masa no tiene coherencia. Por su tamaño, los agregados se describen como muy finos, finos, medios, gruesos y muy gruesos; por la cohesión, se describen como débiles, moderados y fuertes.
Evapotranspiración: concepto que expresa la suma de la cantidad de agua evaporada directamente de la superficie del suelo más la transpirada por la vegetación que la cubre. Se mide en milímetros de agua por unidad de tiempo (día, mes, año). Según el grado de cobertura del suelo y la disponibilidad de agua se distingue:
Evapotranspiración potencial: cantidad máxima de agua que, en forma combinada, puede evaporar el suelo y transpirar las plantas de un lugar bajo las condiciones climáticas existentes, estando el suelo completamente cubierto de vegetación y provisto de agua en cantidad óptima.
Evapotranspiración real (o actual): cantidad de humedad que evapora el suelo y transpiran las plantas en forma combinada, de acuerdo con la cantidad de vegetación que lo cubre y con los niveles de agua disponibles en el período considerado.
Familia: categoría del sistema taxonómico en que se dividen los Subgrupos. Se establecen dentro de los Subgrupos sobre la base de características o propiedades físico-químicas que afectan el manejo. En general, son propiedades de horizontes que aparecen por debajo de la profundidad de arada, donde hay intensa actividad biológica. Entre las características y propiedades tenidas en cuenta están las clases por tamaño de partícula, la composición mineral, el régimen de temperatura, la profundidad de la zona de enraizamiento, la consistencia, la humedad equivalente, la pendiente y el agrietamiento. El nombre de una Familia se forma con el nombre del Subgrupo al cual pertenece seguido de los términos que indican las propiedades. Por ejemplo: Argiudol típico, franca fina, mixta, térmica.
Fase del suelo: unidad cartográfica donde se señala alguna característica importante del suelo para su uso o manejo, como puede ser la erosión, la pedregosidad, la pendiente, el drenaje, el riesgo de inundación, etc.
Fertilización: acción de aplicar fertilizantes.
Fertilizante: sustancia o mezcla de sustancias que se aplican, sobre o en el interior del suelo, para estimular el crecimiento de las plantas, aumentar la productividad, mejorar la calidad de las cosechas o inducir en el suelo cambios favorables de orden físico, químico o biológico.
Fluvent: Suborden taxonómico de los Entisoles (ver) desarrollados sobre sedimentos relativamente recientes depositados por la dinámica del agua. Es normal observar en el perfil la estratificación de los materiales entre los que suelen alternar capas con diferentes contenidos de materia orgánica. Una característica común a todos los fluventes es la ausencia de rasgos hidromórficos, los cuales son típicos de suelos más mojados como los Acuentes.
Fluvéntico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo caracterizado por una sucesión de materiales de deposición fluvial. Suele ser evidente la estratificación en capas de diferente naturaleza.
Fotocarta: mapa de suelos impreso sobre la copia de un fotomosaico aéreo.
Fotomosaico: imagen fotográfica obtenida mediante la yuxtaposición y ensamble de fotografías aéreas.
Fragiacualf: Gran Grupo taxonómico de los Acualfes (ver) que se caracteriza por la presencia de un horizonte denso y quebradizo cuando húmedo, pero que se torna muy duro en seco (ver fragipán). Este horizonte representa un impedimento para el movimiento vertical del agua, por lo que el suelo se satura en épocas de lluvia, pudiendo asimismo representar un impedimento físico para el desarrollo de las raíces de las plantas, cuando se encuentra a poca profundidad.
Fragipán: capas del subsuelo con alta densidad y muy duras cuando secas, pero que se tornan quebradizas, aunque no blandas, cuando se humedecen.
Franca: ver textura del suelo.
Gran Grupo: categoría del sistema taxonómico en que se dividen los Subórdenes. Cada Suborden se divide en Grandes Grupos sobre la base de similitudes en el tipo, disposición y grado de desarrollo de los horizontes genéticos; de los regímenes de temperatura y humedad y del nivel de saturación con bases. Cada Gran Grupo se identifica con el nombre de un Suborden al que se le agrega un prefijo que indica la propiedad diferenciadora del suelo. Por ejemplo: Argiudol; en el cual Argi significa desarrollo diferencial de horizontes y udol es el nombre del Suborden de los Molisoles de climas húmedos.
Halófila: planta que vive normalmente en suelos salinos o con alcalinidad excesiva.
Haplacuent: Gran Grupo taxonómico de los Acuentes (ver), generalmente arcillosos y permanentemente saturados con agua, lo que no permite el desarrollo de horizontes genéticos. Debido a la humedad y la vegetación asociada, difícilmente pueden aprovecharse para pastoreo.
Haplacuol: Gran Grupo taxonómico de los Acuoles (ver) que típicamente presentan un horizonte “B” de escaso o mínimo desarrollo (ver cámbico).
Hapludol: Gran Grupo taxonómico de los Udoles (ver) que tienen generalmente debajo del horizonte superficial oscuro (ver epipedón mólico) un horizonte de alteración con ligero o moderado enriquecimiento en arcillas secundarias (ver horizonte cámbico). Suelen ser ricos en carbonatos de calcio, sobre todo si se los compara con los Argiudoles (ver).
Haplustol: Gran Grupo taxonómico de los Ustoles (ver) caracterizado por la ausencia de horizontes claramente diferenciados o bien desarrollados, aparte del horizonte superficial oscuro que caracteriza al Orden.
Helada: temperatura del aire de 0ºC o menos, medida al abrigo meteorológico a 1,50 m de altura sobre el suelo.
Número medio de días con heladas: temperatura que expresa el número de heladas que, término medio, ocurren en un lugar y en una unidad del tiempo (mes, estación, año). Se obtiene dividiendo la suma de las heladas que corresponden a una misma unidad de tiempo, por el número de años del período.
Fecha media de primera helada: promedio de las fechas de la primera helada producida durante el número de años considerado.
Fecha extrema de primera helada: fecha de la helada que se produjo más tempranamente (más cerca del comienzo del año) durante el período observado.
Fecha extrema de última helada: fecha de la helada que se produjo más tardíamente (más cerca de la finalización del año) durante el período observado.
Hidrófila: planta que vive normalmente en suelos con exceso de agua por mal drenaje o anegamiento periódico.
Hidromorfismo: proceso de formación de suelo bajo condiciones de exceso de humedad o con influencia del periódico ascenso de la capa freática. Los síntomas más comunes de hidromorfismo son: presencia de moteados, barnices muy oscuros, colores neutros (grises, verdosos o amarillentos) en el material del suelo, concreciones de hierro, manganeso, etc.
Horizontes del suelo: capas naturales del perfil del suelo, aproximadamente paralelas a la superficie, con rasgos distintos en cuanto a composición y propiedades. Cada horizonte ofrece determinadas características desarrolladas por la acción de procesos de formación que se utilizan para la clasificación del suelo. En las descripciones técnicas de perfiles se distinguen los horizontes siguientes:
Horizonte A: material mineral superficial de máxima acumulación de materia orgánica debido a la mayor concentración de elementos biológicos que posee. Se los designa comúnmente como tierra negra arable. Se caracteriza porque ciertos elementos son removidos, en solución o suspensión, por las aguas de infiltración. En algunos suelos pampeanos, este horizonte suele ser objeto de un lavado intensivo; el horizonte “A” puede comprender: “A” (con mayor contenido de materia orgánica), “E” (la parte más lavada) y “AB” (la parte inferior del “A”, transición hacia el horizonte “B”).
Horizonte B: material mineral donde se acumula la mayor parte de las sustancias removidas del horizonte “A” (arcilla y humus) y en el que se desarrolla generalmente una estructura prismática o en bloques. El sistema de clasificación de suelos utilizado en el levantamiento de la Carta de Suelos de la República Argentina denomina argílico al horizonte “B” cuyo tenor de arcilla supera en determinados porcentajes al tenor del horizonte “A” y se define como "Bt" o "B textural"; para texturas medias la relación entre dichos tenores es 1,2:1. El horizonte “BA” es la parte transicional entre el “A” y “B”. El horizonte “Bt” ofrece siempre las características más representativas del horizonte “B” y puede subdividirse en “Bt1”, “Bt2”, etc. El “BC” es la transición entre el “B” y el “C”.
Horizonte C: material mineral generalmente suelto, relativamente inalterado, no consolidado y sin estructura, situado por debajo del horizonte “B” o “A”. En muchos suelos de las lomadas pampeanas, el material del horizonte “C” está representado por el loess pampeano de textura franco limosa a areno franca según la subregión: es el material originario del solum.
Cuando las capas que se observan en un perfil no están formadas por procesos edáficos o genéticos sino por acumulación de sedimentos aluvionales, no se denominan "horizontes" sino simplemente "capas".
Interfluvio: área de tierras altas situada en la divisoria de aguas entre dos o más corrientes, especialmente cuando éstas corren aproximadamente paralelas.
Limo: partículas minerales del suelo cuyo diámetro está entre 2 y 50 micrones (0,002 - 0,050 mm) o entre 2 y 20 micrones (0,002 - 0,020 mm) según la escala que se adopte. La primera corresponde al sistema americano y la segunda al llamado "limo internacional" o escala de Atterberg. En esta publicación se utiliza el primero.
Limoso: ver textura del suelo.
Lítico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que se caracteriza por la presencia de un contacto lítico o manto de roca sólida y continua cercana a la superficie.
Lixiviar-lixiviado: (en edafología) acción y efecto del lavado por el agua de sustancias a través de los poros y las grietas del suelo produciendo el arrastre y migración interna de las sales, arcilla o humus.
Loess pampeano: sedimento de grano fino generalmente de textura franco limosa, transportado por los vientos del oeste desde las regiones cordilleranas y depositado en la región pampeana como una cobertura a veces de varios metros de espesor. Dado que posee un contenido de arcilla demasiado alto para constituir un verdadero "loess", muchas veces se habla de sedimento "loessoide" o "loéssico". Cuando tiene textura limosa se denomina "limo loessoide".
Manejo de pasturas para pastoreo y/o henificar, ensilar, etc.: tratamiento y uso apropiado de los campos para pastoreo o para corte.
Propósito: ayudar a proteger el suelo y reducir las pérdidas de agua; prolongar la vida útil de las especies forrajeras convenientes; mantener o mejorar la calidad y cantidad del forraje.
Mejoramiento de pasturas para pastoreo y/o para henificar, ensilar, etc.: reimplantación de las especies forrajeras existentes, establecer otras o mejorar las tierras mediante discado u otros procedimientos mecánicos.
Propósito: obtener rendimientos satisfactorios de forraje de alta calidad dando protección adecuada al suelo.
Mólico: (1) epipedón: horizonte superficial que cuando se mezclan los primeros 18 cm, contiene por lo menos 1% de materia orgánica. Además, es de color oscuro y presenta cierto grado de estructuración como para no ser masivo y duro; la saturación con bases es de por lo menos 50% y nunca está seco por más de tres meses al año. (2): adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que presenta un horizonte superficial oscuro y rico en materia orgánica (para Ordenes que normalmente no los poseen).
Molisol: Orden taxonómico que se caracteriza por suelos de colores oscuros, desarrollados bajo una cobertura vegetal integrada fundamentalmente por gramíneas, lo que los hace ricos en materia orgánica. Están bien estructurados en la superficie, lo que facilita el movimiento del agua y el aire. El calcio domina el complejo de intercambio facilitando la floculación de coloides y la buena estructuración. En general, son suelos que se trabajan fácilmente y de alta a moderada fertilidad.
Moteados: manchas en forma de lunares o "motas" de color y tamaño variable que pueden aparecer en los horizontes del suelo. La presencia de moteados se reconoce como un síntoma de falta de drenaje o de aireación del suelo, en cuyo caso predominan los de color rojizo sobre una matriz grisácea. En la descripción de los moteados se toma como referencia la abundancia, (escaso, comunes o abundantes), el tamaño (finos, medios o gruesos) y el contraste con el material que lo rodea (débiles, precisos o sobresalientes).
Natracualf: Gran Grupo taxonómico de los Acualfes (ver) que se caracteriza por un complejo de intercambio rico en cationes de sodio a nivel del horizonte iluvial de acumulación secundaria de arcillas (ver horizonte nátrico). Las malas condiciones físicas, derivadas de la dominancia del sodio, afectan el desarrollo radicular, la oxigenación de la atmósfera edáfica y el movimiento vertical del agua en el perfil.
Natracuol: Gran Grupo taxonómico de los Acuoles (ver) que tienen un elevado contenido de sodio de intercambio en el horizonte iluvial (ver argílico).
Natralbol: Gran Grupo taxonómico de los Alboles (ver) con un horizonte de enriquecimiento en arcilla en el cual el catión sodio domina el complejo de intercambio (ver nátrico).
Nátrico: (1) horizonte subsuperficial que reúne todas las condiciones de argílico y que además presenta una estructura fuertemente prismática o columnar y más del 15% del complejo de intercambio está dominado por sodio. (2) adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que intergrada a otro Gran Grupo con horizonte de enriquecimiento secundario de arcilla, y cuyo complejo de intercambio está dominado por el sodio.
Natrustol: Gran Grupo taxonómico de los Ustoles (ver) que presentan un horizonte de enriquecimiento secundario en arcillas en el cual el complejo de intercambio está dominado por el sodio (ver nátrico). Lo más común es encontrarlos en posiciones planas o cóncavas del paisaje.
Nódulos: concentraciones débilmente cementadas de material del suelo que se desgranan con álcalis concentrado después de tratadas con un ácido fuerte. Suelen aparecer como bochas de tamaño variable generalmente con cemento de sílice o de hierro. Cuando más del 30% del volumen de un horizonte son nódulos duros ("durinódulos") el horizonte se considera un duripán.
Ócrico: (ver epipedón) horizonte superficial de color claro, con menos del 1% de materia orgánica, o bien que es masivo y duro o está seco por períodos mayores a tres meses al año. Son horizontes superficiales que no alcanzan a reunir las condiciones para ser mólicos (ver).
Orden: categoría más alta del sistema taxonómico. Actualmente se reconocen once Órdenes; las diferencias entre los mismos reflejan los procesos dominantes de formación y la intensidad con que los mismos actuaron. Cada Orden se identifica con una palabra que termina con la sílaba sol. Un ejemplo es Molisol.
Orthent: Suborden taxonómico de los Entisoles (ver) formados típicamente en superficies recientes. Los horizontes diagnósticos están ausentes o han sido truncados.
Pastoreo apropiado (ordenación del pastoreo): pastoreo de pastizales naturales o de resiembra espontánea y tierras destinadas a la fauna, con una intensidad que permita tener una cubierta vegetal adecuada (receptividad apropiada).
Propósito: permitir la acumulación del mantillo y cubierta vegetal viva para asegurar la retención del suelo y conservación del agua. Aumentar la producción cuantitativa y cualitativa del forraje.
Pastoreo diferido: práctica que consiste en posponer periódicamente en alguna época de crecimiento anual, el pastoreo en las praderas por un lapso determinado.
Pastoreo rotativo diferido: sistema de apacentamiento donde una o más unidades de pastoreo descansan a intervalos planeados durante la estación de crecimiento de las plantas claves. Generalmente ninguna unidad se pastorea en la misma época en años sucesivos.
Pendiente: inclinación de la superficie del suelo. Se define por su gradiente, su forma y su longitud. En la región pampeana se distinguen cinco clases de pendientes de acuerdo a su gradiente: de 0 a 0,5% (llana), de 0 a 1% (plana a muy suavemente ondulada), de 1 a 3% (suave a moderadamente ondulada), de 3 a 10% (fuertemente ondulada o inclinada) y más de 10% (fuertemente inclinada o colinada), con respecto a la longitud se distinguen pendientes cortas (menos de 50 m de longitud), medianas (de 50 a 200 m), largas (de 200 a 2.000 m) y muy largas (más de 2.000 m de longitud).
Perfil (del suelo): corte vertical del terreno que expone la secuencia de los horizontes o capas naturales que componen el suelo. Un perfil se extiende desde la superficie del terreno hacia abajo hasta entrar en el material originario del suelo. En la región pampeana cordobesa este límite se halla generalmente entre 1,00 y 1,50 m.
Perfil modal: perfil del suelo que representa el conjunto de características típicas de una unidad taxonómica como la Serie o el Gran Grupo. Se considera como el ejemplar tipo representativo del concepto central que se tiene de un suelo. En esta publicación se lo denomina "perfil típico".
Perfil típico: ver perfil modal.
Permeabilidad (del suelo): cualidad del suelo que permite el paso del agua o del aire tanto en sentido vertical como horizontal. Se distinguen siete clases de permeabilidad: 1) muy lenta o nula (suelo impermeable o muy poco permeable), 2) lenta (suelo poco permeable), 3) moderadamente lenta, 4) moderada (suelo moderadamente permeable), 5) moderadamente rápida (suelo permeable), 6) rápida (suelo muy permeable) y 7) muy rápida (suelo excesivamente permeable).
Petrocálcico: horizonte cálcico continuo que se presenta cementado o endurecido. La cementación se produce con carbonatos y, accesoriamente, sílice. Suele ser equivalente a lo que genéricamente se conoce como "tosca".
pH (del suelo): medida de la acidez o alcalinidad del suelo. Un valor de pH 7 indica neutralidad, valores más bajos indican acidez y valores más altos alcalinidad. Se adoptó la escala siguiente:
Extremadamente ácido |
pH menor de 4,5 |
Muy fuertemente ácido |
4,5 - 5,0 |
Fuertemente ácido |
5,1 - 5,5 |
Medianamente ácido |
5,6 - 6,0 |
Débilmente ácido |
6,1 - 6,5 |
Neutro |
6,6 - 7,3 |
Ligeramente alcalino |
7,4 - 7,8 |
Moderadamente alcalino |
7,9 - 8,4 |
Fuertemente alcalino |
8,5 - 9,0 |
Muy fuertemente alcalino |
9,1 - 9,5 |
Extremadamente alcalino |
9,6 a más |
Los suelos con pH superiores a 8,5 o con un porcentaje de sodio intercambiable elevado (generalmente más del 15%) son tan alcalinos que el crecimiento de la mayoría de las plantas cultivadas se ve impedido. La alcalinidad se puede evaluar por la intensidad, por la profundidad en que aparece dentro del perfil y por la extensión que abarca en el terreno.
Plano aluvial: terreno plano y bajo situado sobre las márgenes de arroyos y ríos sujetos a inundaciones. Los suelos de los planos aluviales se desarrollan sobre sedimentos fluviales o fluvio lacustres depositados por las aguas.
Precipitación media: promedio de las lluvias, nieve y granizo caídos en un lugar, en cada unidad de tiempo, calculado sobre la base de registros diarios que se anotan en milímetros, con la boca del pluviómetro a 1,5 m sobre el suelo.
Día de lluvia: período de 24 horas (desde las 8 horas de un día hasta las 8 del día siguiente) en que se han leído por lo menos 0,3 mm en la probeta del pluviómetro a 1,50 m de altura sobre el suelo.
Número medio de días con precipitación: número que expresa la frecuencia media (mensual, estacional o anual) de días de lluvia. Se obtiene dividiendo la suma de días de lluvias correspondiente a una misma unidad de tiempo por el número de años del período.
Período más seco y más húmedo: cantidad total, mínima y máxima, de milímetros de agua caída en un lugar en una unidad de tiempo. Los valores mensuales, estacionales y anuales corresponden respectivamente al mes, estación y año más seco y más húmedo del período, pero no surgen de sumar los valores mensuales (o estacionales) de un mismo año.
Psamment: Suborden taxonómico de los Entisoles (ver), típicamente desarrollados sobre sedimentos arenosos de origen eólico en médanos estabilizados. Poseen una baja capacidad de retención de humedad como una de sus características sobresalientes.
Rabasto: especie de rastra o rastrón hecho de maderas o troncos destinados a allanar o nivelar el terreno.
Reducción de sales tóxicas: redistribución o disminución de las concentraciones de sales perjudiciales del suelo (algunas veces mencionado como "lavado" de suelo).
Propósito: crear en el suelo condiciones que permitan el desarrollo de una vegetación deseada.
Relieve: irregularidad de la superficie del terreno que dan carácter al paisaje de un área. Se distinguen: relieve pronunciado o excesivo, relieve normal (ondulado a suavemente ondulado), relieve plano o subnormal (llano) y relieve cóncavo (hoyas).
Rotación de cultivos: establecimiento de una sucesión planificada de cultivos de diferentes familias en un mismo terreno y durante un cierto número de años, en la que se pueden incluir pasturas y/o cultivos de cobertura.
Propósito: aprovechar equilibradamente las reservas del suelo, mantener su productividad y conservarlo. Contribuir al control de las malezas, insectos y enfermedades propias del cultivo repetido (monocultivo).
Serie de suelo: unidad taxonómica más pequeña del sistema de clasificación de suelos utilizado en este trabajo. Una Serie es un grupo homogéneo de suelos desarrollados sobre un mismo material originario y donde la secuencia de horizontes y demás propiedades son suficientemente similares a las de su perfil modal o concepto central. Dentro de cada Serie se admite una pequeña gama de variabilidad, siempre que no se aparte significativamente de su concepto central. Por lo tanto, los individuos que forman una Serie son esencialmente homogéneos en sus caracteres más importantes.
Siembra bajo cubierta: implantación de cultivos en línea entre pasturas, rastrojos o residuos de plantas sin una preparación previa de la sementera y realización de las operaciones subsiguientes de manera que se mantengan cantidades suficientes de residuos protectores, sobre o cerca de la superficie del suelo, durante la época de crecimiento.
Sistema de drenaje (avenamiento): sistema que consiste en colectar y eliminar el exceso de agua superficial o subsuperficial, evitando el anegamiento de campos ya saturados.
Propósito: eliminar el exceso de agua superficial o subsuperficial, mejorar las condiciones del crecimiento previniendo daños al cultivo y facilitando las labores agrícolas. La instalación de este sistema se completa sólo cuando se han efectuado todas las prácticas planeadas: colectores principales y secundarios, defensas ribereñas, tubos de drenaje y otras prácticas o estructuras individuales destinadas a la eliminación o control del exceso de agua.
Slickensides (término inglés): superficies brillosas y estriadas presentes en los horizontes arcillosos de ciertos suelos, debidas al deslizamiento de las caras de los agregados como consecuencia del hinchamiento y contracción del material, a su vez originado por los cambios en el contenido de humedad.
Sodio intercambiable: el sodio en estado de ion (Na+) adsorbido especialmente por la arcilla o el humus del suelo y que tiene la propiedad de intercambiarse con otros iones y pasar a la solución del suelo, confiriéndole alcalinidad. Cuando en algún horizonte el porcentaje de sodio intercambiable supera el 15% del total de cationes adsorbidos, el suelo se considera "sódico" y, por lo general, es fuertemente alcalino.
Solum: parte superior del perfil donde los procesos de la meteorización y formación del suelo actúan o han actuado más activamente. El solum comprende los horizontes “A” y “B”, pero no el substrato o material originario del suelo (horizonte “C”). En el solum se concentra casi la totalidad de la actividad biológica a cargo de las raíces de las plantas, así como de las lombrices, insectos, hongos, bacterias, etc.
Subgrupo: categoría del sistema taxonómico en que se dividen los Grandes Grupos. Cada Gran Grupo tiene un Subgrupo típico más otros que representan intergrados o extragrados. El Subgrupo típico corresponde al concepto central del Gran Grupo y no es necesariamente el más difundido. Los intergrados señalan transiciones hacia otros Órdenes, Subórdenes o Grandes Grupos; los extragrados presentan alguna propiedad que no corresponde al Gran Grupo, pero tampoco indica transiciones hacia ningún otro tipo conocido de suelos. Cada Subgrupo se identifica por uno o más adjetivos que califican el nombre del Gran Grupo. El adjetivo típico identifica al Subgrupo que tipifica al Gran Grupo. Por ejemplo: Argiudol típico.
Suborden: categoría del sistema taxonómico en que se dividen los Órdenes. Cada uno de los Órdenes se divide principalmente sobre la base de propiedades que influencian la génesis y son importantes para el crecimiento de las plantas o de propiedades que reflejan las variables más importantes dentro de los Órdenes. La última sílaba en el nombre de un suborden indica el Orden y la primera señala la propiedad diferenciadora del Suborden. Por ejemplo:“Udol”, en el que “Ud” significa húmedo y “ol” proviene de Molisol.
Substrato: ver horizontes del suelo (horizonte “C”).
Temperatura media: valor que expresa el promedio de las lecturas efectuadas diariamente en el abrigo meteorológico a 1,50 m de altura a las 8, 14 y 20 horas, más la corrección a 24 horas.
Temperaturas extremas (máxima y mínima absoluta): valores que expresan la temperatura máxima más alta y la mínima más baja registradas en cada unidad de tiempo del período considerado.
Térmico: régimen de temperatura en el que la temperatura media anual del suelo está entre 15º y 20º C.
Terraza de absorción: camellón o terraplén largo, ancho y sin gradiente, provisto de un canal paralelo que corta la pendiente. También se la conoce como "terraza plana". Puede ser de tipo paralela siguiendo las curvas de nivel o una combinación de ambas.
Propósito: reducir el daño por erosión interceptando el escurrimiento superficial y, al mismo tiempo, facilitar la infiltración del agua en el suelo a través del canal. Este tipo de terraza se instala en suelos permeables.
Terraza de desagüe: camellón o terraplén con gradiente provisto de un canal paralelo que corta la pendiente. También se la conoce como terraza "derivadora o de drenaje".
Propósito: reducir el daño por erosión, interceptando el escurrimiento superficial y conduciéndolo hacia una boca de salida o descarga estable a velocidad no erosiva.
Terraza paralela: ver terraza de desagüe.
Terraza plana: ver terraza de absorción.
Textura (del suelo): proporción relativa de las fracciones arena, limo y arcilla que componen la masa mineral del suelo. Sobre la base de las numerosas combinaciones posibles se han establecido doce "clases texturales" o "texturas". Estas clases, determinadas según las distintas proporciones de sus tres componentes son: arenosa, areno franca, franco arenosa, franca, franco limosa, limosa, franco arcillo arenosa, franco arcillosa, franco arcillo limosa, arcillo arenosa, arcillo limosa y arcillosa. Las texturas básicas son:
Arcillosa: clase textural donde predominan las partículas de arcilla con un mínimo de 40% de esta fracción y un máximo de 45% de arena o 40% de limo.
Arenosa: clase textural donde predominan las partículas de arena con más de 85% de esta fracción y menos de 10% de arcilla.
Franca: clase textural con tenores entre 7 y 27% de arcilla, 28 al 50% de limo y menos de 52% de arena.
Limosa: clase textural donde predominan las partículas de limo con más del 80% de esta fracción y menos del 12% de arcilla.
Thapto-árgico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo caracterizado por la presencia de un horizonte argílico enterrado, debajo de materiales más recientes que corresponden a un nuevo ciclo de pedogénesis.
Thapto-mólico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo, caracterizado por la presencia de un horizonte que reúne las condiciones de un epipedón mólico enterrado debajo de materiales más recientes, que corresponden a un nuevo ciclo de pedogénesis.
Thapto-nátrico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo caracterizado por la presencia de un horizonte nátrico enterrado debajo de materiales más recientes, que corresponden a un nuevo ciclo de pedogénesis.
Tierras: denominación general que se da al conjunto de los suelos en el estudio agrológico de una región. Se reserva la designación de "clasificación de las tierras" para el agrupamiento de suelos hecho en relación con la utilización humana y considerando sólo las propiedades que definen su aptitud para determinado uso. "Clasificación de los suelos" se refiere a su ubicación taxonómica. Se entiende por "suelo" a cada uno de los individuos naturales morfológicamente diferentes que forman parte de un paisaje y que se caracterizan por determinadas propiedades físicas, químicas, mineralógicas, etc.; las cuales se definen de acuerdo con formas establecidas mediante la descripción de un "perfil". Así, en esta publicación, "suelos" tiene una connotación técnica y "tierras" un significado de orden aplicado.
Típico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que representa al Gran Grupo en su concepto central.
Udico: (1) régimen de humedad en el que, en la mayoría de los años, los suelos no están secos por períodos que superen los 90 días. (2) adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que intergrada hacia un Suborden con régimen climático más húmedo.
Udifluvent: Gran Grupo taxonómico de los Fluventes (ver) que están bajo régimen údico de humedad. Pueden estar sujetos a anegamientos o inundaciones por lo menos una vez al año.
Udipsamment: Gran Grupo taxonómico de los Psammentes (ver), típicos de las regiones más o menos húmedas, desarrollados sobre arenas con apreciable cantidad de materiales meteorizables.
Udol: Suborden taxonómico de los Molisoles (ver) desarrollados típicamente en regímenes húmedos, o por lo menos que no están secos durante largos períodos en el año.
Udorthéntico: adjetivo que califica al Gran Grupo taxonómico y que da el nombre al Subgrupo que presenta caracteres de los Entisoles (ver) y se encuentran en climas húmedos.
Unidad cartográfica: conjunto de delineaciones que aparecen en un mapa de suelos identificadas por un mismo símbolo y compuesta por un mismo suelo o la misma combinación de suelos.
Uso de rastrojo: utilización en las tierras labradas de residuos de cultivos producidos en ese mismo lugar, incorporándolos o dejándolos sobre la superficie durante la parte del año en la que habitualmente ocurren períodos críticos de erosión.
Propósito: aumentar la infiltración, conservar la humedad, reducir las pérdidas de suelo y mejorar la aptitud para el laboreo.
Ustico: régimen de humedad en el que, en la mayoría de los años, los suelos se secan por períodos superiores a los 90 días, aunque inferiores a los 180 días.
Ustifluvent: Gran Grupo taxonómico de los Fluventes (ver) que se encuentran en climas subhúmedos (ver régimen ústico). Se encuentran en los planos aluviales de ríos y arroyos y generalmente están anegados en algún período coincidente con la estación lluviosa y de crecimientos de cauces.
Ustipsamment: Gran Grupo taxonómico de los Psammentes (ver), típicos de las regiones subhúmedas y semiáridas que se han desarrollado a partir de arenas ricas en minerales meteorizables.
Ustol: Suborden taxonómico de los Molisoles (ver), típicos de climas subhúmedos a semiáridos, y temperaturas templadas y cálidas, en general libres de problemas de hidromorfismo. El clima se caracteriza por precipitaciones escasas y de carácter errático, aunque generalmente ocurren en la estación de crecimiento de los cultivos.
Ustorthent: Gran Grupo taxonómico de los Orthentes (ver) que han evolucionado en condiciones semiáridas.AAPRESID. 2001. Siembra directa. Primer seminario para estudiantes. Resúmenes.
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